Jota de la Virgen del Pilar


Hay una cosa sobre la Virgen del Pilar, y es que en Zaragoza (y perdón si exagero por la generalización), hasta el más ateo la tiene devoción. No, no es que esté diciendo que nadie es realmente ateo, ni mucho menos: lo que quiero decir es que la Virgen del Pilar se convirtió en el símbolo de Zaragoza, igual que otros santos de su tierra, y, por tanto, una especie de símbolo de reivindicación regional.
Pero, por otro lado, no es menos cierto que en los años de la dictadura el régimen la utilizara incansablemente como símbolo de la nación, de la unidad, bla bla bla, porque su día coincide con el día de la Hispanidad, dícese, el día que Colón llega a lo que él creía que eran las Indias. Pero también por una historia de la guerra civil: durante un bombardeo (uno de los pocos) que los republicanos hicieron sobre Zaragoza, los proyectiles no explotaron; las autoridades golpistas, entre que eran supersticiosos y santurrones, y entre que sabían manipular la superstición y la ignorancia de las gentes, atribuyeron tal fallo a un milagro de la Virgen del Pilar, y elaboraron un cártel en el que se veía a la Pilarica protegiendo con su manto la ciudad de Zaragoza de las bombas… En fin.
No obstante, la Pilarica es de Aragón. Y Aragón es una tierra con un folklore muy rico; lo que ocurrió fue que los folkloristas del régimen, que trabajaban junto a la sección femenina, impulsados por su falsa visión del folklore español en general (aquello de demostrar la unidad a través de la diversidad) y su ansia a reducirlo todo a religiosidad popular, prácticamente desecharon todo el folklore aragonés y lo redujeron a la llamada "Jota de la Pilarica". En cierto sentido, de esto se burla La Bullonera en su reinterpretación de una jota muy famosa cantada durante la guerra de la independencia:
 
Jota de la Virgen del Pilar
 
La Virgen del Pilar dice
dice que no dice nada
dice que por más que diga
que se nos llevan el agua…
 
Popular/ La Bullonera