1969 tocaba a su fin, y se producía la primera deserción desde hacía tiempo: Spencer Dryden, en una mezcla de diferencias con la música y con la deriva política del grupo, junto al incidente de Altamont, del que declaró "… no parecían un montón de felices hippies en bellos colores. Parecían más como un grupo de tontos en tonos sepia" (ver Wikipedia), decide abandonar el grupo, y, al año siguiente se une al grupo de country New Riders of The Purple Sage. Será sustituido por Joey Covington, un batería más hard-rocker que dará al grupo el ritmo heavy que los nuevos tiempos demandaban. En 1970 morían dos grandes símbolos de la música hippie: Janis Joplin y Jimi Hendrix; la banda hizo un homenaje a la reina blanca del rock en un concierto en el que Marty Balin, gran amigo de la cantante, se negó a cantar.
En 1970, el grupo se encuentra en cierto receso: sólo se publica un single, “Mexico/ Have you seen the saucers”, y el recopilatorio The Worst of Jefferson Airplane. Durante este receso, Jorma Kaukonen y Jack Casady publican el primer álbum de su banda paralela de blues, Hot Tuna, ya formado a finales del 69; el grupo coexistió con Jefferson Airplane (luego Starship) sin necesidad de abandonarlo. Mientras tanto, Paul Kantner emprendió otro proyecto, acorde con su afición a la literatura de ciencia ficción: la grabación de disco Blow against the Empire, bajo el nombre de Paul Kantner/ Jefferson Starship, un grupo que reunía a un elenco de músico amigos, como los miembros del grupo Grace, Jack y Covington, pero también con David Crosby y Graham Nash de Crosby, Stills, Nash & Young, y Jerry Gracía, Bill Kreutzmann y Mickey Hart de Grateful Dead. El álbum fue el primer disco de rock en obtener el Premio Hugo de Ciencia ficción.
Pero es precisamente Marty Balin, el fundador y otrora líder del grupo, el que la abandona, aunque volvería para diferentes discos, el primero de ellos, Long John Silver, el segundo publicado tras su marcha. Hay quien dice que la separación se produjo a raíz del abandono de Balin de las drogas y el alcohol, impresionado por la muerte, sobre todo, de su buena amiga Janis, y a esto unir la guerra de egos, omnipresente en la historia de cualquier grupo de rock, una guerra muy palpable en los escenarios, entre Grace y Marty, que a veces, aunque raramente, parece empañar una actuación. Vino a sustituirle el ex Quicksilver Messenger Service David Freiberg. En 1971, Grace, con ciertos problemas de alcoholismo, sufre un grave accidente automovilístico que supone un parón en la agenda de la banda. Sin embargo, aquel año, Kantner y Slick sacarían un disco llamado Sunfighter, cuya portada era la foto de su hija China Kantner.
Jefferson Airplane publicaría aún tres discos más con su nombre: Bark (1971), Long John Silver (1972) –con Balin reincorporado-, y Thirty seconds over Winterland (1973), en directo desde la sala de Winterland y, de nuevo, sin Balin. Incorporaron además al violinista Papa John Creach y al batería, ex-Turtle, John Barbata. En 1974, la banda se convertiría en Jefferson Starship, en la que sólo Kantner y Slick eran Airplanes “originales”; Balin se uniría eventualmente al años siguiente para el disco Red Octopus. Para 1980, básicamente sólo queda Kantner, que se llevó la parte “Jefferson” y así nació Starship. Por no alargar la historia, aquí hay un excelente enlace, en inglés, que resume la historia del grupo y las idas y venidas de sus miembros (una de las partes más pesadas a la hora de escribir sobre la historia de un grupo): http://www.rollingstone.com/music/artists/jefferson-airplane/biography
Ahora bien, cuestiones emocionales y sentimentales, que me producían la necesidad de sacudir frenéticamente la cabeza o quedarme completamente quieto y extasiado, me llevaron a “rescatar” a una de las grandes bandas de mi adolescencia (no se confundan: tengo 31) para que, por mal que suene, cumplieran la función que entonces llevaron a cabo tan bien. Ello me llevó a recopilar algunas de las letras de sus canciones y traducirlas al castellano (creo que, quitando las desastrosas traducciones automáticas, hasta ahora, he sido el único: si no es así, pido disculpas), letras que me han sorprendido agradablemente. Y es que lo que más me gusta del grupo es su gran versatilidad, tanto temática como musical, sólo comparable, si acaso, a la de los Beatles, ya que también en Jefferson Airplane todos, o la mayoría de los miembros, colaboraba con sus canciones y estilos de interpretación, marcando en cada una de ellas su impronta personal y, a la vez, seguir siendo reconocibles como Jefferson Airplane: en ese sentido, era un grupo muy democrático.
Y así llega a su fin este curso acelerado de Jefferson-Aeromodelismo, en el que hemos traducido gran parte de las canciones de la banda estadounidense; se nos han quedado en el tintero muchas del Takes Off, algunos sencillos y dos de Surrealistic Pillow, que, no obstante, siempre podrán aparecer por aquí cuando a mí me dé la gana, o a petición popular. Y, tal vez, algún día, continuemos con los últimos discos de los 70, y hasta emprendamos un curso de Jefferson-Aeronáutica.
Los Jefferson Airplane son mi grupo de rock extranjero favoritos, lo cual no significa que sean mejores (o peores) que otros grupos de rock, pero tienen algo que a mí me llegó y me hace sentir bien: esa mezcla de buen rollo y angustia, cómo pasan de canciones muy optimistas a hablar de desastres nucleares, etc. Volvamos al principio, con la canción que abría su LP de 1966, Jefferson Airplane Takes Off: Jefferson Airplane despega de nuevo, vuela y llega a tiempo; monta en la música y echa abajo los muros porque tenía una revolución. “¿Te gustaría saber un secreto, sólo entre tú y yo?” Después de oírlos, ¿no te parece que hoy el cielo es verde? ¿Podrías responder por qué la gente se ama cuando no hay mañana? ¿O acaso serías capaz de recorrer un cuarto de milla en sólo diez segundos? Bueno, ya sabes que éste es el otro lado de esta vida, donde “cálido, suave, bonito y ahora son las palabras de lo que conozco”, mientras espero a la chica del blues del domingo, cuando se dé cuenta de que estos ojos amantes no la mirarán para siempre de esta manera… ¡No te escabullas!, y “camina conmigo a pesar de la noche” “a cualquier lugar donde podamos reír de nuevo”: “Amarte es todo lo que estará allí cuando mis sueños se hagan realidad”, “Uno comienza a leer entre las páginas de una mirada. El sonido de la música dormida y, de pronto, te has enganchado”, y todo lo que quiero es “verte montar”. “Cuando te vea la próxima vez con tristeza ¿sabrás por lo que he estado pasando?”… Pero ella hace lo que la place, y no parece que esté esperando por mí… Cada vez parece más improbable que resuene una voz que diga “¡Ve hacia ella! Yace esperándote”. “Oh, podrías escuchar miles de razones diferentes por las que no te puedes ir…”, “¿No lo probarás?”. Quizás, “la sombra en la niebla podría haber sido cualquiera” y todo lo que yo quería, a fin de cuentas, era “alguien a quien amar”, no perseguir conejos blancos, y dejar atrás el mundo de “corazones grasientos” y “fantásticas amantes de plástico”, fantásticas, sí, pero de plástico… “Y confío en que puedas verme como yo te he estado viendo”. Es lo mejor que puedo expresarme… Al fin y al cabo, no son más que los Blues desde un Aeroplano:
Blues from an Airplane
Do you know, how sad it is to be a man alone.
I feel so, solitary even in my home.
Without you, don’t know what to do,
And I don’t know where you go.
I can see, my life is meant to fall apart someday.
Just to be, a simple man who sadly lost his way.
Got no girl, so I got no world,
And I got no words left to say.
Hey, hey, hey, hey, hey, come, make me happy,
Like I never, known before.
Say, say, say, say, say, have you ever,
Known a heart, who needed you more.
Without you, what’s that sound around my heart I feel.
Something new, I’m sure the love you’ve given must be real.
I know now, and I’m sure of how,
I can be the man I feel.
I can be the man I feel.
Blues desde un aeroplano
¿Sabes lo triste que es ser un hombre solo?/ Me siento muy solitario hasta en mi casa./ Sin ti no sé qué hacer/ y no sé a dónde vas./ Puedo ver que mi vida está destinada a desmoronarse algún día./ Sólo ser un hombre sencillo que tristemente perdió su camino./ No tengo chica, así que no tengo mundo/ y no me quedan palabras que decir./ Hey, hey,… ven, hazme feliz,/ como nunca lo he sabido antes./ Di, di, di, ¿alguna vez has/ conocido un corazón que necesitase más?/ Sin ti, qué es ese sonido que oigo alrededor de mi corazón./ Algo nuevo, estoy seguro de que el amor que me has dado debe ser real./ Ahora sé y estoy seguro de cómo/ puedo ser el hombre que me siento.
Marty Balin & Skip Spence
JEFFERSON AIRPLANE LOVES YOU!
y yo también…