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¡Dadme un martillo, una campana y una canción!


album-if-i-had-a-hammer-songs-of-hope-struggleÉsta es una canción mítica, escrita entre Pete Seeger y Lee Hays en 1949. Al parecer, la primera vez que cantaron “If I had a hammer” fue en una reunión del Partido Comunista de Estados Unidos, como protesta contra el “Acta Smith”, una especie de control sobre los inmigrantes en el que se declaraba la adscripción política de ellos: una medida que pretendía preservar al país del peligro, pero que rebasaba los límites legales. Más tarde la cantaron con su grupo, The Weavers, y se convirtió, como casi todas sus canciones, en uno de los himnos del movimiento obrero y de los movimientos civiles (algo que, en realidad, era el mismo problema).

Desde entonces se convirtió en una inseparable del trovador de los derechos civiles:
If I had a hammer

If I had a hammerIf I had a hammer
I’d hammer in the morning
I’d hammer in the evening
All over this land
I’d hammer out danger
I’d hammer out a warning
I’d hammer out love between my brothers and my sisters
All over this land

If I had a bell
I’d ring it in the morning
I’d ring it in the evening
All over this land
I’d ring out danger
I’d ring out a warning
I’d ring out love between my brothers and my sisters
All over this land

If I had a song
I’d sing it in the morning
I’d sing it in the evening
All over this land
I’d sing out danger
I’d sing out a warning
I’d sing out love between my brothers and my sisters
All over this land

Well I’ve got a hammer
And I’ve got a bell
And I’ve got a song to sing
All over this land
It’s the hammer of justice
It’s the bell of freedom
It’s the song about love between my brothers and my sisters
All over this land

©1958, 1962 (renewed), 1986 (renewed)
TRO-Ludlow Music, Inc. (BMI)

http://www.arlo.net/resources/lyrics/hammer-song.shtml

Si yo tuviera un martillo

Si yo tuviera un martillo,/ martillaría por la mañana,/ martillaría por la tarde,/ por todo este país./ Martillaría el peligro,/ martillaría una advertencia,/ elaboraría el amor entre mis hermanos y mis hermanas/ por todo este país.// Si yo tuviera una campana,/ la tañería por la mañana,/ la tañería por la tarde,/ por todo este país./ Haría resonar el peligro,/ haría resonar una advertencia,/ haría resonar el amor entre mis hermanos y mis hermanas.// Si yo tuviera una canción/ la cantaría por la mañana,/ la cantaría por la tarde,/ por todo este país./ Cantaría alto el peligro,/ cantaría alto una advertencia,/ cantaría alto el amor entre mis hermanos y mis hermanas/ por todo este país.// Bien, tengo un martillo/ y tengo una campana/ y tengo una canción que cantar/ por todo este país./ Es el martillo de la justicia,/ es la campana de la libertad,/ es la canción sobre el amor entre mis hermanos y mis hermanas/ por todo este país.

Pete Seeger & Lee Hays

tumblr_lw40p3ux8s1qhwu63o1_400Como era natural, la canción no pasó de ahí, de los círculos progresistas (partidos, sindicatos, asociaciones, etc.) –y de los agentes federales que buscaban “agentes de Moscú”-, pero, años después, en 1963, supuso un cierto éxito en dos de sus versiones, seguramente interconectadas. La primera, fue la del grupo de folk Peter, Paul & Mary, un trío de folk algo más comercial que sus antecesores (pensando incluso que los Weavers tenían un carácter más comercial que los Almanac Singers), debido más bien al auge comercial que tuvo el folk por aquellas fechas: el trío cambió ostensiblemente la melodía de Seeger:

Y, seguramente, basándose en esta melodía, el cantante de rock’n’roll Trini López la ponía definitivamente en las listas de éxito:

Pero tal vez, y con todos mis respetos, más auténtica que la de López fue la adaptación del gran cantautor chileno Víctor Jara, declarado admirador de Seeger, incluida en su disco de 1969, Pongo en tus manos abiertas:

El martillo

Oh hermano, oh hermano.

Si tuviera un martillo
golpearía en la mañana
golpearía en la noche
por todo el país
Alerta el peligro
debemos unirnos para defender,
la paz.

Si tuviera una campana
tocaría en la mañana
tocaría en la noche
por todo el país
Alerta el peligro
debemos unirnos para defender,
la paz.

Si tuviera una canción
cantaría en la mañana
cantaría en la noche
por todo el país
Alerta el peligro
debemos unirnos para defender,
la paz.

Ahora tengo un martillo
y tengo una campana
y tengo una canción que cantar
por todo el país.
Martillo de justicia
campana de libertad
y una canción de paz.

http://www.cancioneros.com/nc/518/0/el-martillo-lee-hays-pete-seeger-victor-jara

Pero volviendo, para acabar, a Estados Unidos, también fue interpretada por su “ahijado” Arlo Guthrie, que fue para él tan inseparable como lo fue su padre, Woody:

Y, como colofón, aquí los tienes juntos:

Worried man blues


Una canción tradicional que ha conocido varias versiones, de las cuáles, probablemente sea la del gran Woody Guthrie la más famosa:

Worried Man Blues

It takes a worried man to sing a worried song
It takes a worried man to sing a worried song
It takes a worried man to sing a worried song
I’m worried now, but I won’t be worried long.

I went across the river and I lay down to sleepFolksinger Woody Guthrie
Went across the river and I lay down to sleep
Went across the river and I lay down to sleep
When I woke up, put the shackles on my feet.

It takes a worried man to sing a worried song
It takes a worried man to sing a worried song
It takes a worried man to sing a worried song
I’m worried now, but I won’t be worried long.

Twenty-nine links of chain around my leg
Twenty-nine links of chain around my leg
Twenty-nine links of chain around my leg
And on each link was the initial of my name.

It takes a worried man to sing a worried song
It takes a worried man to sing a worried song
It takes a worried man to sing a worried song
I’m worried now, but I won’t be worried long.

I asked the judge, what might be my fine
I asked the judge, what might be my fine
I asked the judge, what might be my fine
Twenty-one years on the Rocky Mountain Line!

It takes a worried man to sing a worried song
It takes a worried man to sing a worried song
It takes a worried man to sing a worried song
I’m worried now, but I won’t be worried long.

The train that I ride, is sixteen coaches long
The train that I ride, is sixteen coaches long
The train that I ride, is sixteen coaches long
The girl I love is on that train and gone.

It takes a worried man to sing a worried song
It takes a worried man to sing a worried song
It takes a worried man to sing a worried song
I’m worried now, but I won’t be worried long.

Blues del hombre preocupado

Esto lleva a un hombre preocupado a cantar una canción preocupada…/ Ahora estoy preocupado, pero no estaré preocupado mucho más.// Crucé el río y me tumbé para dormir…/ cuando desperté, pusieron grilletes en mis pies.// Estr.// Veintinueve eslabones de la cadena alrededor de mi pierna…/ y en cada eslabón estaba la inicial de mi nombre.// Estr.// Pregunté al juez, cuál podría ser mi condena…/ ¡Veintinueve años en la cordillera de las Montañas Rocosas!// Estr.// El tren en el que monto mide dieciséis vagones…/ la chica que quiero está en ese tren y se ha ido.// Esto lleva a un hombre preocupado a cantar una canción preocupada…/ Ahora estoy preocupado, pero no estaré preocupado mucho más.

Bells of Rhymney (poema de mineros)


Tyldesley_miners_outside_the_Miners_Hall_during_the_1926_General_StrikeEl poema que hoy traigo lo conocí, como tantas otras veces, a través de la música, en esta ocasión a través del gran trovador estadounidense Pete Seeger. La historia es ésta:

En 1926, debido a varias causas económicas, de la política económica del propio Churchill, y de los efectos de la I Guerra Mundial (cuyos efectos sobre la población obrera mundial deberían salir más a la luz), estalló en el Reino Unido un Huelga General, protagonizada sobre todo, por los mineros, que fracasó. El suceso ha tenido varios reflejos en la cultura popular, el más famoso quizás sea este poema que el poeta galés Idris Davies (Rhymney, 1905-1953) escribió reflejando el estado anímico de la minería de su ciudad, Rhymney, que nuestro gran Pete Seeger musicalizó poco después de la muerte del poeta galés:

The bells of Rhymney

Oh, what will you give me?
Say the sad bells of Rhymney.
Is there hope for the future?
Say the brown bells of Merthyr.
Who made the mine owner?
Say the black bells of Rhondda.
And who robbed the miner?
Say the grim bells of Blaina.

They will plunder willy-nilly,
Say the bells of Caerphilly.
They have fangs, they have teeth,
Shout the loud bells of Neath.
Even God is uneasy!
Say the moist bells of Swansea.
And what will you give me?
Say the sad bells of Rhymney.

Throw the vandals in court,
Say the bells of Newport.
All would be well if if if if if if…
Say the green bells of Cardiff.
Why so worried, sisters, why?
Sang the silver bells of Wye.
And what will you give me?
Say the sad bells of Rhymney.

Las campanas de Rhymney

Oh, ¿qué me daréis?/ Dijeron las tristes campanas de Rhymney./ ¿Hay esperanza para el futuro?/ Dijeron las campanas marrones de Merthyr./ ¿Quién hizo al propietario de la mina?/ Dijeron las negras campanas de Rhondda./ ¿Y quién robó a los mineros?/ Dijeron las graves campanas de Blaina.// Saquearán queramos o no,/ Dijeron las campanas de Caerphilly./ Tienen colmillos, tienen dientes,/ Dijeron las claras campanas de Neath./ ¡Hasta Dios está inquieto!/ Dijeron las húmedas campanas Swansea./ ¿Y qué me daréis??/ Dijeron las tristes campanas de Rhymney.// Lanzar a los vándalos en el tribunal,/ dijeron las campanas de Newport./ Todo estaría bien si, si, si, si, si, si…/ Dijeron las verdes de Cardiff./ ¿Por qué estáis tan abrumadas, hermanas, por qué?/ Cantaron las plateadas campanas de Wye./ ¿Y qué me daréis?/ Dijeron las tristes campanas de Rhymney.


La canción que Seeger hizo recibió varias versiones a lo largo de la historia. De todas ellas, quizás por ser una de las primeras, y aún de las primeras en clave de rock, destaca esta espléndida e impecable versión de los Byrds. Además, cuando los Byrds comenzaron a versionar en clave de folk-rock las canciones de Seeger, como ésta o “Turn! Turn! Turn!”, debido a la caza de brujas del fascista senador McCarthy, el gran trovador de los derechos civiles y laborales estaba vetado en la gran mayoría de medios de comunicación y poblaciones, incluso en el programa de radio que él había creado. Así que cuando los Byrds cantaron sus canciones fue como vengarle en cierta medida, hasta el punto que el mismo Seeger envió una carta al grupo agradeciéndoles su reconocimiento, lo cual viene a contradecir a los que sostienen que se enfadó con Dylan por la electrificación de sus canciones…

Inicios de la Canción de Autor: la Nova Cançó Catalana


Retomemos la historia donde la habíamos dejado: a principios de los 60, la canción de autor distaba mucho de ser un fenómeno de masas, entendida a la manera de los grandes cantantes rutilantes estrellas del pop o de la canción melódica(cosa que tampoco pretendió nunca).

Paco Ibáñez y Chicho Sánchez Ferlosio ya grababan discos, pero era difícil, cuando no imposible, escucharlos. Por su parte, Raimon ya cantaba también, y en 1964, a la vez que salía su 1er EP, aparecía en televisión cantando dos de sus canciones más emblemáticas: "Al vent" y "Diguem no". Aquello debió de ser un aldabonazo en la conciencia colectiva de los españolas, unos deslumbrados por el joven trovador de Xátiva, otros escandalizados por el espectáculo que estaba dando aquel rojo independentista: tal fue así, que Raimon no pudo volver a aparecer en televisión hasta casi los años 80. Y el caso es que estas dos canciones, especialmente la de "Al vent", no son excepcionalmente hirientes; pero en "Al vent", aunque en apariencia no diga "nada", se nota una fuerza y una rabia que los productores y directivos adeptos al régimen no podían consentir. Pero a Raimon no le hacía falta televisión para ser conocido: a mediados de los 60 él era ya todo un símbolo. Pero para entender esto, es preciso dar un poco marcha atrás…

La Nova Cançó Catalana

Si hubo alguna especie de movimiento o propuesta que pusiera en marcha todo el movimiento de cantautores españoles, ese fue, sin lugar a dudas, la Nova Cançó Catalana: el término "nueva canción" (en todos los lenguajes: nueva, nova cançó, nova canción o cantiga, kanta berria) viene a significar un movimiento musical en el que la canción se entiende como instrumento para una finalidad más o menos concreto, no para mero divertimento, distracción o deleite de los altos sentimientos; cada movimiento, incluso cada cantautor, lo entenderá de una manera u otra: denuncia cotidiana, protesta política, reflexión filosófica, reivindicación regional o nacionalista… Pero siempre con una enorme dimensión de profundidad del texto. Así pues, la Nova Cançó Catalana se configuró en torno a unas figuras concretas que entendían que la canción suya debía estar primero escrita en catalán, y, después, servir de instrumento para poner de manifiesto todas sus inquietudes, a la vez que cierta reivindicación, recuperación y dignificación de la lengua y la cultura catalana, así como de su literatura. Estos objetivos deslumbrarían a otros en Galicia y País Vasco que se concentrarían en colectivos iguales a Setze Jutges o Grup de Folk.
De todos los movimientos "cantautoriles" que ha habido, ha sido precisamente el de la Nova Cançó el más criticado y atacado, y no necesariamente desde la derecha o la extrema-derecha, sino incluso desde la izquierda y hasta dentro de la Nova Cançó, como veremos en seguida: las acusaciones más repetidas eran, a Setze Jutges, un supuesto carácter burgués (que ahora veremos), y a algunos miembros de Grup de Folk y de la posterior música Laietana, la acusación de no comprometerse (políticamente), además de la consabida acusación de ser nacionalistas: una verdad a medias, incluso a veces una mentira, pues las letras de temática regionalista o nacionalista, comparadas con la producción vasca, gallega, andaluza y canaria, son estadísticamente menores en el caso catalán. ¿Por qué? Quizás consideraran que ya el uso del catalán era suficiente para manifestar sus ideas al respecto.
Sobre el carácter burgués: tras el 39, de alguna manera, la burguesía catalana (no toda) consigue sobrevivir con cierta tolerancia por parte del régimen. Apunto en primer lugar lo de la burguesía catalana porque hay quien lo considera determinante en el nacimiento y desarrollo de la Nova Cançó ¿Fue eso verdad? Pues ni tanto ni tan calvo. Es cierto que algunos sectores de la burguesía apoyaron el desarrollo de la Nova Cançó con inversiones en la discográfica EDIGSA, pero al mismo tiempo, esa ayuda no fue distribuida por partes iguales. Por ejemplo, Raimon niega en una entrevista concedida a Triunfo que haya recibido esa ayuda. Por supuesto, el argumento de la financiación "burguesa" (y hay que decir que dentro de la burguesía catalana había de todo: desde viejos republicanos de Izquierda Republicana, pasando por los conservadores descendientes de los antiguos rabassaires -nacionalistas, pero anti-marxistas-, hasta independentistas) fue utilizado por la prensa hostil al fenómeno para desacreditarles como cantantes populares, es decir, en cuanto tenían la intención de dirigirse al pueblo: está claro que esta acusación dolía mucho más que la de comunista, nacionalista, anarquista o independentista, especialmente cuando muchos de sus miembros pertenecían a cierta burguesía (Llach era hijo de un médico republicano) o practicaban algún tipo de profesión liberal, como muchos de los miembros fundadores de Setze Jutges.
Sin embargo, aunque fuera efectiva esa gran ayuda económica por parte de elementos burgueses, esto no explica suficiente ni necesariamente el gran éxito a nivel nacional que la mayoría de sus componentes tuvieron, incluso internacionalmente. Si acaso, la única ayuda creíble y visible fue la creación del sello EDIGSA para distribuir la labor de este fenómeno.
Pero, ¿por qué es precisamente Cataluña, más precisamente Barcelona, en donde se da el pistoletazo de salida a la canción de autor española como fenómeno popular? Quizás la respuesta sea la misma que para explicar el arraigue de otros fenómenos musicales en distintos países, incluso ciudades: el carácter de Barcelona como ciudad universal. Desde siempre Barcelona ha sido uno de los punto turísticos más solicitados, quizás porque, incluso después del 39, Barcelona ha gozado siempre de cierta libertad creativa y de una vida cultural muy plena, mucho más que Madrid: por ejemplo, desde muy temprano se empieza a desarrollar cierto movimiento underground que el régimen dejó en paz porque era demasiado minoritario y subterráneo (underground) para suponer una seria amenaza contra su moral. Geográficamente influyó en su carácter el hecho de ser ciudad marítima y su proximidad con Francia: de esta manera era más fácil la importación (legal o clandestina) de discos de los cantautores franceses; en esto, el puerto de Barcelona actuó de la misma manera que el de Liverpool para los Beatles: los marineros traían discos y música hasta ahora desconocida.

Dado que Paco Ibáñez empieza trabajando en el extranjero y Chicho Sánchez Ferlosio graba anónimamente en Suecia, nos quedan Raimon y los Setze Jutges dentro de nuestras fronteras para proclamar ser la primera manifestación de Nueva Canción o canción de autor hecha dentro del país. Y aún más, mucho antes de que Paco y Chicho comenzaran a cantar, ya una antigua enfermera catalana del POUM exiliada en Francia había comenzado a hacer algo, imbuida en el ambiente bohemio parisino en un primer momento, que más tarde será reconocido como Nova Cançó catalana: Teresa Rebull comienza a hacer canción de autor en catalán entre los años 40 y 50 y en adelante. Ignoro si llegó a influir de alguna manera en los pioneros de la canción de autor catalana, pero su precursión de la Nova Cançó es totalmente indiscutible.

Els Steze Jutges, el Grup de Folk y otros


Raimon, cantante cívico ("La crisis de la Nova Cançó", Luis Carandell: www.triunfodigital.com) Raimon era un chaval valenciano, jativés (xatives) al que un día, de viaje en motocicleta, se le vinieron a la cabeza estas palabras "Al vent, la cara al vent, les mans al vent…". Como él mismo decía, en aquel año de 1959, con 18 añitos, compuso "con toda la ingenuidad de la juventud, pero con unas ansias tremendas de cambiar el mundo" (presentación de la canción durante el Recital de Madrid en 1976) una canción sencillísima, facilísima,pero que tendría una trascendencia impresionante. Raimon Peleguero Sanchís era hijo de un anarco-sindicalista que se preocupó de desmentir todo aquello que a su hijo le contaban en la escuela. Se trasladó a Barcelona para estudiar la licenciatura de Historia y pronto le empieza a influenciar el pensamiento italiano inspirado en Antonio Gramsci, así como, musicalmente, la canción de autor italiana (que influyó sobre los cantautores catalanes bastante, aunque a niveles menos notorios que la canción francesa), aunque previamente había pasado por la experiencia rockera con Los Diablos Rojos (de hecho, muchos insisten en que "Al vent" parece más una canción de rock que de autor). Comienza a grabar sus primeros sencillos en EDIGSA, la casa discográfica fundada explícitamente para los cantantes en catalán. Raimon es el primer cantautor catalán conocido y popular fuera de Cataluña o de los Països Catalans, y durante la década de los 60 se dedica a dar recitales a lo largo de casi toda la geografía española: Bilbao, Santiago, Madrid… En 1964 aparece en TVE, cantando dos de sus primeras canciones y, desde siempre, más emblemáticas: "Al vent" y "Diguem no". Esta actuación provoca un enorme revuelo, y, como resultado, es vetado en TVE hasta 1980. No sería su único "escándalo": el recital en 1968 en la facultad de Ciencias Políticas de Madrid, que sí había sido permitido tanto por el rector como por la gobernación civil, acaba mal: debido a ciertos "desórdenes" por parte de los estudiantes, la policía se cree que debe intervenir. El recital (del que se conservan muy pocas imágenes) acaba en desbandada y conInstantánea de Raimon durante el recital de la Facultad de Ciencias Económicas tomada por Juan Santiso Raimon escoltado por los estudiantes. Resultado: a Raimon se le prohíbe actuar en Madrid hasta 1976. Todos estos hechos ayudaron a engrandecer la figura de Raimon: para las autoridades, un artista subversivo y peligroso, al que permitían hasta cierto punto por mantener una imagen de cara al exterior (Raimon ya era famoso fuera de España); para la juventud contestataria, catalano-hablante y no, un símbolo de rebeldía; y para muchos cantautores noveles, un obligado referente: deslumbrados por sus actuaciones, a lo largo de toda España, aprecerán nuevos cantores como los que se juntaron en Voces Ceibes, Canción del Pueblo o Ez Dok Amairu.

Audiència_Pública__trabajo_colectivo_en_directo_de_algunos_miembros_de_Els_Setze Al tiempo que Raimon comenzaba sus andanzas en Barcelona (a dónde se había trasladado a estudiar), comenzaba en Cataluña un bonito proyecto enmarcado en la reivindicación y recuperación del catalán y de la cultura catalana en general a través de la música, cuando Delfí Abella (médico), Josep María Espinàs (novelista y abogado), Remei Marguerit (profesora de música), Miquel Porter (librero y crítico de cine) y otros, dentro de la bohemia estudiantil contestataria catalana de principios de los 60, en marcha Els Setze Jutges. El nombre del colectivo hace referencia a un trabalenguas catalán cuya elección, seguramente, podría esconder una doble intención:

Setze jutges d’un jutjat/ mengen fetge d’un penjat; si el jutjat es despengés es menjaria els setze fetges dels setze jutges que l’han jutjat.

(Dieciséis jueces de un juzgado comen hígado de un ahorcado; si el ahorcado se descolgara, se comería los dieciséis hígados de los dieciséis jueces que le juzgaron). Lluís Llach ("Cánticos de la Transición", Álvaro Feito: www.triunfodigital.com)

Fue casualidad (no se pretendió) que los jóvenes que reclutaron para el colectivo más ellos  sumaran justamente 16. Entre ellos se contaban los que luego serían los brillantes Joan Manuel Serrat, Quico Pi de la Serra, María del Mar Bonet, Guillermina Motta… y el nº 16, para algunos el mejor de todos: Lluís Llach (Raimon no perteneció oficialmente a los jueces, si bien colaboró con ellos). Venían de Cataluña, Valencia e Islas Baleares, unidos por la lengua catalana y su poesía. Las premisas del grupo son claras: defender y difundir la lengua catalana, así como su poesía, y rechazar el folklore tan utilizado (castigado) por el franquismo; para ello utilizan el estilo que entonces hacía furor entre los intelectuales Francesc "Quico" Pi de la Serra (www.triunfodigital.com)(término que uso sin intención peyorativa): la canción francesa de Georges Brassens, Jacques Brel, Leo Ferre, etc. De hecho, Espinàs es uno de los  primeros en cantar temas de Brassens. Tal vez fuera que se quedaron anticuados, o tMaría del Mar Bonet ("Cánticos de la Transición", Álvaro Feito: www.triunfodigital.com)al vez que sus preceptos eran muy estrictos, pero la verdad es que cuando cada uno de los Jutges empezó a evolucionar y a encontrarse a sí mismo musicalmente, el colectivo se disolvió. Había cierto abismo conceptual estético entre los más viejos y  los más jóvenes: los fundadores eran partidarios de la austeridad a ultranza, mientras que los más jóvenes, que, como dice Pi de la Serra, preferían  estar en el bar que ensayando, querían evolucionar hacia otro tipo de música, sin que ello resultara una renuncia al estilo francés: quizás por esta razón, Mª del Mar, más próxima a los cantos tradicionales baleares que a la tonada afrancesada, se pasara al grupo "rival", el Grup de Folk, y Quico Pi de la Serra acabara colaborando con ellos.

Joan Manuel Serrat en el teatro Tívoli, Barcelona 1972 http://www.sinera.org/tot-art/soliart/index.htm En lo tocante a la lengua también hubo mucha polémica: se recuerda la agria polémica que surgió cuando Serrat, rompiendo un poco los preceptos de los Jutges que le vieron nacer, comienza a cantar en castellano también, y a musicar poemas de Antonio Machado. Muchos ven esto como una traición, le acusan de oportunista, de querer ser comercial; Serrat se defiende con los mismos argumentos a día de hoy: "Canto en la lengua en la que me intentan reprimir", que también usará cuando se niegue a ir a Eurovisión, alegando querer cantar en catalán; quizás fuera una demostración de que él no había traicionado su lengua catalana. A raíz de este cambio de lenguaje, se forma eGuillermina Motta ("La crisis de la Nova Cançó", Luis Carandell: www.triunfodigital.com)n la Nova Cançó como dos frentes: los catalanistas y los bilingüsitas; los "catalanistas" (Raimon, Pi de la Serra) critican este cambio, porque, precisamente, se había comenzado a cantar en catalán como reivindicación de la lengua y la cultura catalana, y consideran que este cambio no responde sino a motivos económicos: Serrat ya había logrado un buen éxito cantando sólo en  catalán, así que cantando en castellano duplicaría las ventas. Del lado de Serrat estaban los "bilingüsitas": Guillermina Motta, Enric Barbat, y otros, que defendían la libertad de expresarse en el idioma que ellos eligieran. Quién tenía razón y quién no, entonces era difícil saberlo, ya que ambas razones eran buenas. No hay más que ver que con el tiempo, con la llegada de la democracia y de una normalización y dignificación de las lenguas cooficiales, estas tensiones (que en gran medida eran producto del furor juvenil) se relajaron, y nadie critica a ninguno ya por cantar en catalán o en castellano.

Grup de Folk Un poco después del acto fundacional de Setze Jutges se creo en Cataluña otra propuesta musical-cultural catalana opuesta a esta otra: El Grup de Folk compartía el amor a la lengua, pero no los preceptos culturales ni musicales de sus paisanos. Respecto al lenguaje, el Grup de Folk era mucho menos estricto en sus preceptos, y no rehúsan cantar en castellano versiones de canciones latinoamericanas o canciones tradicionales castellanas. Musicalmente estaban más predispuestos al folk norteamericano, con las enormes figuras de los años 50 como Mavina Reynolds y Pete Seeger, y con las nuevas: Dylan, Joan Baez…, además, aceptaban y usaban libremente (todo lo libre que se pudiera) el folklore catalán, valenciano y balear. Culturalmente no están dispuestos a rescatar figuras decimonónicas o de antes de la guerra, rendidos ante el encanto de nuevas poesías extranjeras como era la poesía beat, con un genial Allen Ginsberg al frente. Pau Riba,Pau Riba ("Cánticos de la Transición", Álvaro Feito: www.triunfodigital.com) quien, con razón, es apodado "l’enfant terrible de la Nova Cançó", actúa un poco como ideólogo del grupo, llega a tener declaraciones sobre los Jutges, para mi gusto, exageradas y fuera de lugar: no pienso que la contraposición cultural les separara, no cuando más adelante colaboraban todos juntos. Para Pau, los Jutges eran la expresión musical de la burguesía catalana, en cuanto querían recuperar escritores y poetas decimonónicos (curiosas declaraciones viniendo del nieto del excelso poeta catalán Carles Riba); su propuesta, frente a la burguesía literaria y la musical, representada por el gusto afrancesado, era, por un lado, el folk norteamericano extrapolado a Cataluña, y, por otro, las nuevas figuras musicales del movimiento hippy, del que Pau llega a pensar que fuera la respuesta contra la repersión franquista.

Sin embargo, desde mi punto de vista, las palabras de Riba son, hasta cierto punto, exageradas: si bien había cierto choque ideológico, la relación entre ambas tendencias no fue siempre necesariamente de rivalidad encarnizada: también hubo colaboraciones, más aún tras la ruptura de ambos grupos. En cualquier caso, es verdad que El Grup de Folk trajo cierto remozamiento a la Nova Cançó, lejos de parecer grises intelectuales marxistas como venía siendo la moda y que, de algún modo, los Festival del Parc de la Ciutadella. Maig del 67. En Xesco, a la dreta, Jaume Arnella al centre Jutges representaban (no digo que lo fueran). Entre los integrantes del Grup estaban Pau Riba, Jaume Sisa, Marina Rossell, Jordi Roure, Xesco Boix, Albert Batiste, los hermanos Casajona, y un largo etcétera. Junto a ellos colaboró el inmortal Ovidi Montllor, y también María del Mar Bonet y Pi de la Serra. Además, el Grup de Folk fue el precursor de un cierto movimiento hippie catalán, amante de los sonidos narcotizantes del rock progresivo, que alcanzaría su esplendor en la llamada Música Laietana. Estos folkloristas, quizás siguiendo el ejemplo musical de Dylan, derivarían a músicas más imaginativas: la psicodelia y el rock progresivo. A principios de los 70, Sisa, Batiste y Riba, junto a un ex-componente de los madrileños Canción del Pueblo, que vino a Barcelona buscando el ambientillo hippie, José Manuel Brabo, más conocido como "el Cachas" (por cierto, el primer cantautor que no usa la palabra) graban un sencillo conjunto titulado Miniaturas, que es una muestra de buen hacer psicodélico. Más adelante, Cachas, Sisa y Batiste, junto a Selene, formarían el grupo de rock progresivo Música Dispersa, que sólo registró un LP con el mismo título que el grupo.

Pau Riba: Elèctroccid àccid alquimístic xoc El Grup de Folk fue, en muchos aspectos, el germen de cierto movimiento musical hippie en los Països Catalans. Ya a finales de los 60, dentro de ellos, se habían creado grupos al estilo de los grupos de folk y folk-rock estadounidenses como Mamas & Papas o Peter, Paul & Mary: grupos como Esquirols o Falsterbo 3, que comenzaron versionando las canciones que habían oído a los folkies estadounidenses. Pero, mientras que algunos de sus miembros, como Xesco Boix -empedernido admirador de Pete Seeger- o Marina Rossell -romántica pero ardiente voz mediterránea-, se mantenían fieles a las formas musicales iniciales del colectivo, Pau Riba, Jaume Sisa, Albert Batiste y otros, que habían comenzado como cantautores folk, al estilo estadounidense, derivarían en una especie nueva de cantautores, diferentes hasta cierto punto de otros: en ellos, más que la letra, primaba más la creación musical. Sus nuevos referentes eran el Bob Dylan eléctrico, Jimi Hendrix, Beatles, los grandes grupos de rock progresivo (Pink Floyd, King Krimson), mientras que la letra pierde su efecto reivindicativo: se renuncia a hacer canción protesta y política, optando por otra variedad Jaume Sisa: Qualsevol nit pot sortir el sol de temas, que van desde lo más filosófico del "Es fa llarg esperar" de Riba a lo más naïve del "Qualsevol nit pot sortir el sol" de Sisa. Estos cantautores son los precursores de la llamada Música Laietana, un fenómeno en el que brillaban los grupos de rock progresivos catalanes como Iceberg, Máquina!, Companya Elèctrica Dharma, Ia & Batiste, etc., y rumberos rumbosos como el inolvidable Gato Pérez, cronista de la Barcelona de la transición. Muchos de ellos se dieron cita en aquel macro festival, a imitación del famoso Woodstock: Canet Rock, compartiendo cartel con Mª del Mar Bonet (a pesar de que el elemento reivindicativo político había desaparecido)Ramón Muntaner ("Cánticos de la Transición", Álvaro Feito: www.triunfodigital.com), Lole y Manuel -los gitanos hippies- y Gualberto y su flamenco psicodélico.

A mediados de los 70, a pesar de la total o parcial disolución de los dos antiguos grupos principales de la Nova Cançó, llegan nuevos talentos tales como el genial Ramón Muntaner, el melódico Joan Isaac, el romanticismo progresivo de Joan Baptista Humet, el folk-rock duro de Coses… Y muchos más, demostrando que la canción de autor catalana todavía podía ofrecer nuevas sorpresas, especialmente durante aquellos duros años de cambio político, que es cuando más se les necesitó tal vez.

No cabe a día de hoy (sería absurdo) decantarse ferozmente por una de las dos tendencias, cuando los mismos miembros, al disolverse los colectivos, se acercaron generalmente. Els Setze Jutges aportó la recuperación de las letras catalanas y la entrada en España de la Chanson, mientras que El Grup de Folk importó la canción protesta norteamericana, la música contemporánea y la recuperación del folklore. Sin duda alguna, los catalanes fueron los iniciadores del estilo, especialmente su cabeza más visible: Raimon, sin olvidar a “l’avià –la abuela- de la Nova Cançó”, Teresa Rebull.

We shall not be moved/ No serem moguts/ Non nos van mover/ No nos moverán


Tal vez sea la canción protesta más conocida mundialmente, y, efectivamente, fue uno de los himnos del 68 que algunos cantautores, a pesar del abierto carácter contestatario de la canción, tuvieron la audacia de interpretar.
Según Xesco Boix, está canción es una canción tradicional de lucha del sindicato algodonero de los obreros del sur de Estados Unidos. La canción alcanzó gran percusión cuando Pete Seeger y su grupo, The Weawers, la interpretó.

We shall not be moved


We shall not, we shall not be moved
We shall not, we shall not be moved
Just like a tree that’s standing by the water
We shall not be moved

We shall not, we shall not be moved
We shall not, we shall not be moved
The union is behind us,
We shall not be moved

We shall not, we shall not be moved
We shall not, we shall not be moved
We’re fighting for our freedom,
We shall not be moved

We shall not, we shall not be moved
We shall not, we shall not be moved
We’re fighting for our children,
We shall not be moved

We shall not, we shall not be moved
We shall not, we shall not be moved
We’ll building a mighty union,
We shall not be moved

We shall not, we shall not be moved
We shall not, we shall not be moved
Black and white together,
We shall not be moved

We shall not, we shall not be moved
We shall not, we shall not be moved
Young and old together,
We shall not be moved

extraído de http://www.geocities.com/CapitolHill/7840/lyrics.htm

Ésta es la versión que realizó un grupo australiano llamado The Seekers:

 

A mediados de los 60, los aficionados catalanes al folk norteamericano que conformaron El Grup de Folk oyeron la cnación. Uno de ellos, Xesco Boix, admirador de Seeger que llevó sus preceptos ideológicos y musicales al caso catalán, realizó una versión en catalán del tema:

No serem moguts

No serem, no serem moguts!
No serem, no serem moguts,
igual que el pi aprop de la ribera,
no serem moguts !

Ens empara el Sindicat, no serem moguts!
Ens empara el Sindicat, no serem moguts,
igual que el pi aprop de la ribera,
no serem moguts!
No serem, no serem moguts!
No serem, no serem moguts,
igual que el pi aprop de la ribera,
no serem moguts!

Lluitarem i aguantarem, no serem moguts!
Lluitarem i aguantarem, no serem moguts,
igual que el pi aprop de la ribera,
no serem moguts!
No serem, no serem moguts!
No serem, no serem moguts,
igual que el pi aprop de la ribera,
no serem moguts!

El Nord i el Sud tots junts, no serem moguts!
El Nord i el Sud tots junts, no serem moguts,
igual que el pi aprop de la ribera,
no serem moguts!
No serem, no serem moguts!
No serem, no serem moguts,
igual que el pi aprop de la ribera,
no serem moguts!


Traducción y arreglos
Xesco Boix

(extraído de www.kumbaworld.com)

La canción, gracias a la labor de Xesco y otros miembros del Grup de Folk, se expande por toda España entre los jóvenes que identifican el mensaje de la canción con el caso español. De ella realizaron versiones Xoan Rubia, en gallego (lamento no disponer de ella) e Ignacio Fernández Toca, miembro de Canción del Pueblo, en castellano. Otro miembro de Canción del Pueblo la quiso grabar, pero obtuvo una denegación por parte de las autoridades; por esa razón, Adolfo Celdrán, a finales de los 70 la incluyo en su LP casi-recopilatorio Denegado:

No nos moverán



No, no nos moverán.
No, no nos moverán.
Igual que el pino junto a la ribera,
no nos moverán.

Si quieren disolvernos
no nos moverán.

Haciéndonos promesas
no nos moverán.

Si buscan esquiroles
no nos moverán.

No, no nos moverán.
No, no nos moverán.
Igual que el pino junto a la ribera,
no nos moverán.

Los viejos reaccionarios
no nos moverán.

Cambiando de chaqueta
no nos moverán.

unidos venceremos
no nos moverán.

No, no nos moverán.
No, no nos moverán.
Igual que el pino junto a la ribera,
no nos moverán.

Aquí puedes oírle acompañado por Fernández Toca, Elisa Serna, Pablo Guerrero y Manuel Toharia.

 http://www.goear.com/files/localplayer.swf

Pero obviamente la versión en castellano más conocida es ésta que interpretó Joan Baez, conteniendo una introducción que corresponde a los versos de Pablo Neruda. Cuando Joan Baez vino la primera vez a España, entre las canciones que las autoridades la prohibieron figuraba ésta; por eso sólo se limitó a aparecer en un programa de televisión en el que protagonizó un simpático escándalo al dedicarle una canción nada más y nada menos que a "la Pasionaria"; pero cuando pudo venir a finales de los 70 la cantó para regocijo de n público que llevaba mucho tiempo esperándola:

Sube a nacer conmigo, hermano.
Dame la mano desde la profunda zona de tu dolor diseminado
no volverás del fondo de las rocas
no volverás del tiempo subterráneo
no volverá tu voz endurecida
no volverán tus ojos taladrados
yo vengo a hablar por vuestra boca muerta
a través de la tierra juntad todos los silenciosos labios derramados

y desde el fondo habladme toda esta larga noche
como si yo estuviera con vosotros anclado
contadme todo, cadena a cadena, eslabón a eslabón, y paso a paso
afilad los cuchillos que guardasteis
ponedlos en mi pecho y en mi mano
como un río de rayos amarillos
como un río de tigres enterrados
y dejadme llorar horas, días, años, edades ciegas, siglos estelares

dadme el silencio, el agua, la esperanza,
dadme la lucha, el hierro, los volcanes
apegadme los cuerpos como imanes
acudid a mis venas y a mi boca
hablad por mis palabras y mi sangre

estribillo: (chorus)

¡No, no, no nos moverán! no, no nos moverán!
como un árbol firme junto al río
no nos moverán.

Unidos en la lucha, no nos moverán
Unidos en la lucha, no nos moverán
como un árbol firme junto al río.
¡No nos moverán
no, no, no nos moverán! no, no, no nos moverán!
como un árbol firme junto al río
no nos moverán.

¡Unidos en la huelga, no, no, no nos moverán!
¡Unidos en la huelga, no, no, no nos moverán!
Como un árbol firme junto al río
no nos moverán, ¡no nos moverán!

 

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