Seguramente habrá quien diga de los que nos oponemos a la intervención militar, dígase guerra, en Siria por parte de la OTAN, que somos unos insensibles ante los abusos que el régimen de Basel al-Asad ha estado cometiendo sobre su población civil; pero básicamente hay está la razón de nuestra crítica: con la revuelta que se ha convertido en una guerra civil se lleva más de un año; los refugiados se agolpaban en la frontera con Turquía huyendo… Pero no sólo de al-Asad.
Nos hemos opuestos a esta intervención y a la toma de partido por parte de occidente a favor de los rebeldes por estas razones:
1.- Al-Asad no es el único dictador en el mundo actualmente que masacra a su población sin contemplación alguna; por lo que deducimos que tras esto hay intereses no necesariamente humanitarios.
2.- Entre los rebeldes hay de todo, pero ya no son aquellos que en la primavera árabe se levantaron pidiendo democracia: varios testimonios de corresponsales y, lo que es más grave, refugiados, aseguran que muchos de los milicianos rebeldes son combatientes del integrismo más sanguinario. De lo cuál se deducen otras dos posturas:
3.- Hay varias voces a tener en cuenta que tienen serias dudas sobre que el ataque con armas químicas, la línea roja que permitiría el asalto a Siria, lo hiciera verdaderamente el gobierno. Teorías al margen, muchas voces creíbles piensan que fueron los “rebeldes”. (NOTA: cuando en las noticias se trata este asunto, con los discursos de fondo de Estados Unidos, UK y Francia, suele decirse “Hay pruebas del uso de armas químicas”; pero rara vez he escuchado “uso de armas químicas por parte del régimen”).
y 4.- Será devastador para una población lo ya suficientemente martirizada por dos frentes brutales, como son el gobierno de al-Asad y los supuestos rebeldes (sean quienes sean) añadir un tercer frente en forma de bombardeos “aleatorios”, que nunca se producen donde dicen que van a ser…
(añadimos) 5.- Resulta preocupante que no hayamos vuelto a oír nada sobre el estado actual de Libia tras la caída de Gadafi…
Y, dicho sea de paso, no consideramos en absoluto a Putin como el defensor de los países no alineados amenazados por la OTAN, como alguna vez algún comentarista dejó caer por aquí: Putin es tan aprovechado como Obama, y lo único que le interesa es mantener sus privilegios e intereses en la región.
En 1938, Miguel Hernández compuso junto al brigadista Lan Adomian esta hermosa canción antibelicista: supone todo un contraste con su poética de esta etapa de exaltación revolucionaria esta reflexión sobre la guerra. Personalmente creo que las razones para invadir Siria son las mismas por las que en su día no se ayudó a la República española…
Coro Mixto dirigido por Salvador Moroder
La guerra, madre
La guerra, madre la guerra. Mi casa sola y sin nadie. Mi almohada sin aliento. La guerra, madre: la guerra. Mi almohada sin aliento. La guerra, madre: la guerra.
La vida, madre: la vida, La vida para matarse. Mi corazón sin compaña. La guerra, madre: la guerra. Mi corazón sin compaña. La guerra, madre: la guerra,
¿Quién mueve sus hondos pasos En mi alma y en mi calle? Cartas moribundas, muertas. La guerra, madre: la guerra. Cartas moribundas, muertas. La guerra, madre: la guerra.
After September 11, the US president George W. Bush decided to take a rodeo around the world for, officially, bring back security to his citizens, but, unofficially, for other dark and no good intentions. So, at the beginnings of 2003, he gave an ultimatum to that dictator, whose elimination sure shall bring back peace to the world: Saddam Hussein. Telling Irak had massive destruction weapons, he begun to seek supports among the international allies chairmen: among them, Tony Blair, UK prime minister, and José María Aznar, chairman of Spain. The preparatives went on, although inspectors of UN declarated they hadn’t found any proof of the existence of those weapons. At January 29, seven Europeans leaders signed a letter of support to US, among them, president Aznar. At Mars 15, in Azores (Portugal), Bush, Blair and Aznar, took a summit in which they signed their alliance, and the Mars 18, Mr. Aznar, in a tense debate at the Spanish parlament, with the only absolute majority of his party, authorized the send of 900 Spanish soldiers in support of NATO armies, although declares they will not take part in the combats, but to do humanitarians actions; the rest of parties, of many conditions, objected, but in vain. At Mars 19, begun the invassion. Today, president Aznar still upholds there were that kind of guns in Irak, but he cannot tell where the hell…
All along the world, people of several conditions, shown their rejection to war. In Spain, it was very important the movement of the artists and intellectuals: actors and actressess, musicians, writers, poets… The old Spanish songwriters got out to the marchs: Paco Ibáñez, Luis Pastor, Labordeta (who, also parliamentarian, show his rejection in tenses debates too, taking all of our admirations: that’ll be other day), Lluís Llach and Adolfo Celdrán, among others. Some of them sung old songs, but new songs too, as this of Adolfo, that sadly became a little prophetic. They are our pride:
El cielo es negro y rojo Es ocre, como el suelo Entre el cielo y la tierra Tan sólo caben muertos
Llueve arena en Bagdad Tormenta del desierto Ni el desierto irakí Soporta tanto infierno
NO a vuestra guerra
Los que mandan, nos dicen Que es bueno lo que han hecho: La diana en nuestra frente La medalla en su pecho
Miramos hacia arriba Un avión surca el cielo Tal vez será la muerte Que va a poner sus huevos
NO a vuestra guerra
Una niña sin piernas Llora y llora, y sabemos Que allí, sin medicinas Llora su propio entierro
Y mañana es ayer Y el cielo es el infierno Y liberan matando Y resisten muriendo
NO a vuestra guerra
No to your war
The sky is black and red/ is ocher, like the soil/ Between the sky and the earth/ only deads fit// It’s raining sand over Bagdad/ Desert storm/ Not even the Iraki desert/ can hold such hell// NO to your war// The rulers tell us/ it’s right what they have done:/ the dartboard on our front/ the medal on their breasts.// We look upon/ A plain sail through the sky/ Perhaps it’s death/ that is going to lay its eggs// NO to your war// A legless girl/ cries and cries, and we know/ that there, without medicines/ she’s crying her own burial// And tomorrow is yesterday/ And the sky is hell/ And they set free killing/ And they resist dying/ NO tou your war
This is a kind of anti-belicist song by that great Catalan songwriter and composser, Lluís Llach, of the year 1969. But it’s against the official vision of the Spanish civil war: Franco won the war (don’t forget: against democracy) and, so, there were peace because he –they said- “made a country for all the people”; and Llach destroys all these myths: the price of his victory was the dictatorship, the lack of democracy, the lack of free spech, the fear, etc. His song ends with a call to hope and struggle.
This is the version he sang in a great concert, in 1976 January, at Barcelona, the first after a long silence, that was recorded in a live album: Barcelona. Gener 1976:
Respon-me
Amic que tants de cops em parles, aquí assegut, ulls abatuts, mai no has sabut dir-me allò just del nostre absurd.
I avui que tinc el cos ple d’ànsia, la meva sang, les meves mans, els meus afanys, aquest pocs anys m’estan cridant.
Qui va vèncer? Qui dels ferros forjats per les bombes va fer un poble nou? Qui va vèncer? Qui damunt de tants cossos aixafats va aixecar aquella casa per a tothom? Qui va vèncer? Qui del llit s’aixeca amb el dret d’anar pel carrer sense sentir por? Pots dir-m’ho tu? Pots dir-m’ho tu? Saps que ningú. Tots hem perdut, tots som vençuts.
I amic, renegaràs amb força d’aquesta nit, de qui som fills, d’aquest destí, del nostre ahir que ens ha traït.
Però, amic, més que buscar respostes, cal adreçar el foc, la llar, hem de guanyar tots aquests anys que estan cridant:
Qui va vèncer?…
Answer me
My friend, you that so many times talk to me/ sitting here,/ bowed,/ you never has known/ say the just thing/ of our absurd.// And today that my body is filled with anxiety,/ my blood,/ my hands,/ my longings,/ these few years/ are crying to me.// Who overcame?/ Who made of the irons wrought by the bombs/ a new people?/ Who overcame?/ Who upon of so many squashed bodies/ rose a house for everybody?/ Who overcame?/ Who get up from his bed with the right of walking/ in the street without feeling fear?/ Can you tell me?/ Can you tell me?/ You know it’s nobody./ Everyone of us have lost,/ everyone of us are beaten.// And friend, you shall deny with might/ this night,/ of which we are the children,/ of this destiny,/ of our yesterday/ that has betrayed.// But, friend, rather than search for answers,/ it’s neccesary make ready/ the fire, the home,/ we have to win/ all these years/ that are crying:// Who overcame?…
En su disco de 1968, The Twain shall meet(Los dos se encontrarán), Eric Burdon & The Animals incluían esta pieza magistral de canción antibelicista. “Sky pilot”, piloto del cielo, es, en realidad un capellán militar que dice una misa y bendice a los soldados justo antes de ir al frente. Eric Burdon se muestra crítico con esta forma de religión, con las palabras que los capellanes les dicen a los soldados, manipulando sus sentimientos y asegurándoles que no deben de sentirse mal, cuando, al final, uno de los soldados le recuerda uno de los mandamientos sagrados en los que él, por su profesión, no sólo debería creer sino cumplir y hacer cumplir. La banda introduce, hacia la mitad de la canción, sonidos de, probablemente, películas bélicas, y el sonido de las gaitas que amenizan tanto las marchas militares como los funerales del ejército británico: “All The Bluebonnets Are Over The Border”, interpretada por la Royal Scots Dragoon Guards y que fue grabado por Burdon. Según el enlace de la wikipedia, Burdon recibió una airada carta desde el gobierno o desde la casa real británica reprochándole el uso sin permiso de los gaiteros del ejército (un pecado mucho mayor comparado con el de haber antepuesto los intereses de la imperial casa Windsor a los Derechos Humanos en India, Indochina, Australia… Iraq y Libia).
Excelente montaje el de este vídeo
Sky Pilot
He blesses the boys as they stand in line the smell of gun grease and the bayonets they shine he’s there to help them all that he can to make them feel wanted he’s a good holy man
Sky pilot, sky pilot, how high can you fly? you’ll never, never, never reach the sky.
He smiles at the young soldiers tells them it’s all right he knows of their fear in the forthcoming fight soon there’ll be blood and many will die mothers and fathers back home they will cry
Sky pilot, sky pilot, how high can you fly? you’ll never, never, never reach the sky.
He mumbles a prayer and it ends with a smile the order is given they move down the line but he’ll stay behind and he’ll meditate but it won’t stop the bleeding or ease the hate As the young men move out into the battle zone he feels good, with god you’re never alone he feels tired and he lays on his bed hopes the men will find courage in the words that he said
Sky pilot, sky pilot, how high can you fly? you’ll never, never, never reach the sky.
You’re soldiers of God, you must understand the fate of your country is in your young hands may God give you strength do your job real well if it all was worth it only time it will tell In the morning they return with tears in their eyes the stench of death drifts up to the skies a soldier so ill looks at the sky pilot remembers the words "thou shalt not kill."
Sky pilot, sky pilot, how high can you fly? you’ll never, never, never reach the sky.
Bendice a los chicos mientras están en fila/ el olor de la grasa de las armas/ y las bayonetas que abrillantan/ está ahí para ayudarles en todo lo que pueda/ para hacerles sentirles útiles, es un buen hombre santo./ Piloto del cielo,/ ¿a cuánta altura puedes volar?/ Nunca, nunca, nunca alcanzarás el cielo./ Sonríe a los jóvenes soldados/ les dice que está bien/ sabe de sus miedos en la próxima batalla/ pronto habrá sangre y muchos morirán/ las madres y padres de vuelta a casa llorarán.// (Estr.)// Masculla una oración y la termina con una sonrisa/ la orden ha sido dada/ se mueven hacia la línea/ pero él se quedará atrás y meditará/ pero eso no parará la sangría ni mitigará el odio/ Mientras los jóvenes se adentran en la zona de batalla/ él se siente bien, con Dios nunca estás solo/ Se siente cansado y se echa en su cama/ confía en que los hombres encontrarán el valor/ en las palabras que dijo.// (Estr.)// Sois soldados de Dios, debéis comprender/ que el destino de vuestro país está en vuestras jóvenes manos/ Que dios os dé fuerza/ haced vuestra labor muy bien./ Si todo eso valía la pena/ sólo el tiempo lo dirá/ Por la mañana vuelven/ con lágrimas en sus ojos/ el hedor de la muerte se eleva a los cielos/ un soldado muy enfermo mira al piloto del cielo/ recuerda las palabras/ “No matarás.”/ Piloto del cielo,/ ¿a cuánta altura puedes volar?/ Nunca, nunca, nunca alcanzarás el cielo.
Eric Burdon, Vic Briggs, John Weider, Barry Jenkins, & Danny McCulloch
Acaba su actuación pidiendo el cese de hostilidades en sitios como Bosnia y Belfast
Aunque aún no estoy preparado para comenzar una segunda entrega de Jefferson-aeromodelismo, voy a hacer una presentación del disco antes de presentar la canción. Tras la gran movida de finales de los 60 (las giras, el festival de Woodstock, la pérdida de algunos amigos por culpa de las drogas…), en 1970, a parte de un sencillo, Jefferson Airplane intentó grabar un nuevo disco, pero no les fue posible por diversas circunstancias. Grace Slick y Paul Kantner iban a ser los orgullosos padres de China Kantner, y Marty Balin, inmerso en un proceso de desengaño y alejamiento de los excesos de la cultura hippie, abandonaría la banda durante un tiempo. En ese año de receso, Paul Kantner, con un grupo de músicos amigos, grabaría, bajo el nombre de Paul Kantner/ Jefferson Starship, el disco de rock-ciencia ficción Blow against the Empire; mientras que Jorma Kaukonen y Jack Casady comenzarían con la banda paralela de blues Hot Tuna. Finalmente la banda, sin Marty Balin ni Spencer Dryden, ya hacía tiempo sustituido por Joey Covington, se reúnen para grabar un nuevo disco en 1971: Bark (ladrido), con un buen número de excelentes canciones “con mensaje”, sintetizando el espíritu contestatario de Volunteers y el de ciencia ficción de Blow against the Empire. El hueco dejado por Balin se rellenaría con algunos vocalistas invitados, como Bill Laudner para esta canción firmada por Paul Kantner. “War movie”, película de guerra, habla sobre un suceso futuro que habrá de ocurrir en 1975: la movilización de todo el pueblo de Estados Unidos contra la guerra; es una canción que mezcla las ideas revolucionarias y pacifistas de Kantner con su afición a la ciencia ficción, una especie de profecía para dentro de 4 años en el que prevé la batalla final entre la gente de la tierra y los “invasores extraterrestres”, es decir, el gobierno belicista de Estados Unidos, en la que, además, parece haber un mensaje para Marty Balin deseando su regreso a la banda… Una canción que puede ser considerada casi profética, porque precisamente en 1975 fue cuando, con la derrota de Vietnam del sur y de sus aliados los estadounidenses, se puso por fin término a una guerra en la que no pintaban absolutamente nada:
War Movie
In nineteen hundred and seventy-five, all the people rose from the countryside, locked together hand in hand all through this unsteady land, to move against you government man do ya’ understand, gonna roll roll roll the rock around roll roll roll the rock around lift the rock out of the ground At the Battle of Forever Plains, all my people hand in hand in hand in the rain, the laser way won the day without one single living soul going down. the government troops were circled in the sun gun found themselves on the run… from our nation, the rock is raised no need to hide from the other side now… transformation call high to the constellation headquarters call high to the most high directors send out the transporting systems and send out the sun finders thirteen battalion of mind raiders three hundred master computer killers from great platforms in the mountains twenty mile lasers & great giant trackers… twenty miles south now in 1975 all my people rose from the countryside until we meet again and touch our hands together in another land until we meet again & see each others minds we three have met again and touched our hands talking of Napoleon in the garden we will muffle the drums tomorrow mornin gonna roll roll roll the rock around gonna roll roll roll the rock around lift the rock out of the ground
En mil novecientos setenta y cinco,/ todo el pueblo se levantó desde el campo,/ se cerraron mano en mano a través de esta insegura tierra,/ para moverse contra contra ti gobernante, ¿entiendes?,/ vamos a hacer rodar rodar rodar la roca, rodar rodar rodar la roca/ levantar la roca del suelo/ En la Batalla de las Llanuras Eternas,/ todo mi pueblo mano a mano a mano en la lluvia,/ el estilo del láser salvó el día sin que una sola alma cayera./ Las tropas del gobierno daban vueltas en el sol, el arma los encontró en la/ huida… de nuestra nación, la roca se ha levantado, no hay necesidad de esconderse/ del otro lado ya… transformación/ llamad fuerte a los cuarteles generales de la constelación, llamad fuerte a los/ directores supremos para enviar los sistemas de transporte y/ que envíen a los descubridores del sol/ trece batallones de invasores de mentes, tres mil ordenadores/ maestros asesinos desde las grandes plataformas de las montañas/ láseres de treinta y dos kilómetros y grandes rastreadores gigantescos…/ treinta y dos kilómetros/ al sur ahora en 1975 todo mi pueblo se levantó en los campos hasta que/ nos encontramos otra vez y toquemos juntos nuestras manos en otra tierra,/ hasta que nos encontremos otra vez y nos veamos las mentes los unos a los otros, nosotros/ tres nos hemos encontrado otra vez y tocado nuestras manos hablando de/ Napoleón en el jardín, amortiguaremos los tambores mañana/ por la mañana, vamos a hacer rodar rodar rodar la roca, vamos a hacer rodar rodar/ rodar la roca, levantar la roca del suelo
La II Guerra Mundial estaba ya casi finalizada: Italia había sido ocupada ya por los Aliados y Hitler había sido acorralado en su búnquer. Pero el Imperio japonés, el tercero en discordia en esta historia, no se rendía y aspiraba a tener la hegemonía del Pacífico, dirigido por rancios generales que soñaban con las doradas edades feudales de los samuráis y su concepto del honor, no se rendía. Es entonces cuando el gobierno de Estados Unidos de Harry Truman decide llevar a cabo un plan, más propio de las potencias a las que se había vencido (Hitler lo había deparado para Inglaterra), y desatar un grito de horror cósmico sin precedentes. El 6 de Agosto de 1945, el “Enola Gay” lanza sobre Hiroshima al “muchachito” de Truman, la bomba nuclear “Little Boy”; tres días después, “Fat Man” caería sobre Nagasaki. Días después, Japón anuncia su rendición incondicional, el emperador Hiro-Hito se dirige por radio a su pueblo (algo impensable para un emperador) y los pilotos que lanzaron la bomba fueron condecorados… Mientras tanto millones de personas aún fallecían por los efectos de la radiación: una victoria en la que el perdedor no fue el imperio, sino el pueblo de Japón. (Más información: http://es.wikipedia.org/wiki/Bombardeos_at%C3%B3micos_sobre_Hiroshima_y_Nagasaki)
El hecho tendría consecuencias devastadoras sobre la conciencia humana universal, tanto, o quizás más, que la visión de las masas famélicas, torturadas, masacradas y moribundas de los campos de exterminio. Muchos positivistas, muchos científicos y pensadores no podían dejar de pensar que aquello en lo que habían pensado, por lo que habían luchado, que la ciencia era la aliada de la humanidad, era una mentira y que la idea debía ser matizada: el propio Einstein no podía dejar de sentirse culpable, y el dramaturgo alemán Bertolt Brecht reflexionaba en estos términos: “Yo, que escribo esto, lo estoy haciendo con una máquina desconocida cuando nací. Me desplazo con los nuevos vehículos a una velocidad que mi abuelo no podía ni imaginarse; nada se movía entonces tan rápidamente. Y puedo elevarme por los aires, cosa que mi padre no podía hacer. Con mi padre pude ya hablar desde un continente a otro; pero sólo con mi hijo puedo ver las imágenes en movimiento de la explosión de Hiroshima.” (Pequeño organon para teatro, Sevilla, Don Quijote, 1991, p. 4) y sentenciaba «Así, sucede que los grandes inventos y descubrimientos son cada vez más una amenaza espantosa para la humanidad, y que cada nuevo invento se recibe hoy con un grito triunfal que se transforma en grito de horror.» (Escritos sobre teatro, Barcelona, Alba editorial, 2004, p. 77). Ante estos espantosos acontecimientos, la intelectualidad del mundo entero pidió más fuerte que antes aún la neutralidad absoluta de la ciencia y/ o bien, que el único fin de ésta fuera la mejora de las condiciones de vida de la humanidad entera.
Uno de aquellos intelectuales conmocionados por la tragedia fue el poeta turco Nâzim Hikmet (1902-1963), poeta de ideología marxista que sufrió la represión de su país en sus propias carnes por luchar con su pluma y su actitud por los derechos humanos universales. En su precioso poema de 1956 “Kiz Çocuğu”, “la niña”, expresa el dolor de todo un pueblo encarnado en una de sus más inocentes e impotentes víctimas:
Kiz Çocuğu
Kapıları çalan benim kapıları birer birer. Gözünüze görünemem göze görünmez ölüler.
Hiroşima’da öleli oluyor bir on yıl kadar. Yedi yaşında bir kızım, büyümez ölü çocuklar.
Saçlarım tutuştu önce, gözlerim yandı kavruldu. Bir avuç kül oluverdim, külüm havaya savruldu.
Benim sizden kendim için hiçbir şey istediğim yok. Şeker bile yiyemez ki kâat gibi yanan çocuk.
Çalıyorum kapınızı, teyze, amca, bir imza ver. Çocuklar öldürülmesin şeker de yiyebilsinler.
La niña
Soy yo quien llama a tu puerta/ una por una./ No puedo ser vista por ti,/ porque los muertos son invisibles.// Han pasado cerca de 10 años/ desde que morí en Hiroshima./ Soy una niña de siete años./ Los niños muertos no crecen.// Primero, mi cabello se quemó por un remolino de fuego;/ mis ojos se volvieron sombríos,/ me convertí en un puñado de cenizas,/ mis cenizas se esparcieron por el viento.// No pido nada para mí/ de ti;/ los niños que se queman como papel no pueden ni siquiera comer golosinas.// Llamo a tu puerta,/ tía, tío, deme una firma:/ no deje que los niños sean asesinados/ y puedan comer golosinas también.
Versiones del poema en su lengua original: Zülfü Libanelli:
Zülfü Libanelli
Joan Baez, siempre sorprendente:
Sevingül Bahadir:
El poema de Hikmet alcanzó gran notoriedad y se tradujo a diversas lenguas. De esas traducciones, bastante pronto, muchos artistas realizaron canciones. Uno de ellos fue ese hombre de inmensa voz y humanidad, el actor, cantante y activista, por diversas causas, afroamericano Paul Robeson, que cantaba esta letra, bastante fiel al original turco. Sin embargo, lamento no poder disponer de ningún archivo sonoro en el que este gran artista, impresionante voz en aquel desgarro de canción “Ol’ man river”, la cante con su portentosa voz:
The little dead girl
This little girl is at your door, At every door, at every door.
And I am she you cannot see, I am at your door, at every door. I am at your door, at every door.
And for this child will never be That love and laughter you have known.
At Hiroshima do you see My flesh was seared to bone, My flesh was seared to bone. My hair was blue aflame, Hot were my poor eyes, hot my hands. Now just a trace of ash remains Where I had played on smiling sands. Stranger, what can you do for me, This little ash, this little girl? This human child like paper burned
Dry ash the cooling wind shall swirl, Dry ash the cooling wind shall swirl This little maid unseared by strife.
Oh stranger please do this for me. Your name for mankind’s peace and life, And peace and life for all like me, And peace and life for all like me.
La niñita muerta
Esta niñita está a vuestra puerta,/ en cada puerta, en cada puerta.// Y yo soy ella a la que no podéis ver,/ estoy a vuestra puerta, en cada puerta…// Y porque esta niña nunca será/ ese amor y risa que habéis conocido.// En Hiroshima, lo ves,/ mi carne se quemó hasta el hueso…/ mi pelo fue azul por las llamas,/ calientes estuvieron mis pobres ojos, calientes mis manos./ Ahora solo un rastro de cenizas permanece/ en donde yo jugaba en las arenas sonrientes./ Extraño, ¿qué puedes hacer por mí,/ esta pequeña ceniza, esta niñita?/ Esta niña humana como el papel se quemó.// Ceniza seca que el viento helador arremolinará…/ Esta damita abrasada por la lucha.// Oh extraño, por favor haz esto por mí./ Tu nombre por la paz y la vida de la humanidad,/ y la paz y la vida para todos los que son como yo,/ y la paz y la vida para todos los que son como yo.
También, otro gran artista de inmensa humanidad, el trovador por los derechos humanos y civiles Pete Seeger, haría una hermosa canción que, como las anteriores, se convertiría en un alegato por la paz y contra las armas:
I come and stand at every door (The little girl)
I come and stand at every door But no one hears my silent tread I knock and yet remain unseen For I am dead, for I am dead.
I’m only seven although I died In Hiroshima long ago I’m seven now as I was then When children die they do not grow.
My hair was scorched by swirling flame My eyes grew dim, my eyes grew blind Death came and turned my bones to dust And that was scattered by the wind.
I need no fruit, I need no rice I need no sweet, nor even bread I ask for nothing for myself For I am dead, for I am dead.
All that I ask is that for peace You fight today, you fight today So that the children of this world May live and grow and laugh and play.
Vengo y me quedo en cada puerta
(La niñita)
Vengo y me quedo en cada puerta,/ pero nadie oye mi paso silencioso./ Llamo y todavía permanezco sin ser vista/ porque estoy muerta, porque estoy muerta.// Tengo sólo 7 años aunque morí/ en Hiroshima hace tiempo,/ tengo 7 años ahora como entonces,/ cuando los niños mueren no crecen.// Mi cabello se quemó por un remolino de fuego,/ mis ojos se volvieron sombríos, mis ojos se cegaron,/ la muerte vino y convirtió mis huesos en polvo/ y fueron dispersados por el viento.// No necesito fruta, no necesito arroz,/ no necesito dulces, ni siquiera pan;/ no pido nada para mí,/ porque estoy muerta, porque estoy muerta.// Todo lo que pido es aquello para la paz./ Luchad hoy, luchad hoy/para que los niños de este mundo/ puedan vivir crecer y reír y jugar.
En 1966, los Byrds, los alumnos rockeros de Seeger, hicieron su versión, rompiendo un poco con la psicodelia de su Fifth Dimension:
Y, finalmente, el grupo de folk-rock español Aguaviva incluía su propia versión en su disco temático Apocalipsis (1971). Es una versión distinta, en la que Manolo Díaz, compositor del tema, prefiere ahonda en el horror nuclear que en la esperanza y en la petición de paz; el tema, interpretado por el grupo, deja de ser un poco alegato por la paz y se convierte en un cuento de terror japonés bastante impresionante:
Soy yo, soy yo quien llama a vuestra puerta, aquí como en otros lugares y a todas !as puertas. No os preocupéis si permanezco invisible. No es posible ver a una pequeña muerta. Soy yo, soy yo quien llama a vuestra puerta, aquí como en otros lugares y a todas !as puertas. No os preocupéis si permanezco invisible. No es posible ver a una pequeña muerta.
Primero se incendiaron mis largos cabellos. Mis manos ardieron al igual que mis ojos. Mi cuerpo no fue más que un puñado de cenizas mezcladas con el viento en un cielo nublado.
Aquí estaba yo hace diez años, encontré la muerte en Hiroshima. Soy sólo una niña, tenía siete años pero los niños muertos no crecen. Aquí estaba yo hace diez años, encontré la muerte en Hiroshima. Soy sólo una niña, tenía siete años pero los niños muertos no crecen..
Primero se incendiaron mis largos cabellos Mis manos ardieron al igual que mis ojos. Mi cuerpo no fue más que un puñado de cenizas mezcladas con el viento en un cielo nublado.
Aquí estaba yo hace diez años, encontré la muerte en Hiroshima. Soy sólo una niña, tenía siete años pero los niños muertos no crecen.
En verdad, nada quiero de vosotros, a mí ya nadie puede mimarme. La niña, que ardió cual hoja de periódico nunca más probará vuestros bombones. Lalalà, la, la, la, la, la . . .
Una preciosa canción antibelicista y antimilitarista de Lluís Llach, en el que interpreta a un soldado arrepentido que escribe a su novia.
Dona
Dona, avui t’escric, ara que puc encara, potser demà no et podré dir estimada. Tinc el fusell, ai amor, deixat sobre la taula, i què et puc dir, ai amor, que no dugui basarda.
Avui també, ai amor, he disparat mil bales, i porto el cos, ai amor, ferit per mil mirades.
No, no té ningú el dret a la matança! Qui del meu cos n’ha fet unes balances? M’arriba el clam de dolor i fam, morts amb ulls blancs em són companys.
Faré un camí del que no hi ha tornada. Oferiré el meu cos perquè qualsevol bala aturi el ritme del cor que no ha viscut fins ara.
Mujer, hoy te escribo,/ ahora que puedo todavía,/ quizás mañana/ no te podré decir amada./ Tengo el fusil, ay amor,/ echado sobre la mesa,/ y qué te puedo decir, ay amor,/ que no lleve terror.// Hoy también, ay amor,/ he disparado mil balas,/ y llevo el cuerpo, ay amor,/ herido por mil miradas.// ¡No, nadie tiene el derecho a la matanza!/ ¿Quién de mi cuerpo ha hecho unas balanzas?/ Me llega el clamor/ de dolor y hambre,/ muertos con ojos blancos/ me son compañeros.// Haré un camino del que no hay regreso./ Ofreceré mi cuerpo/ para que cualquier bala/ detenga el ritmo del corazón/ que no ha vivido hasta ahora…
ATENCIÓN: esta entrada puede ser considerada como eso que llaman un spoiler, es decir, un destripe de la película. Aunque intentaré no destripar demasiado la película con mi reflexión, si no la has visto y eres de los que quieren mantener el suspense, no veas el primer vídeo, sino el segundo, que recoge únicamente la canción.
Ayudar a un amigo, por pequeña que sea la acción, puede traer consecuencias desastrosas para uno mismo: eso importa poco cuando estás dispuesto a arriesgar lo que sea por la felicidad de aquellos a los que quieres. La canción con la que se cierra el musical supone una de las críticas contra la guerra cantadas más impresionante, aunque su crítica es tremendamente elemental: la guerra, y sobre todo este tipo de guerras, totalmente evitables, son criticables pues mueren personas y se obliga a matar, y hay personas que prefieren morir a matar, mientras los políticos, los banqueros y los generales engordan gracias a la sangre inocente que engrasa los increíbles beneficios (todos recordamos la más reciente intervención en nuestro país del despreciable Jeb Bush) de una guerra muy rentable que esconde sus auténticos intereses bajo banderas, grandes palabras e ideales, y el miedo.
La letra de la canción es muy acertada; mi única pega se dirige a la alabanza de Timothy Leary, el sintetizador del LSD y uno de los padres de la contracultura de los años 60. Mis razones son que personas como el Dr. Leary, Ken Kesey y otros místicos que aseguraban traer una nueva dimensión de la conciencia, un despertar místico más allá de los medios de cualquier religión tradicional, a través de drogas como el LSD (que comenzó como un experimento del ejército), obnubilaron a toda una generación y fue causa de su autodestrucción; en más de una ocasión, la capacidad crítica de los hippies era anulada por la mística y la lisérgica, especialmente cuando iban unidas. Uno no puede evitar ver en esto el mismo plan desarrollado contra los barrios negros, sobre todo cuando años después, el funesto presidente Nixon declaraba que los enemigos internos de “América” eran los hippies, los estudiantes y los negros.
´Final de la película
Flesh failures
(Let the sunshine in)
We starve-look At one another Short of breath Walking proudly in our winter coats Wearing smells from laboratories Facing a dying nation Of moving paper fantasy Listening for the new told lies With supreme visions of lonely tunes
Somewhere Inside something there is a rush of Greatness Who knows what stands in front of Our lives I fashion my future on films in space Silence Tells me secretly Everything Everything
Manchester England England Manchester England England (Eyes look your last) Across the Atlantic Sea (Arms take your last embrace) And I’m a genius genius (And lips oh you the doors of breath ) I believe in God (Seal with a righteous kiss) And I believe that God believes in Claude (Seal with a righteous kiss) That’s me, that’s me, that’s me
The rest is silence The rest is silence The rest is silence
Singing Our space songs on a spider web sitar Life is around you and in you Answer for Timothy Leary, dearie
Let the sunshine Let the sunshine in The sunshine in Let the sunshine Let the sunshine in The sunshine in Let the sunshine Let the sunshine in The sun shine in…
La carne fracasa
(Dejad entrar la luz del sol)
Parecemos hambrientos/ los unos a los otros/ faltos de aliento/ Caminando orgullosos en nuestras ropas de invierno/ llevamos perfumes de laboratorio/ frente a una nación moribunda/ de emocionantes fantasías de papel/ escuchando las nuevas mentiras que nos han contado/ con visiones supremas de melodías solitarias.// En algún lugar/ dentro de algo hay una corriente de/ grandeza/ Quién sabe lo que nos depara/ nuestra vida/ Labro mi futuro sobre películas del espacio./ El silencio/ me cuenta secretamente/ todo/ todo.// Manchester, Inglaterra, Inglaterra,/ (los ojos te miran por última vez)/ a través del Océano Atlántico/ (Los brazos te sujetan/ por última vez)/ Y soy todo un genio/ (y los labios te ¡oh!/ las puertas del aliento)/ Creo en Dios/ (el sello con un escueto beso)/ y creo que Dios cree en Claude/ que soy yo, que soy yo, que soy yo./ El resto es silencio…// Cantando/ nuestras canciones espaciales con un sitar de tela de araña/ La vida está alrededor y dentro de ti/ la respuesta para Timothy Leary, cariño/ Dejad entrar la luz del sol.
De un tiempo a esta parte, en una especie de ataque de nostalgia en el que pretendo compaginar pasado y presente (y el futuro como síntesis de ambos), voy redescubriendo cosas que pertenecieron a mi adolescencia (NOTA: no se dejen engañar por las fechas, yo fui un adolescente peculiar que escuchaba a Louis Armstrong y a los Beatles mientras mis noventeros compañeros creían haber encontrado la perfección musical en el bakalao: por decirlo metafóricamente, nunca fui el capitán del equipo y, por tanto, no salía con la jefa de animadoras). Una de estas maravillosas cosas es la película/ musical Hair, uno de los pocos musicales que me gustan y que contiene tanto escenas como canciones inolvidables y emocionantes. Por ello voy a hacerle un tributo que, como de costumbre, no sé cuánto ocupará ni va a ser exhaustivo. Sencillamente iré poniendo las escenas musicales según me venga, sin seguir un orden cronológico o de aparición.
Hair fue, en sus orígenes, una ópera rock ideada por Gerome Ragni, James Rado (letras) y Galt McDermot (música) que tiene como tema el mundo hippie y el trasfondo de la guerra de Vietnam, no exenta, por otro lado, de cierta crítica y la presencia de otros temas como eran el racismo, el Black Power, la crítica a la alta sociedad por quienes fueron a luchar muchos jóvenes… Sus primeras representaciones datan del mismo 1967 en salas de teatro alternativo, hasta que va alcanzando gran popularidad y se traslada a los grandes teatros, en donde el revuelo por la presencia de desnudos está asegurado. En 1979, el cineasta Miloš Forman dirigió la película basada en ella que contó, entre otros, con John Savage como Claude y Treat Williams como Berger. El argumento es el siguiente: Claude, un chico de Oklahoma, se traslada a Nueva York con el fin de alistarse a filas para ir a Vietnam; una vez allí conoce a Berger y a su grupo de hippies que le embarcan en aventuras de todo tipo, sobre todo para que impresione a la chica de sus sueños, Sheila, joven snob de clase alta: ambos quedarán deslumbrados por el mundo hippie, lo cual no impedirá que, finalmente, Claude asista a su reclutamiento. El resto, es historia…
La escena musical de hoy se llama “Walking in space”. Claude se encuentra en el centro de adiestramiento, pero descubre que es un mundo duro y cruel y siente cierta añoranza por sus colegas hippies y sus extravagancias; el tema da pie para hacer una crítica al militarismo tradicional estadounidense y a la guerra de Vietnam. La letra pertenece a la banda sonora original de la representación teatral, pero para la película (por cuestiones presupuestarias, imagino) se desecharon algunas partes:
My body Is walking in space My soul is in orbit With God face to face
Floating, flipping Flying, tripping
Tripping from Pottsville to Mainline Tripping from Mainline to Moonville
(Tripping from "Pot"sville to Starlight Tripping from Starlight to Moonville)
On a rocket to The Fourth Dimension Total self awareness The intention
My mind is as clear as country air I feel my flesh, all colors mesh
Red black Blue brown Yellow crimson Green orange Purple pink Violet white White white White white White white
All the clouds are cumuloft Walking in space Oh my God your skin is soft I love your face
How dare they try to end this beauty? How dare they try to end this beauty? To keep us under foot They bury us in soot Pretending it’s a chore To ship us off to war
In this dive We rediscover sensation In this dive We rediscover sensation
Walking in space We find the purpose of peace The beauty of life You can no longer hide
Our eyes are open Our eyes are open Our eyes are open Our eyes are open Wide wide wide!
Caminado por el espacio
Puertas cerradas/ persianas echadas/ Luces tenues/ Llamas altas// Mi cuerpo…// Mi cuerpo camina por el espacio/ Mi alma está en orbita/ cara a cara con Dios// Flotando, flipando/ volando, viajando// Viajando desde “Villa-Hierba” a Villa-Chute/ Viajando desde Villa-Chute a Villa-Luna// Viajando desde Villa-Hierba a las Estrellas/ Viajando desde las estrellas a Villa-Luna// En un cohete hacia/ la Cuarta Dimensión/ Autoconcienca total/ la intención// Mi mente está tan clara como el aire del campo/ Siento mi carne, todos los colores se desordenan// Rojo negro/ Azul marrón/ Amarillo carmesí/ Verde naranja/ Púrpura rosa/ Violeta blanco/ Blanco blanco…// Todas las nubes se acumulan/ caminando por el espacio/ ¡Oh Dios mío! tu piel es tan suave/ amo tu cara// ¿Cómo se atreven a intentar acabar con esta belleza?/ Para tenernos pisoteados/ nos entierran en el fango/ pretendiendo que es un trabajo/ embarcarnos a la guerra// En este salto/ redescubrimos la sensación…// Caminando por el espacio/ encontramos el sentido de la paz/ La belleza de la vida/ no podrás ya ocultar// ¡Nuestros ojos están abiertos/ del todo!
Publicada en el disco de la banada sonora de la película Pat Garret & Billy The Kid (Sam Peckinpah, 1973) -ignorandosi fue compuesta para la película o ya la tenía hecha anteriormente-, “Knokin’ on Heaven’s Doors” es una de las mejores canciones de Bob Dylan. Con esta sencilla y breve canción, Dylan parece volver a sus inicios, en un proceso en el que, tras su accidente en 1967, va abandonando planteamientos más progresistas para volver un poco a sus raíces folk y country. El tema ha sido versionado por multitud de artistas, algunas mejores, otras peores, algunas dignísimas y otras, sencillamente, deleznables; en esta entrada de la Wikipedia tenéis una relación de ellas: http://es.wikipedia.org/wiki/Knockin%27_on_Heaven%27s_Door
La canción, una especie de alegato pacifista que surgió cuando las viejas figuras del oeste se estaban poniendo de moda, es de una extrema sencillez, no exenta de una tremenda belleza, tanto lírica como musical.
Mama, take this badge off of me I can’t use it anymore It’s gettin’ dark, too dark for me to see I feel like I’m knockin’ on heaven’s door
Knock, knock, knockin’ on heaven’s door Knock, knock, knockin’ on heaven’s door Knock, knock, knockin’ on heaven’s door Knock, knock, knockin’ on heaven’s door
Mama, put my guns in the ground I can’t shoot them anymore That long black cloud is comin’ down I feel like I’m knockin’ on heaven’s door
Knock, knock, knockin’ on heaven’s door Knock, knock, knockin’ on heaven’s door Knock, knock, knockin’ on heaven’s door Knock, knock, knockin’ on heaven’s door
Llamando a las Puertas del Cielo
Mamá, quítame esta insignia/ no puedo usarla más/ está oscureciendo, demasiado oscuro para que pueda ver/ Me siento como si estuviera llamando a las Puertas del Cielo.// Llamo, llamo, llamando a las Puertas del Cielo…// Mamá, pon mis armas en el suelo/ No puedo dispararlas más/ Esa gran nube negra está bajando/ Me siento como si estuviera llamando a las Puertas del Cielo.// Llamo, llamo, llamando a las Puertas del Cielo…
Y aquí está, sin duda, la mejor escena de la película, con la conmovedora actuación de Slim Pickens,como el sheriff Baker, y Katy Kurado como su esposa, ambientada con esta canción, para la que Dylan no sólo hizo la banda sonora, sino que actúa como Alias, uno de los amigos de “Billy el Niño”, encarnado por ese otro genio musical que se convirtió en actor, el cantante de country-rock Kris Kristofferson:
Redención (Nuestro último baile)
Mi segunda novela: una historia de amor, misterio e intriga; la lucha de una chica por su pareja pasa por enfrentarse a una secta apocalíptica
Casa del Libro
‘Redención (Nuestro último baile)’, en Casa del Libro
Casa del Libro
Compra Billy («algo es algo») a través de Casa del Libro
Billy («algo es algo»)
Tres cosas atormentan al exinspector de policía Guillermo Niño Pérez: un vecino que le obsesiona, el recuerdo de un crimen y una querella por sus torturas durante el franquismo. Por si esto fuera poco, se une la inquietud hacia un asesino en serie que
El Corte Inglés
Compra Billy («algo es algo») en El Corte Inglés