Posts Tagged ‘Paul Robeson’

Çapulcu (No nos dejan cantar, Robeson)


türkülerimizi söyletmiyorlar bize,
Korkuyorlar Robson

“Korcu”, Nâzim Hikmet

Noam ChomskyÇapulcu, que en turco significa algo así como “saqueador”, “alborotador”, etc., fue la palabra que el primer ministro turco utilizó para referirse para esa inmensa parte de la población turca que se manifestaba contra él, en base a los disturbios producidos… Claro que, en realidad, y como pasa aquí y en muchos otros sitios, los disturbios fueron causados por agentes infiltrados de la policía. Por esa razón, el filósofo y escritor estadounidense Noam Chomsky se declara a sí mismo çapulcu, y yo, dicho sea de paso, también.

Hikmet en prisiónY esto recuerda bastante a lo acontecido un años antes de la década de los 50, cuando el poeta turco Nâzim Hikmet, por entonces en la cárcel por ser comunista, escribió un poema de solidaridad y amistad al cantante y actor afroamericano Paul Robeson, quien había figurado como una de las principales firmas en un manifiesto de intelectuales que pedían la liberación del poeta turco, a tenor de que la ultraderecha estadounidense saboteó con amenazas y disturbios su concierto de Peekskill. El poema se titula “Korcu”, “miedo”, y fue musicalizado y adaptado por Manolo Díaz para el grupo Aguaviva en 1971:

(En el enlace de arriba se encuentra el original de “Korcu” junto a una traducción al castellano, además de un desarrollo más amplio de esta bella historia de amistad y solidaridad entre dos artistas que intentaron acallar por miedo)

Homenaje a las Brigadas Internacionales


¡Tantas banderas!/ ¡tantos países!
¡tantos idiomas/  y un canto libre!
¡Tantos idiomas…!/ ¡y un solo canto
que alza la sangre/  y une las manos!

Antonio Gómez, “Celestino Alfonso

Hará unos días, paseando por la Avenida Complutense, descubrí con horror que alguien, cierto tipo de gente, había mancillado el monumento a las Brigadas Internacionales con pintura roja y escribiendo “asesinos” en el obelisco. Me causó una honda tristeza, a la par que indignación, por lo ejemplar que su acción y sus actos tuvieron. Voy a explicar brevemente su historia.

bandera brigadas_internacionalesContrario a la creencia popular, el origen de las Brigadas Internacionales no estuvo en el estallido de la guerra civil, sino un año antes; en 1935. Debido a las acciones de los gobiernos fascistas de Hitler, Mussolini y otros, la deriva hacia el fascismo de algunos gobiernos conservadores y el auge de este tipo de movimientos en todos los países democráticos del mundo, junto a las pretensiones imperialistas de Alemania e Italia, cuyo Duce decidió reclamar la tierra de Etiopía (éste fue, por así decirlo, el “Vietnam” de la intelectualidad internacional de mediados de los años 30), un grupo de intelectuales franceses decidió plantar cara al sistema que declaraban enemigo de la cultura y –por consiguiente- de la humanidad, y celebrar el I Congreso Internacional de Escritores para la Defensa de la Cultura, que tuvo lugar en París, en junio de 1935, y al que asistieron escritores de todas partes del mundo y de toda ideología opuesta al fascismo: algunos de ellos fueron André Gide, André Malraux, el católico Emmanuel Mounier, Henri Barbusse…, por Francia; Aldous Huxley por el Reino Unido; Ilya Ehrenburg, Mikhail Koltzov y otros por la Unión Soviética; Jaime Corteçao por Portugal; Bertolt Brecht, Heinrich Mann y otros, representando a la literatura exiliada de Alemania, junto a un escritor enmascarado que practicaba en tierras germana lo que se llamaba “literatura ilegal”; escritores de Grecia, Italia, Bulgaria, de Estados Unidos, de toda Latinoamérica, India, Irlanda, China, Japón… Por España, la delegación estuvo presidida por el socialista Julio Álvarez del Vayo, sustituyendo al presidente original, Ramón María del Valle Inclán, gravemente enfermo ya por entonces. El estrado estuvo presidido por la famosa estrella de tres puntas, símbolo del antifascismo internacional, que más tarde tomarían como emblema las Brigadas. De todos los acuerdos que allí se tomaron, lo que más nos interesa son éstos: el Congreso, representado por sus delegaciones, se comprometía a defender la cultura allí en donde estuviera amenazada; a promocionar y auspiciar la formación de Frentes Populares, tanto políticos como culturales, de todas las fuerzas democráticas, progresistas y revolucionarias; y, finalmente y con estas resoluciones, a combatir al fascismo, enemigo de la cultura, bajo todas sus formas. Éste fue el germen intelectual de las Brigadas.

brigadas_internacionales1936: encontrándose en la Olimpiada Obrera –contraolimpiada a la del Berlín nacionalsocialista- celebrada en Barcelona varios extranjeros (muchos de ellos alemanes e italianos), al estallar primero el golpe de Estado y después la guerra civil, muchos de ellos se alistan en las milicias partidistas que comienzan a organizarse. Ahora bien, aunque genéricamente llamamos brigadistas a todos los extranjeros que voluntariamente vinieron a luchar al lado de la República, no todos ellos pertenecieron a las Brigadas Internacionales, también nutrieron, como decimos, las milicias de los sindicatos y de los partidos, como por ejemplo la CNT y el POUM, a veces por afinidad ideológica y otras por proximidad (es decir, la unidad que estaba más cerca), hasta que en 1937 el gobierno decide disolver las milicias, integrar a los combatientes nacionales en el Ejército Popular, y a los extranjeros en las Brigadas, algo que no fue del gusto de todos por sus antagonismos con el PC oficial de la Unión Soviética.

Bandera_de_las_brigadasY es precisamente el tema de que las Brigadas Internacionales estuviera, en principio, dirigida por el Partido Comunista de Stalin lo que echa hacia atrás a muchos a la hora de expresar sus simpatías. Si bien eso es verdad, no menos verdad son dos motivos: que muchos desconocían lo que realmente Stalin representaba, y que muchos brigadistas no eran necesariamente estalinistas, sino que vinieron por un deseo de defender las libertades democráticas y las brigadas les brindaban esa oportunidad: en sus filas había comunistas “ortodoxos”, pero también comunistas “heterodoxos”, socialistas de toda tendencia, aventureros, liberales y es posible que hasta católicos progresistas y conservadores democráticos antifascistas (¿por qué no?). Por otro lado, el compromiso de la intelectualidad universalidad en su lucha contra el fascismo se manifestó aquí también, con las presencia en las brigadas de muchos escritores, intelectuales y artistas jóvenes: George Orwell (que no luchó en ellas, sino en la milicia del POUM, pero merece aquí su mención); André Malraux (que además era aviador), Ilya Ehrenburg, Koltzov (que en pleno frente fue reclamado por Stalin bajo la acusación de “desviacionista”, tras haber defendido a capa y espada el sistema y el nombre del “hombre de acero”), el británico Ralph Fox y el alemán Ludwig Renn (ambos muertos en el frente), Antoine de Saint-Exupéry (el autor de El Principito), el cubano Pablo de la Torriente y Brau (también muerto en el frente, y a quien Miguel Hernández le dedicaría una conmovedora elegía), el cantante y actor Paul Robeson (aunque fue más bien un brigadista simbólico), Ernest Hemingway… Vinieron de todas partes del mundo: los más numerosos, los franceses; también exiliados alemanes, italianos y portugueses; irlandeses que vinieron cantando la canción rebelde de Connolly; estadounidenses, en cuyas filas los combatientes afroamericanos pudieron ejercer altos cargos (algo que no les pasaría después en la II Guerra Mundial); polacos huyendo de la represión nazi; mexicanos, cubanos, argentinos…; judíos de todo el mundo, y una minoría, pero muy significativa, de chinos y japoneses. Se agruparon en batallones con nombres muy significativos, nombres de héroes y mártires nacionales: Lincoln, Washington (estadounidenses); Dombrovski (en honor a Jaroslaw Dombrovski, militar polaco que luchóLudwig Renn con el pueblo parisino durante la Comuna); Ernst Thälmann, Mateotti, Comuna de París, Garibaldi, etc. Y no todos eran combatientes: también vinieron médicos, enfermeras y otros especialistas, movidos por su solidaridad y su filantropía. No pretendo beatificarlos, también hubo cosas feas, ya que estaban atados a disciplina militar, pero, sobre todo y ante todo, su actitud fue de lo más ejemplar: no vinieron, como los voluntarios del otro bando, a imponer nada o a sacar tajada; vinieron a proteger, en abstracto, la legitimidad democrática de la República y sus libertades, y, en concreto, al pueblo de España y su cultura.

despedida brigadasEn 1938, obedeciendo a una denuncia conjunta de Italia y Alemania, la Sociedad de Naciones decide cumplir, o más bien romper, el Pacto de No Intervención, y ordenan la salida inmediata de las Brigadas Internacionales… mientras que los voluntarios del fascismo italiano y alemán permanecerían hasta el final de la guerra. Muchos de esos combatientes, que no tenían un hogar al que volver, se quedaron ilegalmente; otros volvieron a sus casas con la amargura en la boca. Y he aquí que me gustaría señalar algo: probablemente, gran parte de la culpa de la profanación del monumento la ha tenido una columna del Dr. José Iturmendi, decano de la facultad de derecho de la Universidad Complutense, en la que lo criticaba desde un supuesto: que obedece a la visión unilateral de la historia… Veamos: si el Dr. Iturmendi, al que presuponemos demócrata y amante de la libertad, quería hacer un ejercicio de neutralidad, no entendemos que otro tipo de monumento semejante quería alzar al lado: ¿acaso uno a la Legión Cóndor del III Reich, responsables de los bombardeos sobre las humildes poblaciones de Gernika y Almería entre otras?, ¿o uno a los voluntarios fascistas italianos (derrotados en Guadalajara por sus paisanos de la Brigada Garibaldi)? ¿O quizás a la División Azul, que en su lucha contra el marxismo se fueron a luchar con Hitler? Los brigadistas vinieron a luchar por las libertades, en primer término, pero los voluntarios fascista vinieron a imponer una dictadura. Dr. Iturmendi, parafraseando a Pete Seeger, ¿de qué lado está usted? Soy pacifista, pero mi admiración y respeto para aquel que luchó por la libertad de mi pueblo, fuera con la palabra o con el fusil. ¿A quién admira usted, Dr. Iturmendi?

Veteranos brigadistas internacionalesLa despedida de las Brigadas Internacionales fue un acto emotivo, paralelo en Madrid y en Barcelona, que contó con la presencia de las altas instituciones políticas y militares de la República. Allí, probablemente, se cantó este hermoso himno, originalmente con letra del poeta austríaco Josef Luitpold, y música de Béla Reinitz, y es uno de los más bellos himnos compuestos para las Brigadas, en donde la muerte no importa si con ello se consigue la paz… Sí, la paz, porque las Brigadas Internacionales lucharon por la paz, no por la guerra. Por ahora, ignoro quién fue el adaptador de la letra al castellano. En el vídeo podemos oír la impecable interpretación de Francisco Curto, en su disco La guerra civil española:

Abschied

Wenn das Eisen mich mäht
wenn mein Atem vergeht
sollt stumm unterm Rasen mich breiten

Laßt das Wortegespiel
war kein Held der da fiel
war ein Opfer vergangener Zeiten

es war einer der nie
nach Völkermord schrie
war ein Bürger kommender Zeiten

Wenn das Eisen mich mäht
wenn mein Atem vergeht
sollt stumm unterm Rasen mich breiten

Josef Luitpod – Béla Reinitz

(NOTA: animo a quien sepa alemán a dejar una traducción exacta del texto)

La despedida

Si la bala me da,
si mi vida se va,
bajadme, callados
a la tierra.
Las palabras dejad,
es inútil hablar,
ningún héroe
es el caído.

De tiempos futuros
será forjador,
ansiaba la paz,
no la guerra.

Si la bala me da,
si mi vida se va,
bajadme, sin más
a la tierra.

De tiempos futuros
será forjador,
ansiaba la paz,
no la guerra.

Si la bala me da,
si mi vida se va,
bajadme, sin más
a la tierra.

http://www.altavozdelfrente.org/index.php?option=com_content&task=view&id=108&Itemid=30

V Aniversario: los mejores vídeos del año (2ª parte: Abril, 2011-Septiembre, 2011)


Y así, tirando del hilo de los vídeos de youtube, me encontré esta otra de Jacques Brel, que ha sido siempre una de mis favoritas, y lo fue aún más cuando supe lo que significaba su letra. “Ces gens là” es una desgarradora canción, mitad crítica a la hipocresía de ciertas personas o clases sociales, mitad amargo amor imposible. Éste fue uno de los mejores vídeos vistos a lo largo de este año, con un Jacques Brel interpretando a los personajes de la canción y haciéndonos estallar en llanto al nombrar a su amor:

Y, aunque esta fue más reciente, por encadenarlo, no podía dejar de poner su canción más emblemática, "Ámsterdam”:

Otro de los grandes, que le suele a gustar a todo el mundo, aunque probablemente no sea tan bueno como Brel, es Bruce Springsteen, ese poeta del rock’n’roll, que siempre hace gala de su potencia y vitalidad. Dos temas fueron los que aquí aparecieron, de su disco The river. El primero, esa triste historia llamada “Jackson Cage”:

Y su melancólica y triste balada, “The river”, que la pusimos en Mayo:

Y vuelta a Woodstock. Reconozco que me gusta ver vídeos de actuaciones de rock porque me carga las pilas el derroche de energía de los músicos, y Woodstock y Monterey, para esto, son ideales. Éste en particular es uno de los que más buen rollo me da: el principio de la actuación del grupo de San Francisco, que mezclaba la psicodelia y la política, Country Joe & The Fish, que incluimos en la sección “Minutos musicales”:

Y de Woodstock a Monterey, de la psicodelia al soul, con la actuación de uno de los artistas más queridos e idolatrados en este blog: el inmortal Otis Redding:

Ambos fueron colgados a modo de intermedio, en esos días en los que no tengo nada especial que decir ni se me ocurre una canción que presentar o disertar. Pero una de mis grandes pasiones es descubrir canciones históricas que surgieron como canciones populares (de trabajo, religiosas, picarescas, pornográficas…) y acabaron encarnando cosas más grandes como revoluciones o guerras. Dos o tres han sido esos casos en los que al buscar la letra de una canción me he encontrado con un enrevesado de historias y personajes. “Santy Anno”, la canción de los voluntarios británicos al lado del general Santana en la guerra Méxicano-estadounidense y que acabó siendo el himno de los buscadores de oro, fue una de ellas, y descubrimos la impresionante versión de la gran Odetta:

Pero no necesariamente tiene que tener una canción una gran historia, o una letra que explique las relaciones de producción, etc. Para captar mi atención basta con que la música sea buena y la letra lo suficientemente significativa. Fue por ejemplo esta triste historia de Frankie Lymon, un genio prematuro que murió demasiado joven y que ya decía que no era “un delincuente juvenil”:

Pero las canciones vinculadas a una época, a sus sentimientos, siempre han sido mis preferentes. En Abril, al colgar la letra de la canción “For what it’s worth” de Buffalo Springfield, no podía adivinar que, en parte, estaba profetizando ciertos eventos tanto nacionales como internacionales. Aquí están, en el festival de Monterey, dándole un puntito más a la canción, con David Crosby ocupando el lugar de Neil Young:

Y siguiendo con el festival de Monterey, ¡qué coño!, otro gran grupo de Frisco, los Quicksilver Messenger Service, con la canción de Dino Valente: “Dino’s song”:

Y con la actuación de uno de mis grupos de blues blanco favoritos: Canned Heat y sus blues sureños:

Y si de grupos hippies hablamos, no podíamos pasar por alto a los mejores, a la gran banda de San Francisco: los Grateful Dead, uno de los conjuntos más constantes de la historia del rock, interpretando una canción apocalíptica de la cantante canadiense Donnie Dobson: “Morning dew”:

No sé porqué razones, pero de un tiempo a esta parte, los Grateful Dead se han ido ligando a mis vivencias personales variadas, como por ejemplo, esta “Cold rain & snow”:

Y, ¿quién se puede resistir a este raudal de buenas vibraciones, llamada “Uncle John’s Band”:

E incluso cierta identificación en temas de “chicos malos”, de los que nadie espera nunca nada, como es su versión de la autobiográfica “Mama tried” de Merle Haggard:

Una de las canciones más impresionantes que he escuchado nunca, ha sido “Free bird”, del grupo de rock sureño Lynyrd Skynyrd. Es una canción que además cobró una especial significación cuando la mayoría de la banda falleció en un accidente de avión, entre ellos Ronnie van Zant, vocalista del grupo y autor de la canción:

Pero uno de los grandes descubrimientos de este años fue esta impresionante balada de desengaño y de autoafirmación de la cantautora Melanie Safka. En versión original es una maravilla, pero esta toma de su actuación en el festival de Woodstock me dejó, literalmente, paralizado por su fuerza:

Pero una de mis grandes obsesiones de este año ha sido intentar desentrañar lo que quiere decir esta canción del folklore romaní, “Musikanti”, en donde creo encontrar cierta historia triste en la que en algún país de la Europa del Esta se alistara para la guerra a los gitanos. La descubrí gracias a la banda de World Music checa Gothart:

Pero la de este otro grupo gitano de Italia  también es muy interesante, Acquaragia Drom:

Y es que el folklore romaní ha sido una de mis grandes pasiones de este año. Tirando de vídeos y textos, descubrí que la nación gitana tiene su propia bandera y su propio himno, escrito por Žarko Jovanović para la banda sonora de una película y adoptado por el Congreso Internacional de los gitanos para ello. “Đelem, đelem”, una triste historia que denuncia el pojramos, el holocausto gitano, a mano de los nazis:

Y recorriendo el folklore romaní, nos encontramos al gran compositor yugoslavo (como él se define) Goran Bregovic, arreglando la canción del festival de primavera de los gitanos orientales, el “Ederlezi”:

Bregovic fue el autor de la banda sonora de esa maravillosa película, de corte absurdo a la manera de Berlanga, El tren de la vida (Radu Mihaileanu, 1998), en la cual unos judíos tratan de escapar del holocausto disfrazándose de nazis y deportados con un tren rumbo a Palestina, vía Rusia. En el camino se encuentran con unos gitanos que idearon un plan parecido para escapar hacia la India. Entonces se produce uno de los momentos más memorables de la película, cuando judíos y gitanos se baten en un emocionante duelo… musical:

Porque otro ciclo importante fue el de la música de los judíos sefarditas, con un legado que perdura hasta nuestros días. Me emocionó mucho saber que esta bella canción, “En tierras ajenas”, una canción que data de cuando vivían en la Edad Media en España, se convirtió en su himno de resistencia durante el holocausto, expresando un dolor más grande y profundo que aquel que sus antepasados tuvieron, volviéndose a mirar por última vez sus campos y casas mientras seguramente la entonaban, cuando fueron expulsados de España. Françoise Atlan es una de sus descendientes:

En otro orden de cosas, la segunda mitad de este año vino marcada por el Movimiento 15-M. Dolido y desengañado, como estaba más o menos, de ciertas utopías, intentando ser como Rick en Casablanca, regentando un café metafórico con buena música en donde la Resistencia era bien recibida, pero no los nazis, empecé a apoyar gran parte, si no todas, de sus acciones cuando se comenzó a intentar desprestigiarles y en algunas comunidades autónomas se les reprimía brutalmente. Para una de ellas, que tuvo lugar en Valencia, les dediqué esta canción del inmortal alcoyano Ovidi Montllor, cantautor y actor inolvidable: “La fera ferotge”, una canción alegórica y satírica sobre las reclamaciones sociales bien justificadas:

Pero revoluciones a un lado, que no al margen, siempre hay sitio para buenas y emotivas canciones, como esta “Darling be home soon”, del cantautor y ex-vocalista de Lovin’ Spoonful, John Sebastian, cuya emotiva interpretación de este tema en el festival de Woodstock, emocionándose al final, es una de mis actuaciones favoritas, y no me canso de verla:

O canciones de un rabioso optimismo contagioso, como “It don’t come easy”, del simpático Ringo Starr:

Pero sin perder la realidad… Debido al violento e injusto desalojo de la Plaza del Sol de Madrid, decidí desenterrar el hacha de guerra y decirle a los responsables, como ya lo hizo Javier Krahe hace años, que “Cuervo Ingenuo no fumar la pipa de la paz con tú”:

Tuvimos, sin motivo especial alguno, salvo mi propia admiración, un recuerdo emocionado hacia el gran Paul Robeson, actor, cantante y activista afroamericano de un compromiso natural y sincero no sólo con su propia gente, sino con todas. Robeson se hizo famoso por interpretar esta canción en una famosa película, Show boat”. “Ol’ Man river”:

Pero a mediados de los años 30, Robeson, que visitó a la Brigada Lincoln en España, cuando interpretaba la canción le cambió la letra, dándole un sentido mucho más revolucionario. Como ejemplo, esta actuación, que a día de hoy sigue poniendo los pelos como escarpias:

Y hay heridas que se empeñan en que no cicatricen. La pasividad y la desinformación con la que pasó desapercibida la profanación del monumento a Miguel Hernández por parte de un grupo de ultraderecha me resultó especialmente repugnante. Eso sí, los “demócratas” pueden darse palmadas en la espalda porque se ha detenido a un rapero que dijo unas tonterías… Adolfo Celdrán, interpretando su canción sobre uno de los mejores poemas de Hernández:

Como con Lorca, a cuya localización se niega cierta gente: éste es, sin lugar a dudas, el país que no ama a sus poetas. Me estremeció ver a don Agustín González, uno –si no el mejor- de los mejores actores españoles, declamar este “El rey de Harlem”:

Y que no sea por falta de homenajes. También recordamos a nuestro querido José Antonio Labordeta, de cuyo fallecimiento se cumplió un año. Para volver a recordarle, su canción más famosa:


… y éste, más o menos, ha sido el año en vídeos: un año intenso en ciertos aspectos, y en otros como todos… Pero la música que no pare, ¿eh? Lo que nos depare este año –según el calendario zamarril- el tiempo lo dirá, y espero verte, veros, el año que viene para contároslo, porque todavía quedan muchas cosas por decir, muchas canciones por descubrir y escuchar, muchos amigos a los que recordar o conocer, y muchos amores por vivir. Acabamos, si os parece, con una canción mítica, probablemente la mejor canción de rock de la historia: “Bohemian rhapsody”, de Queen, una canción que cuando estoy bajo o triste me gusta recordar y me recarga de nuevo con energías renovadas:

Y, a la manera de Bob Hite: Don’t forget to Boggie!

3 acordes y la verdad (el homenaje de Ry Cooder a los cantantes sociales)


Ry_Cooder_playingTerminamos hoy, con esta canción más posterior, con el tema del concierto de Peekskill y el homenaje a Paul Robeson. El veterano y versátil guitarrista Ry Cooder publicaba en 2007 un disco llamado My name is Buddy (Me llamo Buddy), enmarcado en una trilogía de discos (en medio de Chávez Ravine y I, flathead), un disco conceptual de temática socio-político en el que tres personajes, Buddy Red Cat (Buddy el Gato Rojo), Lefty Mouse (Ratón Zurdo –o Izquierdista) y Reverend Tom Toad (el reverendo Tom Sapo) describen los días de principios y mediados del siglo XX: el trabajo, los sindicatos, los patrones y capataces… Como rezan las notas del disco: “Un viaje por el tiempo y el espacio a los días del trabajo, los grandes patrones, las ruinas de la granja, las huelgas, polis de las compañías, ciudades del ocaso, vagabundos, y trenes… la América de antaño.” (la traducción es mía)… Y los trovadores de las libertades civiles, los derechos laborales y la igualdad racial, cómo no. Tal es esta canción, que nos recoge las injusticias sufridas por tres cantantes que, en lugar de cantar como otros la buena vida de las ciudades, las bondades del Señor o las excelencias de la vida en el campo, se dedicaron a denunciar con sus canciones las injusticias y las desigualdades (sociales y raciales), y por tanto no My_Name_Is_Buddycantar para la beautiful people y la mafia de los “felices años 20”, sino para los obreros y granjeros desposeídos de sus tierras por la hipoteca, para los sindicatos y para los comités de los derechos civiles, y que, por ello, fueron perseguidos, calumniados, censurados, juzgados, y a veces hasta asesinados, bajo la acusación de tocar “tres acordes” y decir “la verdad”: ése es el único crimen que Ry Cooder –y nosotros- vemos que cometieran. Éstos son los tres ejemplos:

Joe Hill: poeta y músico sueco-norteamericano, miembro del sindicato IWWJoe Hill (1879-1915) era un estadounidense de origen sueco, quien no sólo era un sindicalista y un miembro de los Trabajadores Industriales del Mundo –comúnmente llamados Woblies-, sino que también era un músico que, apoyándose en la tradición musical estadounidense compuso y cantó canciones que denunciaban las condiciones laborales, así como llamaba a la unidad de la clase trabajadora, cantando para los sindicatos. Por estas acciones, bajo una falsa acusación de atraco y asesinato, Hill fue condenado a muerte. Su persona, vida y obra, recopilada en el Cancionero rojo, fue un ejemplo para los cantautores y folksingers de las siguientes décadas, sobre todo de la posguerra, que solían recurrir a menudo a su repertorio.Hay que hacer notar que Cooder comienza su canción con la primera línea Funeral de Joe Hill (1915)del poema de Alfred Hayes “I dreamed I saw Joe Hill last night” que en 1936 Earl Robinson convertía en canción: una canción cantada por muchos artistas que sienten devoción por el pionero de la canción protesta estadounidense, gente como Joan Baez, Pete Seeger, los Weavers, los Dubliners… Y Paul Robeson:

Paul Robeson: actor, cantante de gosspell y blues, activista socialista y miembro de la Brigada LincolnPaul Robeson es el siguiente artista comprometido homenajeado en esta canción, en el marco del concierto de Peekskill. Nada nuevo vamos a añadir a esto, salvo lo que aporta Cooder: él culpa directamente de lo sucedido a J. Edgar Hoover, fundador y primer director del FBI, organización policial que tenía demasiado poder entonces, estableciéndose como una eficaz red de espionaje nacional, y que tomó como responsabilidad la lucha contra la mafia y contra los “movimientos radicales”. Aunque se afirma que persiguió por igual a los movimientos izquierdistas como ultraderechistas, parece ser que era famoso por sus ideas fanáticas y celebre por su anti-izquierdismo. Cooder –que no habrá sido el primero- le acusa de haber promovido la presencia del Ku Klux Klan en el concierto de Peekskill, al que asistió, junto a Robeson y otros, Pete Seeger.

Pete Seeger comparece ante el Comité de Actividades Anti-Americanas del siniestro, maquiavélico y fascistoide senador McArthyPete Seeger es ya uno de los habituales de este blog, y una persona por quien siempre demostraremos especial devoción, admiración y respeto: admiración y respeto que siente el mundo entero, en donde se han cantado y escuchado todas sus canciones, especialmente en aquellos países en donde faltaba la libertad y reinaba la opresión. Pero, desde sus comienzos, la figura de Seeger era perseguida por el gobierno y por las patronales, y le consideraban como un agente a sueldo de Moscú, razón por la cual Seeger engrosó el número de artistas estadounidenses que tuvieron que pasar la inspección del Comité de Actividades Antiamericanas. Cooder refiere a una anécdota de su vista, cuando el bardo de los derechos humanos dijo que, ya que se le juzgaba por sus canciones, por cantar, le dejaran defenderse cantando con un banjo. El resultado de aquello fue que sus actuaciones fueron canceladas y se le vetó en los medios de comunicación, incluido su propio programa de radio, al que muchos de sus alumnos se negaron a acudir como forma de protesta. Gracias a la adaptación de sus canciones por los Byrds, Seeger –que les agradeció el hecho en una afectuosa carta- rehabilitó su carrera ante un público pacifista de hijos y nietos de sus antiguos seguidores.

tn-19_HOWARY, finalmente, un cuarto personaje aparece en la canción: Harlan Howard, cantautor country fallecido en 2002. Supongo que algunas canciones de Howard tendrían algún mensaje social (ya que no lo había oído hasta ahora), pero la razón principal de su presencia aquí es que fue el inventor del término “tres acordes y la verdad”.

“Tres acordes y la verdad”, un cargo que han sufrido innumerables artistas alrededor del mundo por manifestar sus ideas en su arte, pero sorprendía mucho más en el país que se arroga como el inventor y máximo exponente de la democracia moderna.

Three hords and the truth

I’m going to tell you a story right here
Huh, you may not believe it

I dreamed I saw Joe Hill last night, standin’ in the prison yard
They were taking poor Joe, chained and bound, to a Utah firing squad
Well he turned and looked at me right then, sayin’, Don’t you be misled
They’re trying to tear our free speech down, and Buddy, they ain’t near quit yet
See, they framed me on a killin’ charge, you know I wouldn’t lie to you
But the only crime here that I done was three chords and the truth

Three chords and the truth, oh three chords and the truth
Well the only crime that Joe Hill done was three chords and the truth
Well he sang his good old union songs, he got his message through
But they couldn’t stand to hear a workingman sing three chords and the truth

I see you don’t believe your old friend Buddy here
Heh, take a drink, I think you need it

Oh J. Edgar Hoover liked to hear the darkies sing, till one man changed that all around
Paul Robeson was a man that you couldn’t ignore, and that’s what drove J. Edgar down
»(Yah drove him down)»
He called up his New York Klan boyfriends, sayin’, I got something good for you
Get right down there to Peekskill, New York town, and kill three chords and the truth

Three chords and the truth, oh, three chords and the truth
Well the only crime you ever got from Paul was three chords and the truth
Now if this is the land of democracy, I got one question for you
Why wasn’t Paul Roberson set free on three chords and the truth?

I see you still don’t believe it
I’ll bother you one more time
I’ll bother you one more time, right mister

Now they took Pete Seeger before the law and put him on the witness stand
But he stood right up to tyranny with just a banjo in his hand
Such a righteous banjo picker, watchin’ out for me and you
That was just a man who wouldn’t back down on three chords and the truth
Three chords and the truth, three chords and the truth
Well the only crime Pete Seeger done was three chords and the truth
Yah, he sang his freedom songs real good, he’s still getting his message through
Better check out old Pete Seeger on three chords and the truth

Three chords and the truth, well its three chords and the truth
Well you better check out your old friend Buddy right now on three chords and the truth
Better check out old Harlan Howard, personal friend of mine
Check out old Harlan on three chords and the truth

http://www.rycooder.nl/pages/ry_cooder_my-name-is-buddy_chords_lyrics.htm#L

Letra completa en la página del vídeo

Tres acordes y la verdad

Voy a contarte una historia aquí mismo/ Eh, puede que no te la creas.// Soñé que veía a Joe Hill anoche de pie en el patio de la prisión/ se estaban llevando al pobre Joe, encadenado y amarrado, a un pelotón de ejecución en Utah/ Se volvió y me miró justo entonces, diciendo, “Que no te engañen,/ están intentando quebrantar nuestra libertad de expresión, y Buddy, aún no han comenzado./ Mira que me encuadran en una carga asesina, sabes que no te mentiría/ pero el único crimen aquí que he cometido fue tres acordes y la verdad.// Tres acordes y la verdad, tres acordes y la verdad”/ El único crimen que Joe Hill cometió fue tres acordes y la verdad/ Él cantó sus buenas viejas canciones sindicalistas, traía su mensaje/ Pero ellos no podían soportar oír a un obrero cantar tres acordes y la verdad.// Veo que no crees a tu viejo amigo Buddy/ Je, echa un trago, creo que lo necesitas.// Al viejo J. Edgar Hoover le gustaba oír a los negritos cantar, hasta que un hombre cambió todo aquello/ Paul Robeson era un hombre al que no podías ignorar, eso es lo que llevó al viejo J. Edgar/ Llamó a sus novios del Klan de Nueva York, diciendo tengo algo bueno para vosotros/ Id a Peekskill, población de Nueva York, y matad tres acordes y la verdad// Tres acordes y la verdad…/ El único que crimen que podríais sacar de Paul sería tres acordes y la verdad/ Si ésta es la tierra de la democracia, tengo una pregunta para ustedes/ ¿Por qué Paul Robeson no fue liberado de tres acordes y la verdad?// Veo que todavía no te lo crees/ Te molestaré una vez más/ Te molestaré una vez más/ Te molestaré una vez más, ¿vale señor?// Se llevaron a Pete Seeger ante la ley y le pusieron en el estrado de los tesitgos/ Pero él soportó hasta la tiranía con sólo un banjo en su mano/ Qué banjista tan honrado vigila por ti y por mí/ Era sólo un hombre que no podía retractarse de tres acordes y la verdad.// Tres acordes y la verdad…/ El único crimen que Pete Seeger cometió fue tres acordes y la verdad/ Él cantó sus canciones de libertad realmente buenas, todavía llega su mensaje/ Será mejor que absolváis al viejo Pete Seeger de tres acordes y la verdad.// Tres acordes y la verdad…/ Bien, será mejor que absuelvas a tu viejo amigo Buddy ahora mismo de tres acordes y la verdad/ Será mejor absolved al viejo Harlan Howard, un íntimo amigo mío/ liberad al viejo Harlan de tres acordes y la verdad.

Ry & Joachim Cooder

Los 30.000 de Peekskill


Folksinger Woody GuthrieTambién Woody Guthrie, el trovador de los trabajadores, quiso dejar constancia de lo que vio en el accidentado concierto de Peekskill, al igual que lo hicieron Seeger y Hays. “Mis treinta mil” es una balada que homenajea a aquellos voluntarios que se prestaron en el concierto del 4 de septiembre a cubrir con sus cuerpos el perímetro del concierto con nada más que con sus cuerpos. Sin embargo, Guthrie no la llegó a grabar. Muchos años después, el músico británico Billy Bragg le pondría una música guthriana y la grabaría con el conjunto Wilko. No he encontrado la canción interpretada por ellos, sin embargo existe esta versión acústica en directo a cargo de Will Kaufman, incluida en un disco que reúne las canciones más comprometidas del juglar de Oklahoma, All You Jim Crow Fascists!’ Woody Guthrie’s Freedom Songs:

My Thirty Thousand

Paul Robeson He’s The Man
That Faced The Ku Klux Klan
On Hollow Grove’s Golfing Ground
His Words Come Sounding
And All Around Him There
To Jump And Clap And Cheer
I Sent The Best I Had, The Best I Had
My Thirty Thousand

The Klansman Leader Said
That Paul Would Lose His Head
When Thirty Five Thousand Vets
Broke Up That Concert.
But Less Than Four Thousand Came
To Side With The Klan
But Around Paul’s Lonesome Oak
My Thirty Thousand.

A Beersoaked Brassy Band
Did Snortle Round The Grounds
Four Hundred Noblest Souls
Westchester’s Manhood
And They Looked Exactly Like
The Fleas On A Tiger’s Back;
Lost Fish In The Waters Of
My Thirty Thousandi

When Paul Had Sung And Gone
And The Kids And Babies Home
Cops Came With Guns And Clubs
And They Clubbed And Beat Em
Well I’d Hate To Be A Cop
Caught With A Bloody Stick,
‘Cause You Can’t Bash The Brains
Out Of Thirty Thousand

Each Eye You Tried To Gouge,
Each Skull You Tried To Crack
Has A Thousand Thousand Friends
Around This Green Grass
If You Furnish The Skull Someday
I’ll Pass Out The Clubs And Guns
To The Billion Hands That Love
My Thirty Thousand

Each Wrinkle On Your Face
I Know It At A Glance
You Cannot Run And Hide
Nor Duck Nor Dodge Them
And Your Carcass And Your Deeds
Will Fertilize The Seeds
Of The Men That Stood To Guard
My Thirty Thousand
Of The Men That Stood To Guard
My Thirty Thousand

© Copyright 1999 (renewed), and 2001 (renewed) by Woody Guthrie Publications, Inc.

http://www.woodyguthrie.org/Lyrics/My_Thirty_Thousand.htm

Mis treinta mil

Paul Robeson es el hombre/ que se enfrentó al Ku Klux Klan/ en el campo de golf de Hollow Grove/ Sus palabras salieron resonando/ y todos alrededor de él allí/ a saltar, aplaudir y aclamar/ Envié lo mejor que tenía, lo mejor que tenía/ mis treinta mil.// El líder del Klan dijo/ que Paul perdería su cabeza/ cuando treinta y cinco mil veteranos/ arruinaran ese concierto/ Pero menos de cuatro mil vinieron/ a ponerse del lado del Klan,/ pero alrededor del roble solitario de Paul/ mis treinta mil.// Una banda de estridentes empapados en cerveza/ bufaban alrededor del campo/ Cuatrocientas de las más nobles almas/ la hombría de Westchester/ y parecían exactamente igual/ a las pulgas en la espalda de un tigre;/ peces perdidos en las aguas de/ mis treinta mil.// Cuando Paul hubo cantado y se fue/ y los niños y los bebés en sus casas/ Los polis vinieron con armas y porras/ y los aporrearon y golpearon/ Yo odiaría ser un poli/ atrapado con un palo sangriento,/ porque no puedes golpear los cerebros/ de treinta mil.// Cada ojo que intentasteis arrancar con gubias/ cada calavera que intentasteis agrietar/ tiene miles y miles de amigos/ alrededor de esta verde hierba/ Si facilitas la calavera algún un día/ yo pasaré sobre las porras y las armas/ hacia el billón de manos que amo/ mis treinta mil.// Cada arruga de vuestras caras/ las reconozco de un vistazo/ No podéis correr y esconderos/ ni agacharos ni esquivarlos/ y vuestros armazones y obras/ fertilizarán las semillas/ de los hombres que se colocaron para guardar/ a mis treinta mil/ de los hombres que se colocaron para guardar/ a mis treinta mil.

Woody Guthrie – Billy Bragg

Mantenerse firme en Peekskill (Hold the line!)


Manteniendo la líneaDe una cosa a otra. Ayer, con la excusa del poema de Nâzim Hikmet dedicado a Paul Robeson, hablábamos del accidentado concierto de Peekskill, hoy hablamos de una canción que se escribió con dos propósitos: uno, denunciar lo acontecido; y otro, rendir homenaje a la actitud ejemplar de los asistentes, que no sólo tuvieron que aguantar la agresión fascista, sino soportar los golpes del sheriff y de sus ayudantes como si ellos hubieran comenzado con los disturbios. Como dijimos, tras el boicot de las agresiones fascistas, la organización decide suspender el concierto del 27 de agosto y traspasarlo al 4 de septiembre: había sobradas razones, ya que un grupo afín o miembro del Ku Klux Klan fingió linchar a Paul Robeson. El 4 de septiembre vinieron con la lección aprendida, y varios voluntarios hicieron un extenso círculo humano que abarcaba el recinto del concierto al aire libre, mientras que un grupo de aguerridos veteranos de la II Guerra Mundial rodeaban el escenario para proteger la vida de Paul Robeson. Así que cuando los grupos fascistas (no podemos pasar por alto la ironía de que dos de los principales grupos eran asociaciones de veteranos que habían luchado contra el fascismo, alemán o japonés, en la II Guerra), a los que incomprensiblemente se unieron los hombres del sheriff, empezaron a agredir con piedras y palos, esas personas se mantuvieron Un grupo de jóvenes ultras se arremolinan en torno a la policía del gobernador Dewey, quien después culparía de lo sucedido a los "comunistas"firmes, sin romper la línea, estoicamente, limitándose a cantar el himno sindicalista y de los derechos civiles “We shall not be moved”, el famoso “No nos moverán”. En honor a ellos, los Weavers, el grupo formado por varios folksingers como el propio Pete Seeger (que usaría parte de las piedras lanzadas para construirse una chimenea) y Lee Hays, cantó esta canción en honor a esas personas:

Hold the line

Let me tell you the story of a line that was held,
And many brave men and women whose courage we know well,
How we held the line at Peekskill on that long September day!
We will hold the line forever till the people have their way.

Chorus (after each verse):
Hold the line!
Hold the line!
As we held the line at Peekskill
We will hold it everywhere.
Hold the line!
Hold the line!
We will hold the line forever
Till there’s freedom ev’rywhere.

There was music, there was singing, people listened everywhere;
The people they were smiling, so happy to be there –
While on the road behind us, the fascists waited there,
Their curses could not drown out the music in the air.

The grounds were all surrounded by a band of gallant men,
Shoulder to shoulder, no fascist could get in,
The music of the people was heard for miles around,
Well guarded by the workers, their courage made us proud.

When the music was all over, we started to go home,
We did not know the trouble and the pain that was to come,
We go into our buses and drove out through the gate,
And saw the gangster police, their faces filled with hate.

Then without any warning the rocks began to come,
The cops and troopers laughed to see the damage that was done,
They ran us through a gauntlet, to their everlasting shame,
And the cowards there attacked us, damnation to their name.

All across the nation the people heard the tale,
And marveled at the concert, and knew we had not failed,
We shed our blood at Peekskill, and suffered many a pain,
But we beat back the fascists and we’ll beat them back again!

http://www.peteseeger.net/holdline.htm

 

Mantened la línea

Dejadme contaros la historia de una línea que se mantuvo,/ y muchos hombres y mujeres valientes cuyo coraje conocemos muy bien,/ ¡cómo mantuvimos la línea en aquel largo día de septiembre!/ Mantendremos la línea para siempre hasta que el pueblo tenga su manera.// ¡Mantened la línea!/ ¡Mantened la línea!/ Así como mantuvimos la línea en Peekskill/ la mantendremos en todas partes./ ¡Mantened la línea!…/ Mantendremos la línea para siempre/ hasta que haya libertad en todas partes.// Había música, había cante, la gente escuchaba en todas partes;/ la gente sonreía, muy contentos de estar allí –/ mientras en la carretera detrás de nosotros, los fascistas allí esperaban,/ sus maldiciones no podían ahogar la música en el aire.// Todo el terreno estaba rodeado por una banda de hombres gallardos,/ hombro con hombro, ningún fascista podía entrar,/ la música del pueblo fue oída varias millas a la redonda,/ bien guardados por los trabajadores, su coraje nos hizo sentir orgullosos.// Cuando la música se acabó del todo, empezamos a irnos a casa,/ no sabíamos del problema y el dolor que estaba por llegar,/ nos metimos en nuestros autobuses y salimos por la barrera,/ y vimos a los gangsters de la policía, sus caras llenas de odio.// Entonces sin ningún aviso las piedras comenzaron a llegar,/ los polis y los soldados se rieron al ver el daño que se había hecho,/ nos acosaron, para su eterna vergüenza,/ y los cobardes de allí nos atacaron, malditos seas sus nombres.// Por todo el país la gente oyó la historia,/ y se maravilló por el concierto, y supieron que no habíamos fracasado,/ sembramos nuestra sangre en Peekskill, y sufrimos más de un dolor,/ ¡pero rechazamos a los fascistas y los rechazaremos de nuevo!

Words by Lee Hays; Music by Pete Seeger (1949)
(c) 1959 (renewed) by Sanga Music Inc.

No he conseguido encontrar un archivo sonoro de la canción, propiamente dicha, sino insertada en esta grabación en el que el escritor Howard Fast, asistente al concierto y testigo de lo sucedido, relata los hechos. Una transcripción completa la encontramos aquí: http://www.fortunecity.com/tinpan/parton/2/peekskill.html

No nos dejan cantar, Robeson… Tienen miedo


nazim-hikmet-2Si el otro día incluíamos un poema de Nâzim Hikmet cantado por Paul Robeson, hoy es Nâzim Hikmet el que escribe un poema a Paul Robeson, con quien tenía una buena amistad. La historia de este poema transcurre en una historia paralela que tiene lugar en 1949. A finales de los 40, el poeta turco se encontraba preso por sus simpatías comunistas, y su liberación se convirtió en una de las principales causas de la intelectualidad internacional. Ese mismo año, se forma un comité para exigir su liberación, formado por Pablo Picasso, Jean Paul Sartre y Paul Robeson. Nâzim Hikmet estaría en prisión hasta el año 50, después de haber protagonizado una impactante huelga de hambre que conmocionó al mundo entero.

Concertgoers in Peekskill, New York face racist mobs brainwashed by anti-communist, cold war propaganda against Paul Robeson and the left in the United States. Robeson performed during this period under threat of injury and death.

Ese mismo año, el 27 de agosto, Paul Robeson fue invitado a cantar en Peekskill en beneficio del Consejo de los Derechos Civiles, Nueva York, junto a otros artistas famosos por su activismo como Woody Guthrie, Pete Seeger y su esposa Toshi, y Lee Hays. Según nuestra fuente, ya se habían celebrado en ese mismo lugar tres conciertos sin el menor incidente, pero Robeson se estaba destacando como dos cosas que cierta gente detestaba: por un lado, como un defensor de los derechos civiles que había levantado airado su voz en varias ocasiones contra el infame KKK; y, por otra, como un comunista. De manera que, convocados por el Ku Klux Klan de la zona, varias organizaciones de extrema derecha, algunos de veteranos de la Ultraderechista quemando partiturasguerra, se personan en la zona y comienzan, primero, con insultos tales como “¡Volveos a Rusia, negros blancos!” y, luego, con agresiones. El propio Robeson queda paralizado en su coche mientras se le impide salir a encararse con la turba: quizás no viera que los fanáticos de la supremacía blanca habían fingido su linchamiento con una figura y una cruz ardiendo. La policía, por su parte, que se presenció más tarde, no hace nada contra éstos, pero sí reacciona contra los asistentes al concierto que intentan plantarles cara. El concierto tuvo que posponerse hasta septiembre. Mientras los asistentes protestaban contra el disturbio provocado por los grupos anticomunistas, antinegros y antisemitas –¡muchos de ellos veteranos de la II Guerra Mundial en el ejército de los Estados Unidos!- y la connivencia de las fuerzas del orden público y de los políticos, uno de los dirigentes de estas asociaciones, la Legión Americana, declaraba: “Nuestro objetivo era impedir el concierto de Paul Robeson y creo que cumplimos nuestro objetivo.” Pcar_peekskill_riotsor su parte, los organizadores, varios asistentes y el propio Robeson, que anunciaba su compromiso para el siguiente concierto, emprendían acciones de protesta y legales. En una de estas acciones de protesta en Harlem, Robeson declaraba: “Seré leal a la América de las verdaderas tradiciones; a la América de los abolicionistas, de Harriet Tubman, de Thaddeus Stevens, de aquellos que lucharon por la libertad de mi pueblo, no la de aquellos que intentaron esclavizarlos (…) Volveré con mis amigos a Peekskill…” (la traducción es mía). Y también defendía su derecho a cantar a pesar del color de su piel y de sus ideas: «Voy a cantar donde quiera que la gente quiera que cante… y no me asustan las cruces que arden ni en Peekskill ni en cualquier otro lugar» (http://es.wikipedia.org/wiki/Paul_Robeson).

La policía cargando contra los asistentes al conciertoY, efectivamente, así fue: Paul Robeson volvió para el concierto del 4 de septiembre. Como vieron que ellos no podían contar con la policía, varios voluntarios se organizaron como personal de seguridad, especialmente aquellos que habían luchado en la II Guerra, rodeando al cantante. La actuación de Seeger transcurrió sin incidentes, pero tras el concierto aparecen de nuevo los reventadores del primer concierto, portando insignias patrióticas y, seguramente, emblemas e insignias fascistas. Organizadores, participantes y asistentes, entre los que se encuentra el escritor Howard Fast, deciden hacer una línea humana y tomar la vía de la no-violencia cantando el himno sindicalista y de los derechos civiles “We shall not be moved” (“No nos moverán”). Por otro lado, los alborotadores arremetieron contra varios vehículos; en un coche en el que iban Seeger, Hays, Toshi y Guthrie, éste tuvo que poner una camisa roja para evitar la rotura del cristal. Eugene Bullard, el primer aviador negro y veterano de la I Guerra Mundial, fue derribado y golpeado por la masa, una acción por la que, a pesar de haber testimonio fotográfico, nadie fue encausado. 

Robeson protegido por varios voluntariosTras esto, más de 300 personas fueron a pedir explicaciones al gobernador Thomas Dewey, que se negó a recibirlos aduciendo que habían sido los comunistas los iniciadores del disturbio. Las denuncias interpuestas hacia las ligas ultraderechistas de veteranos de guerra fueron desestimadas. Otros políticos cargaban directamente contra los organizadores del concierto y sus figuras: representando a Mississippi, John E. Rankin culpaba directamente a Robeson, y cuando el congresista Jacob Javits se refirió a estos disturbios como un atentado contra la democracia y la libertad de opinión, el de Mississippi le contestó furiosamente “No me sorprende oír a los Varios asistentes protegen el perímetro del concierto de septiembrecaballeros de Nueva York defender al enclave comunista” y que el pueblo americano no simpatizaba con aquel negro comunista y con aquella manada de rojos. El congresista sureño había empleado el término despectivo nigger, y cuando se sugirió que probablemente se había equivocado, el caballero sureño remarcó en voz alta lo que había dicho. Otro congresista del sur, Edward E. Cox, denunció a Robeson como un agente agitador comunista.

Eugen Bullard, héroe de guerra, derribado por los hombres del sheriffPero no se detuvo ahí la cosa: mientras conciertos benéficos de similares características se arruinaban por la acción calculada de movimientos de extrema derecha, el nombre de Paul Robeson, el hombre que acudió para una buena causa, quedó manchado ante la opinión pública: muchos de sus conciertos fueron cancelados y su nombre retirado de los cuadros de honor de los honorables sitios a los que había pertenecido. En la década siguiente se produciría su juicio por parte del comité de Actividades Antiamericanas.

Fuentes: http://en.wikipedia.org/wiki/Peekskill_Riots

Otros sitios, con más info y fuentes:

http://www.trussel.com/hf/americanheritage.htm

http://www.bencourtney.com/peekskillriots/

http://www.trussel.com/hf/pkphotos.htm

nazim hikmetSu amigo Nâzim Hikmet, en prisión, se enteró de lo acontecido, y seguramente no pudo evitar establecer un paralelismo: Hikmet estaba encarcelado por una pseudodemocracia que estaba abalada por la misma gran democracia que había permitido el desprestigio del cantante afroamericano. Éste es un fragmento de su poema “Miedo”, solidarizándose, como él lo hiciera, con su amigo del otro continente.

Korku

Bize türkülerimizi söyletmiyorlar Robson
inci dişli zenci kardeşim
kartal kanatlı kanaryam
türkülerimizi söyletmiyorlar bize,
Korkuyorlar Robson
şafaktan korkuyorlar,
görmekten, duymaktan, dokunmaktan korkuyorlar.
Yağmurda çırçıplak yıkanır gibi ağlamaktan,
sımsıkı bir ayvayı dişler gibi gülmekten korkuyorlar.
Sevmekten korkuyorlar, bizim Ferhad gibi sevmekten
(Sizin de bir Ferhad’ınız vardır elbet Robson, adı ne?)
Tohumdan ve topraktan korkuyorlar,
akan sudan ve hatırlamaktan korkuyorlar.
Ne iskonto, ne komisyon, ne vade isteyen bir dost eli
sıcak bir kuş gibi gelip konmamış ki avuçlarının içine,
Ümitten korkuyorlar Robson, ümitten korkuyorlar, ümitten.
Korkuyorlar kartal kanatlı kanaryam…

Miedo

No nos dejan cantar nuestras canciones, Robeson,/ mi amigo africano de dientes como perlas,/ mi canario con alas de águila./ No nos dejan cantar nuestras canciones,/ tienen miedo, Robeson,/ miedo del alba,/ de ver, de oír, y de tocar,/ de llorar como de ducharse el cuerpo desnudo bajo la lluvia;/ tienen miedo de la risa como de morder un membrillo duro,/ tienen miedo de amar, como nuestro Ferhad*/ (debéis tener un Ferhad, Robeson, ¿cómo se llama?);/  tienen miedo de la semilla y de la tierra,/ del agua corriente y de recordar/ una mano amistosa que no pide un descuento, ni una comisión o crédito;/ nunca han puesto en sus palmas como si fuera un –libre y tranquilo- pájaro;/ tienen miedo de la esperanza, Robeson, de la esperanza, la esperanza;/ tienen miedo, mi canario con alas de águila.

Nâzim Hikmet

(traducción hecha en base a la que nos ha facilitado en inglés nuestra amiga Evin Okçuoğlu)

* Ferhad es el nombre de un legendario amante turco.

En 1971, el grupo Aguaviva cantaba una adaptación, musicalizada por Manolo Díaz, con el nombre de “No nos dejan cantar”. Aunque el texto presenta alguna que otra variación (desconozco al traductor-adaptador), sigue siendo bastante fiel, y su mensaje bastante actualizado para la situación sociopolítica de los años 70, sobre todo cuando aquí también, cuando no era la propia policía, matones de ultraderecha boicoteaban conciertos y espectáculos diversos, siempre y cuando la censura, por otro lado, los hubiera permitido:

El camino dorado a la devoción ilimitada de Jerry García


RIP Jerry Garcia (Aug 1, 1942 – Aug 9, 1995). We know it's difficult to put into words, but please leave your thoughts and memories of Jerry below so we can together re-visit the man we miss and love!Ayer fue el aniversario de la muerte de alguien a quien admiramos y respetamos, que fue una de mis primeras inspiraciones: Jerry Garcia (o García, si lo escribimos en castellano), músico de rock y de folk, miembro fundador y la mayor parte de las veces cerebro del mítico grupo The Grateful Dead, figura indispensable, gurú e inspirador de la música hippie de San Francisco, e inspiración para una legión innumerable de músicos desde ayer hasta nuestros días.

Jerome John Garcia (Agosto, 1942-1995) era natural de San Francisco, California, y sus ancestros se perdían entre aquellaYoung_jerry_garcia_ multitud de Galicia, Suecia e Irlanda que llegaron a California en busca de una vida mejor. Sus padres, casi previendo su dorado futuro, le pusieron el nombre del famoso compositor Jerome Kern (compositor de la canción anterior: así, sin buscarlo, he enlazado tres temas seguidos, Paul Robeson mediante). Fue llamado por la música a una muy temprana edad, viniéndole de familia, ya que su padre era un músico profesional retirado y su ancestro gallego era famoso por cantar en reuniones antes de emigrar hacia 1919. En el colegio, en donde empieza a destacar por sus habilidades artísticas, comienza a interesarse por los estilos musicales del country y del bluegrass, influenciado por su abuela (encargada de su educación tras la trágica muerte de su padre); después, como todo adolescente de los años 50, se apasionaría por el rock’n’roll y el rythm & blues, y, a finales de los 50 descubre la marihuana. Por robar el coche de su madre, a principios de los 60, se le hizo ingresar en el ejército, en el que no estaría mucho tiempo, y tiene un grave accidente. Mientras tanto, García comienza a tocar por diversos locales de la zona, y en esos periplos conoce al letrista Robert Hunter en 1961; al siguiente a Phil Lesh… Y, poco a poco fue naciendo Grateful Dead.

LightningBoltSkullThe Grateful Dead, anteriormente conocidos como The Warlocks, fue uno de los primeros grupos psicodélicos puramente dichos, cuando decidieron de dejar de ser una banda de bluegrass y convertirse en el estandarte de un nuevo estilo de música. Sobre el origen de su nombre hay mucha confusión; hay quien señala a una leyenda de fantasmas, según la cual el difunto agradece al viajero haberle dado santo sepulcro protegiéndolo; otros señalan que La Muerte Agradecida es un término sacado de los ideólogos del LSD Timothy Leary y Richard Alpert, en su versión “para hippies” del Libro tibetano de los muertos (que iluminaría muchos, entre tantos, a John Lennon)… O quizás la verdad sea menos romántica, y abriendo un libro por una página al azar, el de Leary, o una recopilación de cuentos populares, o tal vez otro cualquiera, encontraron un nombre que les pareció lo suficientemente heavy para una banda de rock… Antes de grabar su primer disco ya eran conocidos en los locales de San Francisco, sobre todo por haber sido uno de los indispensables participantes y amenizadores de aquellos Acid-Test de Ken Kesey, de los cuales provendría una de sus canciones más aclamadas. Así que, su salto a la empresa discográfica en 1967, tras el festival de pop de Monterey, no tuvo que pasar por la adopción de ciertos lenguajes comerciales o semi-comerciales. Su primer disco, The Grateful Dead, era un compendio electrificado y psicodélico de las influencias de la banda: el blues, el rock’n’roll clásico, el country y el bluegrass, el jazz…, hasta cierta presencia de la música surfer. Pero Grateful Dead iría evolucionando: pasarían hacia el rock sinfónico y al rock duro, y luego retomarían sus raíces convirtiéndose en un grupo avanzadogratefuldead2 de country-rock (en esto, la voz de Bob Weir, era indispensable). Hacia 1969, García, Lesh y Mickey Hart (batería de los Dead), junto a antiguos amigos de los días de la bohemia beatnick, formarían el proyecto paralelo de country New Riders of The Purple Sage, sin abandonar la banda original. Grateful Dead, con idas y venidas, ocasionales o no, de miembros, cambios de estilo, carreras en paralelo de sus miembros –sobre todo del propio Jerry-, a pesar de la trágica muerte de Ron “Pigpen” McKernan en 1969, estrictamente duró treinta años: desde 1965, año en el que dejan de ser los Warlocks y convertirse en los Dead, hasta 1995 aproximadamente, año en el que Jerry fallece.

29648118-29648119-large tom miner-the image worksDurante esos años, Jerry no sólo toca con su grupo, sino que colabora en la grabación y en conciertos de los grupos rivales, amigos y vecinos (o no), sobre todo con Jefferson Airplane, cuya presencia, a veces no reseñada, está desde el primer disco de esta banda amiga. García se convierte en el modelo de músico de aquella movida: alguien a quien no hacía falta convencer demasiado para tocar un tema o participar en un concierto o en una grabación, enriqueciendo con sus aportaciones pero nunca queriendo sobresalir.

Jerry-Garcia-Pop-ArtEn 1995, Jerry García fallecía mientras se sometía a un tratamiento de desintoxicación por su larga vida de excesos. Había muerto el hombre que, años atrás, al morir su gran amiga Janis Joplin, declaraba que era mejor morir así que sufrir los estragos de la vejez (palabras que, por supuesto, no apoyamos, pero ahí quedan como una reflexión de la vida). El funeral se celebró en la parroquia de San Esteban en Belvedere, California (remarco este curioso dato, ya que “St. Stephen” fue una de las más famosas y queridas canciones de la banda); a él asistieron numerosas personalidades, desde sus compañeros Dead, pasando por Bob Dylan, hasta un congresista. “¡Maldita droga! ¿Cuántas almas buenas te habrás llevado!”, hago mías las palabras del gran Ángel Álvarez, quien, como a otros míticos grupos, me lo dio a conocer a través de su “Vuelo”. Vamos a rendirle un homenaje con la canción cjgon la que se daban a conocer al mundo, la primera pista de su primer disco, que fue además el nombre que los Dead-Head, huérfanos por la muerte de su líder espiritual, tomaron para la gran familia de fans de Grateful Dead y de Jerry García, quienes, incluso antes de existir internet, recopilaron todos los temas de la banda: es el Camino Dorado Hacia la Devoción Ilimitada, una canción optimista, llena de energía, el grito que anunciaba al mundo que llegaba la Muerte Agradecida:

The Golden Road (To Unlimited Devotion)

See that girl, barefootin’ along,
Whistlin’ and singin’, she’s a carryin’ on.
There’s laughing in her eyes, dancing in her feet,
She’s a neon-light diamond and she can live on the street.

Hey hey, hey, come right away
Come and join the party every day.

Well everybody’s dancin’ in a ring around the sun
Nobody’s finished, we ain’t even begun.
So take off your shoes, child, and take off your hat.
Try on your wings and find out where it’s at.

Hey hey, hey, come right away
Come and join the party every day.

Take a vacation, fall out for a while,
Summer’s comin’ in, and it’s goin’ outa style
Well, lie down smokin’, honey; have yourself a ball,
Cause your mother’s down in Memphis, won’t be back ‘till the fall.

Hey hey, hey, come right away
Come and join the party every day.

El camino dorado (Hacia la Devoción Ilimitada)

Mira a esa chica, caminando descalza,/ silbando y cantando, lo está llevando a cabo./ Hay risa en sus ojos, baile en sus pies,/ es un diamante de luz de neón y puede vivir en la calle.// Eh Eh Eh, venid inmediatamente/ Venid´y uníos a la fiesta todos los días.// Todo el mundo está bailando en corro alrededor del sol/ Nadie ha terminado, ni siquiera hemos comenzado./ Así que quítate los zapatos, niño, y quítate el sombrero./ Prueba tus alas y descubre en dónde está.// Eh Eh Eh…// Cógete unas vacaciones, cáete por un momento./ El verano está llegando, y va a estar de moda/ Bien, túmbate fumando, cariño; pásatelo bomba,/ porque tu madre está en Memphis, no volverá hasta el otoño.// Eh Eh Eh, venid inmediatamente/ Venid´y uníos a la fiesta todos los días.

Words and music by The Grateful Dead
Copyright Ice Nine Publishing; used by permission.

Como de costumbre, la labor encomiable de los Dead-Head de todo el mundo, nos ayuda sobre las pistas de sus canciones: http://artsites.ucsc.edu/GDead/agdl/goldroad.html#title

Paul Robeson, el viejo hombre de río


Paul Robeson: actor, cantante de gosspell y blues, activista socialista y miembro de la Brigada LincolnHilvanando temas con el de ayer, no podíamos pasar por alto el nombre de aquel gigante de gran corazón afroamericano y universal: Paul Robeson, actor, cantante (bajo-barítono), atleta, abogado e incasable luchador y defensor de los derechos civiles y humanos.

Paul Robeson (1898-1976) era hijo de William Drew Robeson, un predicador protestante que había sido esclavo y que durante la Guerra de secesión escapó de sus amos, y de Maria Louisa Bustill, una mujer cuáquera que en su sangre llevaba mezclada una muestra de cada uno de los pueblos norteamericanos (india, anglo-sajona y africana) que perteneció al movimiento abolicionista. El matrimonio se destacó por la lucha por el reconocimiento de los derechos civiles y la abolición de la injusticia; se mudaron a Nueva Jersey, en donde nació Paul Robeson. Paul fue el tercer alumno negro en graduarse en derecho, en la Universidad Rutgers, en donde el camino para ello no fue fácil: no era fácil ni siquiera en los Peggy Ashcroft and Paul Robeson in Othello in 1930Estados norteños; allí, además se comienza a destacar como un buen atleta, sobre todo en fútbol americano y en béisbol. Ejerce como abogado, pero a mediados de los años 20 es llamado por las artes escénicas y comienza su periplo por el teatro y el cine: como todo gran actor negro interpretó al protagonista de Otelo. A finales de los años 20, se traslada con su familia al Reino Unido, en donde ve cómo las diferencias sociales no son tan abismales como en su país natal, y es, más o menos, cuando comienza más intensamente su carrera como artista comprometido con la sociedad y los desposeídos. Las inquietudes políticas de Robeson iban más allá de su propio pueblo, el afroamericano, de cuyo movimiento no sólo fue un pionero sino un activista destacado, hasta el punto de contar con la admiración del propio Malcolm X: sentía como los trabajadores y pobres de todo el mundo reclamaban su profunda y potente voz, como debía representar a las etnias esclavizadas o semi-esclavizadas se sentían representadas por su gigantesca figura: actuó, por Con dos brigadistasejemplo, para los soldados estadounidenses del Pacífico durante la II Guerra Mundial, pero también defendió a los japoneses americanos recluidos en los campos de concentración de su país de acogida; denunció públicamente la invasión de Etiopía por parte del fascismo italiano, y se declaró, desde el principio, enemigo acérrimo del nazismo. Mención especial merece su actitud durante la Guerra civil española, en la cual se mostró siempre partidario del gobierno legítimo y declaró abiertamente su adhesión a la causa de los trabajadores españoles; estuvo en la Brigada Lincoln de voluntarios estadounidenses: los brigadistas de la Lincoln cantaban un spiritual negro que él había popularizado: “Join in the fight”, una llamada a la lucha a los “camaradas negros” (como decía la canción). Como anécdota, Robeson visitó y actuó en una gala en beneficio de los niños vascos refugiados en Inglaterra, quienes quedaron sumamente impresionados. Para Robeson, el conflicto español fue el punto de no retorno; en una entrevista declaraba:

El artista debe tomar parte. Debe elegir entre luchar por la libertad o la esclavitud. Yo he hecho Paul Robeson: Voice of the Peoplemi elección. No tenía alternativa. La historia de la era capitalista está caracterizada por la degradación de mi pueblo: despojado de sus tierras, su cultura destruida…, denegada la protección igualitaria bajo la ley, y privado de su lugar legítimo en el respeto de sus compañeros. No por fe ciega o coerción sino consciente de mi trayectoria, tomo mi lugar con vosotros.

(http://en.wikipedia.org/wiki/Paul_Robeson, la traducción es mía)

Así, Robeson, admirado por personas como Pablo Neruda (quien le dedicó un poema), James Joyce y Ernest Henry Wallace, Albert Einstein, Lewis L. Wallace y Paul Robeson, 1947.Hemingway, se unió a ese extenso grupo de artistas con inquietudes políticas que decidieron que el artista debía hacer algo más que refugiarse en su interior. Acabada la II Guerra Mundial, Paul retorna a Estados Unidos, pero el regreso no será fácil. Tomará parte activa en el movimiento por los derechos civiles de los afroamericanos y apoyará a los sindicatos de trabajadores de todo el país. Sólo por esto, aunque no hubiera simpatizado con el comunismo, se le puso en la mira del senador McCarthy (Lee su intervención en inglés ante el Comité de Actividades Antiamericanas y mira sus fichas del FBI). A Robeson, que seguía activo en sus actividades políticas, participando en el Congreso de la Paz de París de 1949 y habiendo viajado por la Unión Soviética, se le empieza a vetar en programas de televisión y a cancelar sus conciertos. Uno de ellos, el de Peekskill (Nueva York), a beneficio del Congreso de los Derechos Civiles, fue atacado por movimientos organizados ultraderechistas convocados por el omnipresente KKK: el resultado fue el llamado Disturbio de Peekskill. En un segundoPaul Robeson cantando The Star-Spangled Banner para los trabajadores de los astilleros. concierto, se contó con el apoyo de Pete Seeger, Woody Guthrie y Lee Hays. Hay quien puede pensar que estos incidentes eran aislados y llevados a cabo de manera espontánea, pero la realidad era que el anticomunismo, ligado en algunos sitios a los movimientos antinegros y antisemíticos, promovido por el macarthismo tuvo como consecuencia inmediata el auge de los movimientos fascistas y supremacistas en Estados Unidos; si las ligas del KKK podían desfilar impunentemente por cualquier ciudad haciendo gala de su repugnante ideología, no era así, ni mucho menos, para los sindicatos laborales ni para los movimientos de los derechos civiles. El resultado se ve en  muchos de los titulares que se ocuparon de esta noticia: los disturbios los habían causado los comunistas. Robeson declaró: "Voy a cantar donde quiera que la gente quiera que cante… y no me asustan las cruces que arden. ni en Peekskill ni en cualquier otro lugar" (http://es.wikipedia.org/wiki/Paul_Robeson).

Paul Robeson at the Peace Arch, 1952-55Entre 1961 y 1965, durante unas giras por la Unión Soviética, la salud de Robeson comenzó a resentirse, pero no se detendría en sus actividades. Finalmente, en enero de 1976, a los 77 años, Paul Robeson fallecía. Llegaron condolencias de Coretta Scott King, viuda de Martin Luther King.

Fuentes: http://en.wikipedia.org/wiki/Paul_Robeson

En castellano y resumido: http://es.wikipedia.org/wiki/Paul_Robeson

Grabado de Leopoldo Méndez, MéxicoSu canción más famosa fue esta “Ol’ man river”, con música de Jerome Kern y letra de Oscar Hammerstein II, para el musical de 1927 Show Boat, un espectáculo con carga social acerca de la dura vida de los negros del Mississippi. Originalmente fue interpretada por Jules Bledsoe, el primer afroamericano en tener una carrera en Broadway:

Aunque, sin duda es más conocida la versión de Paul Robeson, que varía bastante la letra, cargándola de más significado:

Ol’ man river

Dere’s an ol’ man called de Mississippi
Dat’s de ol’ man dat I’d like to be
What does he care if de world’s got troubles
What does he care if de land ain’t free

Ol’ man river, dat ol’ man river
He mus’ know sumpin’, but don’t say nuthin’
He jes’ keeps rollin’
He keeps on rollin’ along

He don’ plant taters, he don’t plant cotton
An’ dem dat plants’ em is soon forgotten
But ol’man river
He jes’ keeps rollin’ along

You an’ me, we sweat an’ strain
Body all achin’ an’ wracked wid pain,
Tote dat barge! Lif’ dat bale!
Git a little drunk an’ you lands in jail

Ah gits weary an’ sick of tryin’
Ah’m tired of livin’ an’ skeered of dyin’
But ol’ man river
He jes’ keeps rolling’ along

Niggers all work on de Mississippi*
Niggers all work while de white folks play*
Pullin’ dose boats from de dawn to sunset
Gittin’ no rest till de judgement day

(Don’t look up an’ don’t look down)
(You don’ dar’st make de white boss frown)
(Bend your knees an’ bow your head)
(An’ pull dat rope until you’re dead)

Let me go ‘way from the Mississippi
Let me go ‘way from de white man boss
Show me dat stream called de river Jordan
Dat’s de ol’ stream dat I long to cross

(Ol’ man river, dat ol’ man river)
(He mus’ know sumpin’, but don’t say nothin’)
(He just keeps rollin’)
(He keeps on rollin’ along)

Long, low river
Forever keeps rollin’

(Don’ plant taters, he don’ plant cotton)
(And dem dat plants’ em is soon forgotten)
(But ol’ man river
(He jes’ keeps rollin’ along)

Long low river
Keeps singin’ dis song

You an’ me, we sweat an’ strain
Body all achin’ and wracked wid pain
Tote dat barge! Lift dat bale!
Git a little drunk and ya lands in jail

Ah gits weary an’ sick o’ tryin’
Ah’m tired o livin’ an’ skeered o’ dyin’
But ol’ man river
He jes’ keeps rollin’ along!

Río anciano

Hay un viejo llamado el Mississippi/ Es el viejo que a mí me gustaría ser/ Qué le importa si el mundo tiene problemas/ Qué le importa si la tierra no es libre// Río anciano, ese río anciano/ Debe saber algo, pero no dice nada/ Sólo sigue fluyendo/ sigue fluyendo a lo largo// No siembra papas, no siembra algodón/ y los que lo plantan pronto serán olvidados/ Pero el río anciano/ sigue fluyendo a lo largo// Tú y yo, sudamos y nos esforzamos/ Todo el cuerpo dolorido y arruinado por el dolor/ ¡Lleva esa barcaza! ¡Levanta ese fardo!/ Echa un pequeño trago y acabas en la cárcel// Ah acabas cansado y harto de intentarlo/ Oh, estoy cansado de vivir y asustado de morir/ Pero el río anciano/ sólo sigue fluyendo// Todos los negros trabajan en el Mississippi/ Todos los negros trabajan mientras la gente blanca juega/ arrastrando esos botes desde el alba hasta el ocaso/ sin conseguir descanso hasta el día del juicio final// (No mires arriba, no mires abajo)/ (No te atrevas a hacer fruncir el ceño al patrón blanco)/ (Dobla tus rodillas y baja tu cabeza)/ (y tira de esa cuerda hasta que te mueras)// Déjame ir lejos del Mississippi/ Déjame ir lejos del patrón blanco/ Muéstrame ese arroyo llamado río Jordán/ ése es el río que yo ansío cruzar// (Río anciano, ese río anciano)/ (Debe saber algo, pero no dice nada)/ (Sólo sigue fluyendo/ sigue fluyendo a lo largo)// Largo, río bajo/ para siempre sigue fluyendo// (No siembra papas, no siembra algodón)/ (y los que lo plantan pronto serán olvidados)/ (Pero el río anciano)/ (sigue fluyendo a lo largo)// Largo río bajo/ Tú y yo, sudamos y nos esforzamos/ Todo el cuerpo dolorido y arruinado por el dolor/ ¡Lleva esa barcaza! ¡Levanta ese fardo!/ Echa un pequeño trago y acabas en la cárcel// Ah acabas cansado y harto de intentarlo/ Oh, estoy cansado de vivir y asustado de morir/ Pero el río anciano/ sólo sigue fluyendo.

Fuente y otras versiones: http://lyricsplayground.com/alpha/songs/o/olmanriver.shtml

* A parte de la dificultad de traducir al castellano el sustantivo peyorativo nigger (usado aquí de manera irónica), estas líneas sufrieron, a lo largo de sus representaciones, variaciones, como la del año 36, en la que se sustituía niggers por coloured folks, gente de color.

EDIT., 16-08-11: tras ver la película subtitulada, he realizado algunos cambios en la traducción, con la que no estaba muy satisfecho. Empezando por el título y el estribillo, que siempre se ha solido traducir por “viejo hombre de río”, y que yo, valiente y pedante de mí, traduje como “viejo ribereño”: es el comienzo, realmente, el que nos da el sentido de la canción, tratándose de una humanización del río Mississippi. Así pues, resultaba ser una unión entre los conceptos de “hombre viejo” y “río”, y de ahí nuestra traducción, entendiendo que, mientras cualquier ser o cosa puede ser “viejo”, sólo el ser humano es anciano. De ahí la corrección de rollin’: al entenderlo como un hombre, traduje como rodando (por el río), pero al ser un río humanizado no hay realmente ningún motivo por el que no lo traduzca por “fluyendo”. Otros cambios, propiciados por la versión subtitulada, me han rebelado lo que se escondía bajo ciertas palabras: no ha sido un trabajo fácil, ya que, nótese, la canción está escrita en el dialecto de los negros del sur de entonces, es decir, de cómo pronunciaban ellos las palabras inglesas. Por supuesto y como siempre, estoy abierto a sugerencias y opiniones.

Show Boat, 1936

Para acabar con algo simpático: reconozco que la primera vez que oí la canción (no sobre Paul Robeson) fue en este capítulo de los Simpsons. Para quien no conozca la serie, el personaje que canta no es Robeson, sino el Dr. Hibbert, personaje de la serie:

Hijos de la niña de Hiroshima


La II Guerra Mundial estaba ya casi finalizada: Italia había sido ocupada ya por los Aliados y Hitler había sido acorralado en HiroshimaGembakuDome6747su búnquer. Pero el Imperio japonés, el tercero en discordia en esta historia, no se rendía y aspiraba a tener la hegemonía del Pacífico, dirigido por rancios generales que soñaban con las doradas edades feudales de los samuráis y su concepto del honor, no se rendía. Es entonces cuando el gobierno de Estados Unidos de Harry Truman decide llevar a cabo un plan, más propio de las potencias a las que se había vencido (Hitler lo había deparado para Inglaterra), y desatar un grito de horror cósmico sin precedentes. El 6 de Agosto de 1945, el “Enola Gay” lanza sobre Hiroshima al “muchachito” de Truman, la bomba nuclear “Little Boy”; tres días después, “Fat Man” caería sobre Nagasaki. Días después, Japón anuncia su rendición incondicional, el emperador Hiro-Hito se dirige por radio a su pueblo (algo impensable para un emperador) y los pilotos que lanzaron la bomba fueron condecorados… Mientras tanto millones de personas aún fallecían por los efectos de la radiación: una victoria en la que el perdedor no fue el imperio, sino el pueblo de Japón. (Más información: http://es.wikipedia.org/wiki/Bombardeos_at%C3%B3micos_sobre_Hiroshima_y_Nagasaki)

El hecho tendría consecuencias devastadoras sobre la conciencia humana universal, tanto, o quizás más, que la visión de las masas famélicas, torturadas, masacradas y moribundas de los campos de exterminio. Muchos positivistas, muchos científicos y pensadoresEstatua de la paz del Parque de la paz de Nagasaki. La mano derecha apunta hacia la amenaza de la bomba atómica mientras que la izquierda simboliza la paz eterna. Los ojos cerrados representan la oración por el descanso de las víctimas del bombardeo no podían dejar de pensar que aquello en lo que habían pensado, por lo que habían luchado, que la ciencia era la aliada de la humanidad, era una mentira y que la idea debía ser matizada: el propio Einstein no podía dejar de sentirse culpable, y el dramaturgo alemán Bertolt Brecht reflexionaba en estos términos: “Yo, que escribo esto, lo estoy haciendo con una máquina desconocida cuando nací. Me desplazo con los nuevos vehículos a una velocidad que mi abuelo no podía ni imaginarse; nada se movía entonces tan rápidamente. Y puedo elevarme por los aires, cosa que mi padre no podía hacer. Con mi padre pude ya hablar desde un continente a otro; pero sólo con mi hijo puedo ver las imágenes en movimiento de la explosión de Hiroshima.” (Pequeño organon para teatro, Sevilla, Don Quijote, 1991, p. 4) y sentenciaba «Así, sucede que los grandes inventos y descubrimientos son cada vez más una amenaza espantosa para la humanidad, y que cada nuevo invento se recibe hoy con un grito triunfal que se transforma en grito de horror.» (Escritos sobre teatro, Barcelona, Alba editorial, 2004, p. 77). Ante estos espantosos acontecimientos, la intelectualidad del mundo entero pidió más fuerte que antes aún la neutralidad absoluta de la ciencia y/ o bien, que el único fin de ésta fuera la mejora de las condiciones de vida de la humanidad entera.

NazimHikmetRanUno de aquellos intelectuales conmocionados por la tragedia fue el poeta turco Nâzim Hikmet (1902-1963), poeta de ideología marxista que sufrió la represión de su país en sus propias carnes por luchar con su pluma y su actitud por los derechos humanos universales. En su precioso poema de 1956 “Kiz Çocuğu”, “la niña”, expresa el dolor de todo un pueblo encarnado en una de sus más inocentes e impotentes víctimas:

Kiz Çocuğu

Kapıları çalan benim
kapıları birer birer.
Gözünüze görünemem
göze görünmez ölüler.

Hiroşima’da öleli
oluyor bir on yıl kadar.
Yedi yaşında bir kızım,
büyümez ölü çocuklar.

Saçlarım tutuştu önce,
gözlerim yandı kavruldu.
Bir avuç kül oluverdim,
külüm havaya savruldu.

Benim sizden kendim için
hiçbir şey istediğim yok.
Şeker bile yiyemez ki
kâat gibi yanan çocuk.

Çalıyorum kapınızı,
teyze, amca, bir imza ver.
Çocuklar öldürülmesin
şeker de yiyebilsinler.

La niña

Soy yo quien llama a tu puerta/ una por una./ No puedo ser vista por ti,/ porque los muertos son invisibles.// Han pasado cerca de 10 años/ desde que morí en Hiroshima./ Soy una niña de siete años./ Los niños muertos no crecen.// Primero, mi cabello se quemó por un remolino de fuego;/ mis ojos se volvieron sombríos,/ me convertí en un puñado de cenizas,/ mis cenizas se esparcieron por el viento.// No pido nada para mí/ de ti;/ los niños que se queman como papel no pueden ni siquiera comer golosinas.// Llamo a tu puerta,/ tía, tío, deme una firma:/ no deje que los niños sean asesinados/ y puedan comer golosinas también.

Nâzim Hikmet

(Traducción elaborada sobre la traducción al inglés que nos facilitó ya en su día Evin Okçuoğlu)

Versiones del poema en su lengua original: Zülfü Libanelli:

Zülfü Libanelli

Joan Baez, siempre sorprendente:

Sevingül Bahadir:


El poema de Hikmet alcanzó gran notoriedad y se tradujo a diversas lenguas. De esas traducciones, bastante pronto, muchoPaul_Robeson_1942s artistas realizaron canciones. Uno de ellos fue ese hombre de inmensa voz y humanidad, el actor, cantante y activista, por diversas causas, afroamericano Paul Robeson, que cantaba esta letra, bastante fiel al original turco. Sin embargo, lamento no poder disponer de ningún archivo sonoro en el que este gran artista, impresionante voz en aquel desgarro de canción “Ol’ man river”, la cante con su portentosa voz:

The little dead girl

This little girl is at your door,
At every door, at every door.

And I am she you cannot see,
I am at your door, at every door.
I am at your door, at every door.

And for this child will never be
That love and laughter you have known.

At Hiroshima do you see
My flesh was seared to bone,
My flesh was seared to bone.
My hair was blue aflame,
Hot were my poor eyes, hot my hands.
Now just a trace of ash remains
Where I had played on smiling sands.
Stranger, what can you do for me,
This little ash, this little girl?
This human child like paper burned

Dry ash the cooling wind shall swirl,
Dry ash the cooling wind shall swirl
This little maid unseared by strife.

Oh stranger please do this for me.
Your name for mankind’s peace and life,
And peace and life for all like me,
And peace and life for all like me.

La niñita muerta

Esta niñita está a vuestra puerta,/ en cada puerta, en cada puerta.// Y yo soy ella a la que no podéis ver,/ estoy a vuestra puerta, en cada puerta…// Y porque esta niña nunca será/ ese amor y risa que habéis conocido.// En Hiroshima, lo ves,/ mi carne se quemó hasta el hueso…/ mi pelo fue azul por las llamas,/ calientes estuvieron mis pobres ojos, calientes mis manos./ Ahora solo un rastro de cenizas permanece/ en donde yo jugaba en las arenas sonrientes./ Extraño, ¿qué puedes hacer por mí,/ esta pequeña ceniza, esta niñita?/ Esta niña humana como el papel se quemó.// Ceniza seca que el viento helador arremolinará…/ Esta damita abrasada por la lucha.// Oh extraño, por favor haz esto por mí./ Tu nombre por la paz y la vida de la humanidad,/ y la paz y la vida para todos los que son como yo,/ y la paz y la vida para todos los que son como yo.

http://www.antiwarsongs.org/canzone.php?id=2392&lang=it


También, otro gran artista de inmensa humanidad, el trovador por los derechos humanos y civiles Pete Seeger, haría una hermosa canción que, como las anteriores, se convertiría en un alegato por la paz y contra las armas:

I come and stand at every door
(The little girl)

I come and 
stand at every door
But no one hears my silent tread
I knock and yet remain unseen
For I am dead, for I am dead.

I’m only seven although I died
In Hiroshima long ago
I’m seven now as I was then
When children die they do not grow.

My hair
was scorched by swirling flame
My eyes grew dim, my eyes grew blind
Death came and turned my bones to dust
And that was scattered by the wind.

I need no
fruit, I need no rice
I need no sweet, nor even bread
I ask for nothing for myself
For I am dead, for I am dead.

All that I
ask is that for peace
You fight today, you fight today
So that the children of this world
May live and grow and laugh and play.

Vengo y me quedo en cada puerta

(La niñita)

Pete Seeger en vivoVengo y me quedo en cada puerta,/ pero nadie oye mi paso silencioso./ Llamo y todavía permanezco sin ser vista/ porque estoy muerta, porque estoy muerta.// Tengo sólo 7 años aunque morí/ en Hiroshima hace tiempo,/ tengo 7 años ahora como entonces,/ cuando los niños mueren no crecen.// Mi cabello se quemó por un remolino de fuego,/ mis ojos se volvieron sombríos, mis ojos se cegaron,/ la muerte vino y convirtió mis huesos en polvo/ y fueron dispersados por el viento.// No necesito fruta, no necesito arroz,/ no necesito dulces, ni siquiera pan;/ no pido nada para mí,/ porque estoy muerta, porque estoy muerta.// Todo lo que pido es aquello para la paz./ Luchad hoy, luchad hoy/para que los niños de este mundo/ puedan vivir crecer y reír y jugar.

Traducción y adaptación de Jeannette Turner

Música por James Walter

En 1966, los Byrds, los alumnos rockeros de Seeger, hicieron su versión, rompiendo un poco con la psicodelia de su Fifth Dimension:

AGUAVIVA - apocalipsis (Accion 1971)Y, finalmente, el grupo de folk-rock español Aguaviva incluía su propia versión en su disco temático Apocalipsis (1971). Es una versión distinta, en la que Manolo Díaz, compositor del tema, prefiere ahonda en el horror nuclear que en la esperanza y en la petición de paz; el tema, interpretado por el grupo, deja de ser un poco alegato por la paz y se convierte en un cuento de terror japonés bastante impresionante:

Escuchar: http://www.goear.com/listen/01d8fd9/la-nina-de-hiroshima-aguaviva

La niña de Hiroshima

Soy yo, soy yo quien llama a vuestra puerta,
aquí como en otros lugares y a todas !as puertas.
No os preocupéis si permanezco invisible.
No es posible ver a una pequeña muerta.
Soy yo, soy yo quien llama a vuestra puerta,
aquí como en otros lugares y a todas !as puertas.
No os preocupéis si permanezco invisible.
No es posible ver a una pequeña muerta.

Primero se incendiaron mis largos cabellos.
Mis manos ardieron al igual que mis ojos.
Mi cuerpo no fue más que un puñado de cenizas
mezcladas con el viento en un cielo nublado.

Aquí estaba yo hace diez años,
encontré la muerte en Hiroshima.
Soy sólo una niña, tenía siete años
pero los niños muertos no crecen.
Aquí estaba yo hace diez años,
encontré la muerte en Hiroshima.
Soy sólo una niña, tenía siete años
pero los niños muertos no crecen..

Primero se incendiaron mis largos cabellos
Mis manos ardieron al igual que mis ojos.
Mi cuerpo no fue más que un puñado de cenizas
mezcladas con el viento en un cielo nublado.

Aquí estaba yo hace diez años,
encontré la muerte en Hiroshima.
Soy sólo una niña, tenía siete años
pero los niños muertos no crecen.

En verdad, nada quiero de vosotros,
a mí ya nadie puede mimarme.
La niña, que ardió cual hoja de periódico
nunca más probará vuestros bombones.
Lalalà, la, la, la, la, la . . .

http://www.antiwarsongs.org/canzone.php?id=28363&lang=it

Música de Manolo Díaz

Acabamos con un tema diferente, un alegato por las víctimas y una crítica a la guerra fría a cargo de Lluís Llach: “Fills d’Hiroshima” (Lluís Llach):

Como dice el autor, las imágenes son duras
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