Del disco de 1969 de los Who, su gran ópera rock Tommy: la historia de un chico que se encierra en sí mismo, en una especie de autismo, tras contemplar un crimen, y que al romper su autismo decide fundar una nueva religión, convencido de ser una especie de nuevo Mesías, basada en el pin-ball. Más tarde, en 1975, fue llevada al cine por Ken Russell, contando con el propio Roger Daltrey como “Tommy adulto”.
Así pues, mientras los rockers juegan a las tragaperras, y los Ángeles del Infierno se ahostian, Toomy vuela difundiendo la palabra del pin-ball:
Sensation
While Tommy flies, the world is turning. Life goes on for you and me. Our chief concern is money earning, Why can’t someone set us free? Can’t you feel him? Can’t you feel him? Can’t you feel him? Can’t you feel him?*
I overwhelm as I approach you Make your lungs hold breath inside! Lovers break caresses for me Love enhanced when I’ve gone by
[Grounded angels, your wings are broken, time to mend and learn to fly.]**
You’ll feel me coming, A new vibration From afar you’ll see me I’m a sensation
They worship me and all I touch Hazy eyed they catch my glance, Pleasant shudders shake their senses My warm momentum throws their stance
You’ll feel me coming A new vibration From afar you’ll see me I’m a sensation
Soon you’ll see me can’t you feel me I’m coming Send your troubles dancing I know the answer I’m coming I’m coming I’m a sensation
I leave a trail of rooted people Mesmerised by just the sight, The few I touch now are disciples Love as One I Am the Light
Mientras Tommy vuela, el mundo sigue girando,/ la vida sigue para ti para mí./ Nuestra principal preocupación es ganar dinero,/ ¿por qué nadie nos puede liberar?/ ¿Puedes sentirlo?…// Abrumo al acercarme a vosotros/ ¡Hago que vuestros pulmones contengan la respiración!/ Los amantes abren caricias para mí/ El amor mejorado cuando he pasado. [Ángeles castigados, vuestras alas están rotas,/ es hora de arreglarlas y aprender a volar]**// Me sentiréis llegar,/ una vibración nueva/ Desde lejos me veréis/ Soy una sensación.// Me adoran a mí y a todo lo que toco/ Con ojos nublados me contemplan,/ estremecimientos agradables sacuden sus sentidos/ Mi cálido momento lanza su postura.// (…)// Pronto me veréis, ¿podéis sentirme?/ Ya llego/ Lanzar vuestros problemas bailando, yo sé la respuesta/ Ya llego, ya llego/ Soy una sensación.// Dejo un rastro de gente paralizada/ hipnotizada por la simple visión,/ a aquellos que toco ahora son discípulos/ El amor como uno, Yo soy la Luz.// ¡Yo soy la Luz!
Pete Townshend
The Who
* Añadido a la canción original (cantada por Pete Townshend) para la banda sonora.
** Las estrofas entre corchetes son cantadas por Roger Daltrey en la película, pero la banda sonora recoge los mismos versos del disco original de 1969.
En 1939 Hitler invadía Polonia, comenzando así la II Guerra Mundial, contra la que tanto habían prevenido los cerebros democráticos y revolucionarios más lúcidos del mundo, y que habían sido desoídos e ignorados, por impotencia, miedo, dejadez o connivencia, por los grandes gobiernos occidentales, que básicamente, con sus pactos secretos, habían dejado las fuerzas fascistas que componían el Eje hacer todo lo que quisieran: el Japón imperial –el gran perdedor de esta guerra-, desde mediados de los años 30 había comenzado ya su ofensiva contra China y todo el Pacífico intentando establecer una hegemonía imperial en toda Asia; Italia se había propuesto reconquistar parte del antiguo imperio romano conquistando la Península Balcánica y Etiopía –que fue la gran causa de protesta de los intelectuales de todo el mundo-; permitieron que alemanes e italianos (y otros) no sólo prestaran ayuda, sino que participaran activamente al lado de las fuerzas sublevadas contra la legítima República española, y que las máquinas de guerra de Hitler bombardearan poblaciones españolas; y el III Reich se había propuesto imponer un imperio nacional-socialista en toda Europa, y aquello fue la declaración de guerra oficial contra las dos potencias occidentales europeas, Francia y el Reino Unido, y, por otro lado, la Unión Soviética (de la cual, el gobierno férreo de Stalin también tuvo su parte de culpa al consentir a Hitler sus desmanes con el famoso pacto de no agresión). Por su parte, el ataque japonés a las costas orientales estadounidenses provocó la entrada en la guerra de los poderosos Estados Unidos, que combatiría en ese frente y, a la vez, enviaría tropas a Europa, oyendo por fin la petición de socorro de sus aliados.
Las motivaciones de los soldados estadounidenses para alistarse en esta guerra fueron tan diversas como interpretaciones hay de ella: descontando a los que fueron movilizados, unos se alistaron, por patriotismo, por creer que su modo de vida y su patria estaban amenazados; otros, por la defensa de la democracia; y otros, por combatir al fascismo, muchos de ellos ya habían combatido en las Brigadas Lincoln y Washington en la guerra civil española, dentro de las Brigadas Internacionales. Éstos últimos, sobre todo, crearon un interesante organon de canciones bélicas, que fueron recopiladas e interpretadas por ese gran grupo estadounidense de canciones revolucionarias: los Almanac Singers, formados por Woody Guthrie, Pete Seeger, Cisco Houston, Millard Lampell, Lee Hays, Sonny Terry y otros, que durante 1940 y 1943 grabaron canciones sindicalistas, revolucionarias, de los batallones Lincoln y de los soldados que combatieron en la II Guerra Mundial. Una de ellas fue ésta canción de amenaza y venganza contra el gran instigador de la guerra, sobre una melodía tradicional, escrita por ellos mismos para que fuera cantada por los soldados:
Round and round Hitler’s grave
I wish I had a bushel, I wish I had a peck, I wish I had a rope to tie Around old Hitler’s neck.
[Chorus (after each verse)]: Hey! Round and round Hitler’s grave, Round and round we’ll go. Gonna lay that poor boy down. He won’t get up no more.
Mussolini won’t last long Tell you the reason why We’re a-gonna salt his beef And hang it up to dry.
I’m-a going to Berlin To Mister Hitler’s town I’m gonna take my forty-four And blow his playhouse down.
The German Army general staff I guess they missed connections. They went a hundred miles a day But in the wrong direction.
Hitler went to Russia In search of Russian oil, But the only oil he’ll find there Is a pot in which he’ll boil.
Mister Hitler’s traveling mighty fast But he’s on a single track, He started down that Moscow road But now he’s coming back.
Alrededor y alrededor de la tumba de Hitler
Ojalá tuviera un cesto,/ ojalá tuviera un montón,/ ojalá tuviera una cuerda que atar/ alrededor del cuello del viejo Hitler.// [Estribillo (se repite después de cada estrofa)] ¡Hey! Alrededor y alrededor de la tumba de Hitler,/ alrededor y alrededor daremos vueltas./ Vamos a tumbar a ese pobre muchacho./ No se levantará nunca más.// Mussolini no durará mucho/ te digo por qué/ Vamos a salar a su ternera/ y colgarla para que se seque.// Me voy a Berlín/ a la ciudad del señor Hitler/ Voy a coger mi cuarenta y cuatro/ y volar su casa de muñecas.// Supongo que el estado mayor del general del ejército alemán/ perdió sus enlaces./ Fueron a cien millas el día/ pero en la dirección equivocada.// Hitler fue a Rusia/ buscando el petróleo ruso,/ pero el único petróleo que encontrará/ es una olla en la que será hervido.// El señor Hitler viaja asombrosamente rápido/ pero está en una sola pista,/ comenzó a recorrer esa carretera a Moscú/ pero ahora está regresando.
Words by Woody Guthrie, Millard Lampell and Pete Seeger (1941) Music adapted by Woody Guthrie from the traditional song "Old Joe Clark" (c) 1958 (renewed) by Woody Guthrie Publications. All rights reserved.
Ésta era una canción histórica, pero la que presento a continuación interpreta la alegría de aquel día. En 1969, la fabulosa banda de rock The Who publicó su fastuosa ópera-rock Tommy, la historia cantada de un chico que al ver un crimen horrible pierde el contacto con el mundo exterior volviéndose autista y que, al despertar ya de su autismo en la madurez, se propone fundar una nueva religión basada en aquello que había dominado inconscientemente durante su autismo: el pin-ball. En 1975, Ken Russell dirigió la versión cinematográfica, una película musical (aunque no realmente un musical) que contó con actores y cantantes como Ann Margret (Mrs. Walker), Robert Powell (capitán Walker), Oliver Reed (tío Frank), Tina Turner (la reina del ácido), Elton John (el campeón), Eric Clapton (el predicador) y Jack Nicholson (el especialista) entre otros; con Roger Daltrey como Tommy y Keith Moon como el pervertido tío Ernie. Y la banda sonora, por supuesto, a cargo de los Who. La banda sonora presentaba ciertas variaciones respecto al disco original; una de ellas es que, en el disco original, la guerra en la que muere el Capitán Walker es la 1ª, mientras que en la película se convierte en la 2ª. Y así comienza la historia: el capitán Walker desaparece en una misión mientras sobrevolaba el océano, dejando a su mujer embarazada. El hijo de ambos, Tommy, nace el día de la victoria. Pete Townshend mezcla la alegría del nacimiento del niño con la de la victoria final sobre el Eje en la voz de la enfermera:
Captain Walker/ It’s a boy
Captain Walker Didn’t come home His unborn child Will never know him We believe him missing With a number of men Don’t expect To see him again He’s believed to be missing With a number of men Don’t expect To see him again…
It’s a boy, Mrs. Walker, it’s a boy It’s a boy, Mrs. Walker, it’s a boy
A son! A son! A son!
Hear the joyful celebrations in the street It’s a boy born on this first day of peace
We’ve won! A son! We’ve won!
Capitán Walker/ Es un niño
El capitán Walker/ no vino a casa/ Su hijo no nato/ nunca le conocerá/ Le creemos perdido/ con un grupo de hombres/ No espere/ volver a verle./ Se cree que está perdido/ con un grupo de hombres/ No espere/ volver a verle.// Es un niño, señora Walker, es un niño…// ¡Un hijo! ¡Un hijo! ¡Un hijo!// Escuche las alegres celebraciones de la calle/ Es un niño nacido en el primer día de la paz.// ¡Hemos ganado! ¡Un hijo! ¡Hemos ganado!
Entre el 16 al 18 de junio de 1967, tuvo lugar en Monterey (California) el primer recital multitudinario de lo que entonces se llamaba pop, y acabó convirtiéndose en rock (las denominaciones varían, si hablamos de Estados Unidos o del Reino Unido; nosotros entendemos por rock a aquella música que, teniendo una base en el rock’n’roll clásico, explora y experimenta sus posibilidades, tanto musicales como líricas): la fórmula –que no era nueva- estaba tomada de los festivales de jazz y de folk de los años anteriores; sin ánimo alguno de desacreditar a estos precursores, Monterey (y su gran heredero, Woodstock) era mucho menos excluyentes, y admitía a músicos de jazz, folk y de lo que luego se llamaría World Music. Por otro lado era llevar a un plano mucho más ambicioso aquellos mini-festivales que se habían venido produciendo durante aquel año y el anterior en San Francisco: los Tribal Stomp (reunión de tribus) y los Human Be-In (“humanidad enrollada”), que contaban con los grupos de rock y psicodelia de San Francisco tocando en el parque, con la eventual asistencia de oradores revolucionarios y grupos religiosos de inspiración oriental, junto a magos y malabaristas. El Festival Internacional de la Música Pop de Monterey fue organizado por el grupo de folk-pop The Mamas & The Papas, el productor Alan Pariser y el publicista Derek Taylor, y pretendieron que a esta cita acudieran los grupos y músicos más punteros del momento de todos los estilos; pero la mayoría de los grandes y veteranos, tales como los Beach Boys, los Beatles, los Rolling Stones y Bob Dylan, declinaron la oferta por diversas circunstancias. De aquellos monstruos del pop británico sólo asistieron dos: los Who –tan fieles a su audiencia como ésta a ellos- y Eric Burdon, de los Animals, con su nueva formación.
Entre 1965 y 1966, con la partida del teclista Alan Price (motivada, en parte, por irreconciliables diferencias tanto musicales como personales con los otros miembros), los Animals originales comienzan su disgregación. En 1966, Eric Burdon recluta a un buen número de músicos para una nueva formación que sería llamada Eric Burdon & The Animals, con John Weider, Vic Briggs, Danny McCulloch y Barry Jenkins; con este nuevo grupo, Burdon, reconvertido en un bluesman progresivo y psicodélico, acudiría al Festival de Monterey, en donde realizarían una versión memorable del ya clásico de los Rolling Stones, “Paint it black”. Eric Burdon, que es un músico en constante crecimiento, quedó muy impresionado por los grupos nuevos que actuaron y las propuestas nuevas que representaban, a parte del ambiente general del festival, que representó el grito de alerta del nacimiento de una nueva generación. Todas estas impresiones las quiso plasmar, con la ayuda de su grupo, en una canción, un tributo a los grupos, cuyos sonidos característicos imitan al ser nombrados, y al público que asistió, que se tituló así, Monterey:
Monterey
The people came and listened Some of them came and played Others gave flowers away, yes they did
Down in Monterrey, Down in Monterrey.
Young gods smiled upon the crowd Their music being born of love Children danced night and day Religion was being born
Down in Monterrey
The birds and the airplane did fly Oh, Ravi Shankar’s music made me cry The who exploded into fire and light? Hugh Masekela’s music was black as night
The Grateful Dead blew everybody’s mind Jimmy Hendrix, baby, believe me, Set the world on fire, yeah
His majesty, Prince Jones, Smiled as he moved among the crowd Ten thousand electric guitars Were grooving’ real loud, yeah
You want to find the truth in life. Do not pass music by And you know I would not lie, no, I would not lie, No, I would not lie
Down in Monterrey All right!
Three days of understanding, Of moving with one another Even the cops grooved with us Do you believe me, yeah?
Down in Monterrey, down in Monterrey Down in Monterrey, down in Monterrey
I think that maybe I am dreaming Monterrey, Monterrey Down in Monterrey Did you hear what I say? Down in Monterrey
La gente vino y escuchó/ algunos de ellos vinieron y tocaron/ otros lanzaron flores, sí lo hicieron// En Monterey…// Los jóvenes dioses sonreían desde arriba a la multitud/ Su música había nacido con amor/ Los niños bailaban día y noche/ La religión estaba naciendo.// En Monterey// Los pájaros y el aeroplano volaron (1)/ Oh, la música de Ravi Shankar (2) me hizo llorar/ los Who ¿explotaron en fuego y luz? (3)// La música de Hugh Masekela era negra como la noche (4).// Los Grateful Dead alucinaron a todos/ Jimi Hendrix, cariño, créeme,/ prendió fuego al mundo, sí (5)// Su Majestad, el Príncipe Jones (6),/ sonreía al moverse entre la multitud/ Diez mil guitarras eléctricas/ estamos tocando bien alto, sí// Queréis encontrar la verdad de la vida./ No paséis de la música/ y sabéis que yo no mentiría, no, no mentiría,/ no, yo no mentiría.// En Monterey/ ¡Muy bien!// Tres días de comprensión,/ de moverse uno con otro/ Hasta los polis fliparon con nosotros (7)/ ¿Me crees, sí?// En Monterey, en Monterey…// Pienso que a lo mejor estoy soñando (8)// Monterey, Monterey,/ en Monterey/ ¿Oíste lo que he dicho?/ En Monterey.
Eric Burdon & The Animals
Notas
Muchas de estas actuaciones a las que se refiere Burdon ya las recopilé en esta entrada: https://albokari2.wordpress.com/2007/08/28/monterrey-pop-festival/ –aunque puede que muchos de esos vídeos ya no estén disponibles-; sin embargo, aquí van algunas explicaciones:
(1) Al traducir al castellano la frase “The birds and the airplane did fly” se pierde la ambigüedad de la letra escuchada, ya que se refieren respectivamente a los Byrds –que se llamaron birds con “y” porque en el argot de la época, bird significaba “marica”, y además así imitaban a los Beatles, que decidieron llamarse beetles –escarabajos- con “ea”, para hacer pensar en la música beat- y a Jefferson Airplane, el grupo revelación de psicodelia de esos dos años.
(2) Supongo que la mayoría, si no todos, conocéis más o menos a Ravi Shankar: la historia de cómo llegó a ser casi un músico de rock, sin abandonar el folklore indio, es muy curiosa, y se debe a George Harrison. Durante unas vacaciones, Harrison, que comenzaba a enamorarse de la cultura hindú en la mayoría de sus aspectos, viajó a la India, en donde contactó con Shankar, quien, en honor a la verdad, era más o menos conocido en occidente en círculos más cultos; George, que ya había tocado el sitar en el tema “Norwegian wood”, le pidió a Shankar que le instruyera en lo básico: esto hizo mucha gracia al maestro sitarista, cuyo aprendizaje en el instrumento indio por excelencia le había llevado más de 30 años. Gracias a George Harrison y a otros músicos hinduizantes, Shankar fue introducido en los círculos de la música pop y convertido en un icono de la contracultura musical como los propios Beatles o Jimi Hendrix. En el festival de Monterey, sus largos ragas dejaron tan maravillada a la audiencia que arrancó de sus asientos a la mayoría de los asistentes que rompieron en largos y efusivos aplausos.
(3) Los Who se habían comenzado a hacer famosos por acabar sus conciertos con la apoteósica costumbre de destrozar sus instrumentos mientras sonaban los acordes de su canción de cierre. El músico Al Kooper sugirió que fueran los últimos en actuar por esta razón, pero Pete Townshend no soportaba la idea de actuar después de Hendrix, el cual se burló de él y le dijo que si quería ser el primero en romper una guitarra sobre el escenario; el pique entre los dos titánicos guitarristas se solucionó con un “a cara o cruz” que ganaron los Who, quienes, siguiendo su costumbre, destrozaron sus instrumentos durante los acordes finales de “My generation”. Lo que no sabían es que Hendrix pretendería superar su actuación… (ir a nota 5)
(4) Hugh Masekela era un músico de jazz-fusión procedente de Sudáfrica.
(5) y así pues, The Jimi Hendrix Experience saltó al escenario dolorido tras la actuación de los Who. Jimi, que se había tenido que ir al Reino Unido para poder grabar, con sus malabares guitarrísticos, dejó a la audiencia flipando, pero cuando durante los acordes finales de “Wild thing” (un tema de los Troggs), Hendrix no sólo comenzó a romper su guitarra a golpes y a follarse el amplificador, sino que, como si fuera un sacrificio ritual, prendió fuego a su propia guitarra, y terminó por destrozarla a golpes contra el suelo mientras los amplificadores aún vibraban con los últimos acordes. Mama Cass, de Mamas & Papas, le dijo a Townshend al principio que le estaba robando su escena, pero Townshend respondió que sólo la estaba representando; sin embargo, el guitarrista de los Who reconoció que, si aquello fue una competición, fue Hendrix el que la ganó, y calificó su actuación como de epifanía (Visto en Historia del Rock & Roll: Enchufándose).
(6) Se refiere a Brian Jones, de los Rolling Stones, que acudió al festival y acompañó a Jimi Hendrix; también fue el encargado de presentar su actuación. Jones apareció vestido con sus mejores galas, con una pose algo mayestática, atrayendo la atención de las cámaras y de los curiosos, aunque pudo moverse sin muchos problemas a pesar de su condición de super-estrella del pop.
(7) La película rodada por D. A. Pennebaker muestra como los agentes de policía parecían estar no solo colaborando, sino encantados y disfrutando de muchas cosas: imágenes curiosas que se repetirían en Woodstock, cuando en la película de Michael Wadleigh se recogen las impresiones del jefe de policía, según el cual “debemos estar orgullosos de estos chicos”.
(8) Estas líneas, “I think I maybe I’m dreamin’”, pertenecen a la canción “Renaissance Fair” de los Byrds, escrita a raíz de aquellos encuentros de la juventud en esos Tribal Stomp y Human Be-In.
Una de las grandes canciones de los Who, “Baba O’Riley”, escrita inicialmente para la frustrada ópera rock Lifehouse, y que abría su apabullante disco de 1971 Who’s next. El enigmático título de la canción, más que una mezcla de nombres, es una mezcla de conceptos de, por un lado, las enseñanzas filosófico-religiosas del gurú Meher Baba (que parece ser autoproclamó reencarnación de Krishna, sobran las apreciaciones), y, por otro, de la música experimental del músico Terry Riley. Aparte, lo que hace a la canción interesante a día de hoy, como en su día, es la sorprendente mezcla de rock duro y rock progresivo, más un aire étnico irlandés por el violín de Dave Arbus, idea del malparado batería Keith Moon.
Baba O’Riley
Out here in the fields I fight for my meals I get my back into my living.
I don’t need to fight To prove I’m right I don’t need to be forgiven. yeah,yeah,yeah,yeah,yeah
Don’t cry Don’t raise your eye It’s only teenage wasteland
Sally, take my hand We’ll travel south cross land Put out the fire And don’t look past my shoulder.
The exodus is here The happy ones are near Let’s get together Before we get much older.
Teenage wasteland It’s only teenage wasteland. Teenage wasteland Oh, yeah It’s only teenage wasteland They’re all wasted!
Aquí fuera en los campos/ lucho por mis alimentos/ me centro en mi vida.// No necesito luchar/ para demostrar que tengo razón/ No necesito ser perdonado./ Sí, sí, sí…// No llores/ no levantes tu ojo/ Sólo es yermo joven// Sally, coge mi mano/ Viajaremos al sur a través de la tierra/ apaga el fuego/ y no mires más allá de mi hombro.// El éxodo está aquí/ los dichosos están cerca/ Reunámonos/ antes de que envejezcamos demasiado.// Yermo joven/ Es sólo yermo joven./ Yermo joven/ Oh, sí/ Es sólo yermo joven/ ¡Todos ellos están desperdiciados!
Una canción realmente bonita, de los incombustibles The Who: “Behind Blue Eyes” (tras ojos azules), que nos habla de la incomprensión: un chico que nadie toma por malo, y se espera de él que actúe de la manera que se espera de él por su atractivo. La wikipedia nos da dos posibles orígenes de la canción:
«Behind Blue Eyes» se canta desde el punto de vista del villano principal de Lifehouse*, Jumbo. La letra es un lamento en primera persona de Jumbo, que siempre está enojado y lleno de angustia a causa de toda la presión y la tentación que le rodea. La canción estaba destinada a ser el tema ícono del proyecto.
Algunos miembros de The Who aludieron como inspiración original en la escritura de la canción a un amigo cercano de «ojos azules», el profesor canadiense de Ciencias Políticas Geoffrey Stevens.
Daltrey, por su parte, comentó que la canción relataba la soledad y presión que caía sobre Townshend de ser el integrante que aportaba las ideas en el grupo. Richard Barnes, compañero de cuarto en el colegio de Townshend, comentó que «era un gran peso para él» ya que tras el gran éxito de Tommy, todos le preguntaban: «¿Qué harás ahora?». En etapas dificiles, Daltrey quiso acercarse más a Pete, pero debió contenerse debido a que este se encontraba en etapas creativas, donde era mejor dejarlo solo. Debido a esta situación, Daltrey expresó que «Pete debió sentirse muy solo» y que «debió sentir que no nos importaba nada de él»
*Lifehouse iba a ser una nueva ópera-rock, pero su proyecto fue abandonado y en vez de eso, devino en el disco de rock duro Wo’s next (1971)
Behind blue eyes
No one knows what it’s like To be the bad man To be the sad man Behind blue eyes
No one knows what it’s like To be hated To be fated To telling only lies
But my dreams They aren’t as empty As my conscience seems to be
I have hours, only lonely My love is vengeance That’s never free
No one knows what it’s like To feel these feelings Like I do And I blame you
No one bites back as hard On their anger None of my pain and woe Can show through
But my dreams They aren’t as empty As my conscience seems to be
I have hours, only lonely My love is vengeance That’s never free
When my fist clenches, crack it open Before I use it and lose my cool When I smile, tell me some bad news Before I laugh and act like a fool
If I swallow anything evil Put your finger down my throat If I shiver, please give me a blanket Keep me warm, let me wear your coat
No one knows what it’s like To be the bad man To be the sad man Behind blue eyes
Nadie sabe lo que es ser como/ ser el malo/ el triste/ tras ojos azules.// Nadie sabe lo que es ser/ odiado/ ser condenado/ a contar sólo mentiras.// Pero mis sueños no están tan vacíos/ como parece estarlo mi conciencia.// Tengo horas, sólo soledad/ Mi amor es venganza/ que nunca es libre.// Nadie sabe lo que es/ sentir estos sentimientos/ como los siento/ y te culpo.// Nadie se traga tan duro/ su ira/ nada de mi pena y aflicción/ puedo mostrar.// Pero mis sueños no están tan vacíos/ como parece estarlo mi conciencia.// Tengo horas, sólo soledad/ Mi amor es venganza/ que nunca es libre.// Cuando mi puño se aprieta, se abre/ antes de usarlo y perder mi atractivo/ Cuando sonrío, dime alguna mala noticia/ antes de que me ría y actúe como un tonto// Si me trago algo malo/ aprieta tu dedo en mi garganta/ Si tiemblo, por favor dame una manta/ tenme caliente, déjame llevar tu abrigo// Pero mis sueños no están tan vacíos/ como parece estarlo mi conciencia.// Tengo horas, sólo soledad/ Mi amor es venganza/ que nunca es libre.
Uno de los más rabiosos y mejor templados himnos políticos del rock duro hippie es esta formidable canción de los Who, uno de los grupos de rock más antiguos con más constancia profesional y, en consecuencia, gran fidelidad por parte de sus seguidores. Es una canción de principios de los 70 que se constituyó como una de las grandes canciones políticas del rock de los 60 y 70 al igual que "Volunteers" de Jefferson Airplane, "Peace frog" de los Doors, o "Street fighting man" de los Rolling Stones. Disfrutad de este grito rebelde bien templado con la rabia y el buen hacer de The Who:
Ésta se la dedico al capullo de Antonio
We Won’t Get Fooled Again
We'll be fighting in the streets With our children at our feet And the morals that they worship will be gone And the men who spurred us on Sit in judgement of all wrong They decide and the shotgun sings the song
I'll tip my hat to the new constitution Take a bow for the new revolution Smile and grin at the change all around Pick up my guitar and play Just like yesterday Then I'll get on my knees and pray We don't get fooled again!
The change, it had to come We knew it all along We were liberated from the fold, that's all And the world looks just the same And history ain't changed 'Cause the banners, they are flown in the next war
I'll tip my hat to the new constitution Take a bow for the new revolution Smile and grin at the change all around Pick up my guitar and play Just like yesterday Then I'll get on my knees and pray We don't get fooled again No, no!
I'll move myself and my family aside If we happen to be left half alive I'll get all my papers and smile at the sky Though I know that the hypnotized never lie Do ya?
There's nothing in the streets Looks any different to me And the slogans are replaced, by-the-bye And the parting on the left Are now parting on the right And the beards have all grown longer overnight
I'll tip my hat to the new constitution Take a bow for the new revolution Smile and grin at the change all around Pick up my guitar and play Just like yesterday Then I'll get on my knees and pray We don't get fooled again Don't get fooled again No, no!
Yeaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaah!
Meet the new boss Same as the old boss
Estaremos luchando en las calles/ con nuestros hijos a nuestros pies,/ y la moral que ellos adoran se irá./ Y los hombres que nos estimularon/ se sentarán en el banquillo de los acusados/ por todo lo malo que decidieron y el rifle cantará la canción.// Inclinaré mi sombrero por la nueva constitución,/ cojo un arco para la nueva revolución,/ sonrío y hago muecas al cambio que hay alrededor,/ cojo mi guitarra y toco/ justo como ayer,/ entonces me pongo de rodillas y rezo:/ ¡No nos engañarán otra vez!// El cambio ha de venir,/siempre lo hemos sabido;/ fuimos liberados de estar doblados, eso es todo/ y el mundo parecía justo el mismo,/ y la historia no cambió/ porque las banderas están hondeando en la próxima guerra.// Me apartaré a mí y a mi familia a un lado/ si nos ocurre que nos dejen estar medio vivos,/ cogeré todos mis papeles y sonreiré al cielo, aunque sé que los hipnotizados nunca mienten,/ ¿no crees?// No hay nada en las calles/ que me parezca diferente,/ y las consignas son reemplazadas por el adiós,/ y los partidos de izquierdas/ son ahora los partidos de derechas,/ y las barbas se han hecho todas más largas durante la noche.// Descubres que el nuevo jefe/ es igual que el viejo jefe.
Reconozco que por lealtad cronológica, esta entrada debería haber
aparecido en junio. Pero la pongo ahora siguiendo el curso de la
historia del movimiento hippy que he hecho aquí mismo. He reunido algunas de las más memorables actuaciones, pero hubo más…
En Junio de 1967, el llamado Verano del Amor por la explosión cultural
o pseudo-cultural, según se mire, que sucedía en San Francisco, la
banda de folk-pop The Mamas & The Papas, junto a su productor Lou
Adler, decidieron celebrar todo aquello que estaba pasando entre la
juventud con un concierto multitudinario gratuito, siguiendo un poco
los guiones de los tradicionales festivales de jazz (en los que dicho
sea de paso, tuvieron una actuación polémica Chuck Berry primero y Bob
Dylan después). Para ello, la organización quiso reunir lo más puntero
de entonces del pop británico, el folk-rock, el blues y la psicodelia.
Para ello pretendieron reunir, sin pagar un dóllar, a los grandes hasta
entonces junto a nuevas promesas del pop y el rock: no obstante, por
motivos diversos, los Beatles, los Rolling Stones, los Beach Boys y Bob
Dylan rehusaron la oferta, aunque Brian Jones asistió como público. A pesar de la decepción que debió suponer
esto, su lado positivo fue que se pudo centrar la atención en los
nuevos talentos, para los que incluso este festival fue el comienzo de
su leyenda tanto a nivel nacional como internacional. Se pretendía que
fuera una celebración de la nueva conciencia, con flores y paz y esas
cosas… Y funcionó, y de qué manera ("Monterrey", por Eric Burdon & The Animals):
Para empezar, el himno de aquellos días. Scott McKenzie era un
antiguo compañero de John Phillips, el alma de Mamas & The Papas,
en los días del grupo folk The Journeymen. Cuando McKenzie grababa su
primer LP, John le regaló una canción que sería el único éxito de este
cantante armonioso de folk-rock. Le presenta Mama Cass y le acompaña
John Phillips y los músicos que acompañaban a Papas & Mamas:
Hubo dos grupos británicos que decidieron no faltar a la cita. Los
primeros de ellos, The Who, siempre dispuestos a tocar allá donde se
les necesite y a no defraudar a su audiencia… ni a dejar el escenario
en pie:
Por su parte, tras la ruptura de los Animals originales, aquel grupo de rythm’n’blues que sonaba tan profesional, Eric Burdon, todo un activista del movimiento hippie, presentaba a los nuevos Animals, con esta versión de un clásico de los Rolling Stones:
Junto a ellos, los ya populares grupos de folk-rock de California y Nueva York. Simon & Garfunkel
fueron invitados al festival; fueron un dúo de folk convencional sin un
gran éxito hasta que su productor electrificó su canción "The sounds of
silence", y desde entonces continuaron como dúo de folk-rock hasta su
no-amistosa separación debido a problemas tanto políticos como
musicales. Sobre la inclusión del dúo en el fenómeno hippy habría mucho
que debatir; no obstante, su estilo suave y simpático, casi naïf, les
hacía merecedores de un puesto:
Y, por supuesto, una canción que ya era leyenda con tan sólo 2 ó 3 años:
Por su parte, tampoco se podía dejar de invitar de lado a los Byrds: ellos habían inventado el folk rock prácticamente, tomando de Dylan, tomando de los Beatles, de Pete Seeger. Para el año 67 ya habían mezclado estas influencias con jazz contemporáneo, configurando la psicodelia que habían contribuido a crear. Aquí los tienes, tocando una canción muy famosa por aquellas días que también interpretaron Love, The Leaves y Jimi Hendrix Experience:
Buffalo Springfield fue uno de los más jóvenes grupos de folk-rock. Contó desde el principio con Stephen Stills y Neil Young; no obstante, en Monterrey Neil no tocó, y fue sustituido para ello por el byrd David Crosby:
Y, por supuesto, los propios organizadores del festival: The Mamas & The Papas, un grupo que representaba el lado amable y bonito de los hippies, aunque a veces artificial, que conjugaba el pop y el soul con el folk bien templado con sus armonías vocales:
Pero también fueron grupos desconocidos internacionalmente y nacionalmente, pero no así regionalmente, generalmente de blues. Uno de ellos, fueron aquellos monstruos del blues más puro a la par que renovado: Canned Heat
Otros, no obstante, eran bien conocidos como músicos acompañantes. Paul Butterfield Blues Band, con Mike Bloomfield a la guitarra, eran bien conocidos como acompañantes de Bob Dylan durante aquel festival de jazz tan polémico:
Pero, los grandes descubrimientos a nivel de nueva escuela de música, fueron sin lugar a duda los nuevos grupos de rock de San Francisco. Particularmente dos de ellos, Jefferson Airplane y Grateful Dead, se convirtieron en los auténticos símbolos musicales del movimiento hippie. Jefferson Airplane fue el primero de aquellos grupos en grabar un LP, abriendo el filón de San Francisco. Formado por músicos de folk, a estas alturas se les seguía considerando un grupo de folk-rock que iba incorporando los elementos psicodélicos que serían su marca de fábrica:
No obstante, para muchos, The Grateful Dead era mejor grupo. Por lo menos, sus fans se mostraron leales hasta la muerte de Jerry García, sin caer en fanatismos:
Otros fueron Quicksilver Messenger Service,
Country Joe & The Fish, comandados por el cantautor Country Joe McDonald, una de las bandas más politizadas del movimiento hippie:
Y Big Brother & The Holding Company:
La actuación de Big Brother fue la presentación a nivel nacional del gigantesco talento de Janis Joplin, que, aunque aquí es solo la vocalista del grupo, muchos fueron los que percibieron que Janis tenía que ser un todo y no una parte:
Otro de los grandes descubrimientos que acaecieron durante el festival fue la de este muchacho negro. Jimi Hendrix había sido músico de estudio y de giras de estrellas tan rutilantes como Ike & Tina Turner, Chuck Berry, Little Richard… Pero a la hora de comenzar su carrera en solitario se topó con la incomprensión y, a menudo, con el racismo, hasta que Chas Chandler, bajista de los Animals, le descubrió y se lo llevó a Londres, en donde formó el grupo de blues-rock Jimi Hendrix Experience. Aquí, ya conocido, volvía triunfalmente demostrando lo que valía al país que le había dado la espalda:
Como guitarristas salvajes, en el festival Jimi y Pete Townshend, de los Who, tuvieron una discusión de quién actuaría primero. Lo echaron a suertes y ganó Townshend el honor de ser el 1º en destrozar una guitarra sobre aquel escenario:
Pero cuando le tocó el turno a Hendrix…
Para acabar, dos invitados de excepción. Otis Redding era, y es, una super-estrella del soul y de la música negra en general: tan pronto ponía al público a dar brincos como los ponía de rodillas llorando por la historia de desamor que estaba contando. Pocos días después de esta actuación, Otis fallecía tras sufrir un accidente de avión:
Ravi Shankar, sitarista indio, era en el 67, gracias a la corriente mística que invadía a la nueva generación, en todo un icono. Sus discos se vendían tan bien como losde los Beatles. Fue Shankar quien enseñó a George Harrison las técnicas básicas del sitar, y fue Harrison quien le introdujo en el panorama underground. Ravi Shankar fue el único músico que cobró porque tenía que pagarse el billete de avión para poder volver a la India:
Éste fue el primero de aquellos festivales multitudinarios de los hippies. Les seguirían otros, con más o menos fortuna, siendo Woodstock el que no sólo se le acercó, sino que lo superó. Pero éste fue el primero, y todo un ejemplo de que un grupo muy numeroso de personas podía convivir durante tres días sólo por la música.
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